PATIENT EDUCATI N The American College of Obstetricians and Gynecologists WOMEN’S HEALTH CARE PHYSICIANS El Embarazo • SP182 La obesidad y el embarazo L a obesidad es un problema de salud grave en Estados Unidos. Cuando una mujer es obesa, su salud y la salud del bebé se pueden ver gravemente afectadas. Si ya está embarazada, recibir atención prenatal adecuada, alimentarse bien y hacer ejercicio regularmente pueden reducir su riesgo y el de su bebé de presentar problemas. Si está planeando quedar embarazada, la mejor manera de evitar los problemas causados por la obesidad es adelgazar antes de quedar embarazada. Este folleto explica •la definición de obesidad •los riesgos de la obesidad durante el embarazo •el control de la obesidad durante el embarazo •el trabajo de parto y el parto •situaciones especiales después del parto •la pérdida de peso después del embarazo Definición de obesidad El sobrepeso se define como un índice de masa corporal (IMC) de 25–29.9. La obesidad se define cuando el IMC es de 30 en adelante. Puede determinar su propio IMC usando una calculadora de IMC disponible en ciertos sitios de Internet, como en www. nhlbisupport.com/bmi. La cantidad de mujeres obesas en Estados Unidos ha aumentado en gran medida durante los últimos 25 años. La obesidad también ha pasado a ser un grave problema de la salud en las mujeres embarazadas. Más de la mitad de las mujeres embarazadas tienen sobrepeso o están obesas. Riesgos durante el embarazo La obesidad durante el embarazo aumenta el riesgo de que su bebé presente los siguientes problemas: • Defectos congenitus—Los bebés que nacen de madres obesas corren un mayor riesgo de tener defectos congénitos, como defectos del corazón y defectos del tubo neural. • Problemas con los exámenes—El exceso de grasa corporal puede dificultar la capacidad para ver ciertos problemas en la anatomía del bebé en un examen de ecografía (ultrasonido). También puede ser más difícil examinar el ritmo del corazón del bebé durante el trabajo de parto si es obesa. • Macrosomía—En esta afección, el bebé es más grande de lo normal. Cuando ocurre, puede aumentar el riesgo de que el bebé sufra alguna lesión durante el parto. Por ejemplo, el hombro del bebé podría quedar atorado después de que sale la cabeza. La macrosomía también aumenta el riesgo de tener un parto por cesárea. • Parto prematuro—Los problemas asociados con la obesidad de la madre pueden hacer que se deba dar a luz al bebé antes de tiempo. Los bebés prematuros tienen una mayor tendencia a presentar problemas de salud, incluyendo problemas respiratorios, con la alimentación y dificultades con el desarrollo y el aprendizaje posteriormente en la vida. • Nacimiento de un niño muerto—El riesgo de que esto ocurra aumenta mientras mayor sea el IMC de la madre. La obesidad durante el embarazo también la expone a presentar problemas graves de la salud: • Presión arterial alta—La presión arterial alta que comienza durante la segunda mitad del embarazo se conoce como hipertensión gestacional. Este problema médico puede causar complicaciones graves. Las mujeres obesas corren un mayor riesgo de presentar esta enfermedad que las mujeres que no son obesas. • Preeclampsia—La preeclampsia es una enfermedad grave tanto para la mujer como para su bebé. Aunque la hipertensión gestacional es la señal más común de preeclampsia, este problema médico afecta a todos los órganos del cuerpo. Los riñones y el hígado pueden dejar de funcionar correctamente. En casos raros, puede ocurrir un derrame cerebral. El feto corre peligro de presentar problemas de desarrollo y puede haber problemas con la placenta. Puede incluso ser necesario que se adelante la fecha del parto, aun si el bebé no se ha desarrollado completamente. En casos extremos, la mujer, el bebé o ambos pueden morir. • Diabetes gestacional—Niveles elevados de glucosa (azúcar) en la sangre durante el embarazo pueden aumentar el riesgo de tener un bebé muy grande y un parto por cesárea. Las mujeres que han tenido diabetes gestacional tienen una mayor tendencia a tener diabetes en el futuro, al igual que sus hijos. A pesar de estos riesgos, puede tener un embarazo saludable y un bebé sano aun si es obesa. Tendrá que colaborar con su proveedor de atención médica para dar seguimiento a su peso, recibir atención prenatal regular y tomar medidas para lograr el mejor estado de salud posible durante su embarazo. Aumento de peso recomendado durante el embarazo Peso antes del embarazo IMC Peso normal Sobrepeso Obesidad Intervalo de aumento total de peso (libras) 18.5–24.9 25–35 25–29.915–25 30 o mayor 11–20 Modificado del Institute of Medicine. Weight gain during pregnancy: reexamining the guidelines. Washington, DC: The National Academies Press; 2009. El control de la obesidad durante el embarazo En la primera visita prenatal, su proveedor de atención médica medirá su estatura y peso y podría hacerle preguntas sobre sus hábitos de alimentación y de ejercicio. También hablarán sobre el peso que debe aumentar (vea la tabla “Aumento de peso recomendado durante el embarazo”). Estas pautas sobre el peso ilustran los intervalos de aumento de peso que están asociados con los mejores desenlaces posibles tanto para las mujeres embarazadas como para sus bebés. Nutrición y ejercicio Alimentarse bien y hacer ejercicio regularmente son importantes para tener un embarazo saludable. Estos dos hábitos también pueden guiarla hacia un estilo de vida más saludable después del embarazo. Durante el embarazo, los alimentos que consume suministran la energía a las actividades del cuerpo y contribuyen al desarrollo de su bebé. Encontrar un equilibrio entre consumir alimentos saludables y mantener un peso saludable es importante para su salud y la de su bebé. Una mujer embarazada necesita solo 300 calorías adicionales al día, que es aproximadamente las calorías en un vaso de leche descremada y la mitad de un sándwich. Si necesita ayuda para planear una dieta saludable, su proveedor de atención médica puede aconsejarle recibir asesoramiento sobre nutrición. Si nunca antes ha hecho ejercicios, el embarazo es un momento estupendo para comenzar a hacerlo. Hable sobre su plan de ejercicio con su proveedor de atención médica para asegurarse de que no tenga ningún problema médico que le impida hacer ejercicios. Comience con solo 5 minutos de ejercicio al día y agregue 5 minutos todas las semanas. Su objetivo es mantenerse activa durante 30 minutos todos los días. Caminar es una buena opción si es nueva en cuanto a hacer ejercicio. Las caminatas vigorosas ejercitan todas las partes del cuerpo y no ejercen demasiada presión en las articulaciones. La natación es otro tipo bueno de ejercicio para las mujeres embarazadas. Debido a que el agua le apoya el peso, puede evitar lesiones o torceduras de músculos. También la ayuda a mantenerse fresca. El control del peso Situaciones especiales después del parto Usted y su proveedor de atención médica llevarán un registro de cuánto peso ha subido en cada visita prenatal. También se examinará el desarrollo de su bebé. Tenga en cuenta que incluso en las mujeres obesas, el embarazo no es el momento para tratar de adelgazar activamente. Sin embargo, si es obesa y está aumentando menos de lo que recomiendan las pautas, y si su bebé se está desarrollando bien, aumentar menos de peso que lo que recomiendan las pautas puede ser beneficioso, como un menor riesgo de necesitar un parto por cesárea y tener un bebé muy grande. Si su bebé no se está desarrollando bien, puede tener que hacer cambios a su dieta y su plan de ejercicio. Su proveedor de atención médica podría hacerle una prueba de diabetes gestacional durante los 3 primeros meses de embarazo. Las mujeres con sobrepeso y obesas tienen una mayor tendencia de presentar esa complicación que las mujeres cuyo peso es normal. Puede que le hagan esta prueba otra vez en los últimos meses de embarazo. Una vez que se encuentre en casa con su nuevo bebé, siga con sus hábitos saludables de alimentación y de ejercicio para lograr un peso normal. Amamantar a su bebé es la mejor manera de alimentarlo, y también puede ayudarle a perder peso después del parto. En general, las mujeres que amamantan a sus bebés durante por lo menos unos meses tienden a perder el peso aumentado durante el embarazo más rápidamente que las mujeres que no lo hacen. Si tuvo diabetes gestacional durante el embarazo, corre un mayor riesgo de padecer de diabetes después del embarazo. Deberá hacerse pruebas de seguimiento del nivel de glucosa entre las semana 6 y la semana 12 después de dar a luz. Si los resultados de la prueba son normales, deberá volver a hacerse pruebas de diabetes cada 3 años. Mantener un peso saludable, llevar una dieta balanceada y mantenerse activa pueden reducir su riesgo de padecer de diabetes en el futuro. El trabajo de parto y parto A muchas mujeres les resulta difícil perder el peso que aumentaron durante el embarazo. Si tiene sobrepeso o está obesa y planea otro embarazo en el futuro, hable con su proveedor de atención médica sobre adelgazar y lograr un peso más saludable con anticipación. Perder el exceso de peso antes de quedar embarazada es de especial importancia si tuvo complicaciones en el embarazo previo. Esto se recomienda también porque con cada embarazo el aumento de peso se puede acumular. Permita tener suficiente tiempo para ponerse en forma. Elija un método anticonceptivo y comience a usarlo antes de que usted y su pareja comiencen a tener relaciones sexuales otra vez. A medida que se acerca la fecha prevista del parto, le podrían recomendar atenderse con especialistas que pueden brindarle los cuidados que necesita durante el parto. Puede acudir a un anestesiólogo para hablar sobre las opciones disponibles para controlar el dolor durante el trabajo de parto y el parto. El parto vaginal es la manera ideal de tener su bebé. Sin embargo, no siempre es posible tener un parto vaginal y ser obesa reduce aún más esa probabilidad. Puede que sea más difícil monitar el bebé durante el trabajo de parto. Si el bebé es muy grande, pueden surgir dificultades durante el trabajo de parto y el parto. Por estos motivos, la obesidad durante el embarazo aumenta el riesgo de tener un parto por cesárea. Si fuera necesario dar a luz por cesárea, el parto es más peligroso para una mujer obesa que para una mujer cuyo peso es normal. En general, el tiempo que dura la operación puede ser más largo. Mientras más tiempo dure la operación, mayores son los riesgos de sangrado y otras complicaciones. Riesgos adicionales del parto por cesárea son los siguientes: • Infecciones • Problemas con la anestesia • Trombosis venosa profunda • Cicatrización deficiente de heridas Generalmente se toman medidas para reducir la probabilidad de estas complicaciones. Por ejemplo, podrían darle un medicamento para evitar que ocurra trombosis venosa profunda o medias o botas especiales para usarlas antes, durante y después de la cirugía. Aunque las mujeres embarazadas reciben antibióticos para evitar contraer una infección durante un parto por cesárea, podría recibir una dosis mayor. La pérdida de peso después del embarazo Cómo adelgazar de forma segura Adelgazar implica usar más calorías de las que consume. Puede lograrlo haciendo ejercicio regularmente y consumiendo alimentos saludables. Otro beneficio de hacer estos cambios es que reducirá el riesgo de presentar problemas médicos graves, como diabetes y presión arterial alta. El ejercicio debe ser una parte importante de su plan para adelgazar. La mayoría de la gente que ha adelgazado y ha mantenido un buen peso hace 60–90 minutos de una actividad física moderada casi todos los días de la semana. Entre las actividades de intensidad moderada figuran el ciclismo, las caminatas vigorosas y el trabajo en el jardín. No es necesario hacer todo este ejercicio a la vez. Por ejemplo, puede hacer 20–30 minutos tres veces al día. Medicamentos Si ha tratado de adelgazar adoptando cambios en la dieta y haciendo ejercicio pero su IMC es todavía mayor de 30 o de por lo menos 27 y tiene ciertos problemas médicos, como diabetes o enfermedad del corazón, su proveedor de atención médica le podría aconsejar usar medicamentos para ayudarle a adelgazar. Estos medicamentos no se deben usar cuando quede embarazada. Cirugía Defectos del tubo neural: Defectos congénitos que se producen debido al desarrollo incompleto del cerebro, la médula espinal o los recubrimientos de estos órganos. Si la dieta y el ejercicio o los medicamentos no dan resultado, un tipo especial de cirugía, la cirugía bariátrica, puede ser una opción para las personas muy obesas (con un IMC de 40 o mayor o un IMC entre 35 y 39 con problemas médicos importantes provocados por la obesidad). Si se somete a una cirugía para adelgazar, debe posponer quedar embarazada por 12–24 meses después de la cirugía, cuando ocurre la pérdida más acelerada de peso. Si ha tenido problemas de fertilidad, estos se pueden resolver por su cuenta a medida que se deshace rápidamente del exceso de peso. Es importante estar consciente de esta posibilidad ya que al aumentar la fertilidad puede hacer que ocurra un embarazo involuntario. Algunos tipos de cirugías para adelgazar pueden afectar cómo el cuerpo absorbe los medicamentos orales, como las píldoras anticonceptivas. Por ello, es posible que necesite cambiar de método anticonceptivo. La mayoría de las mujeres que han tenido una cirugía bariátrica logran tener embarazos saludables. Cuando quede embarazada después de la cirugía, su proveedor de atención médica podría dar seguimiento a su salud para detectar deficiencias vitamínicas. A veces también se recomienda acudir a un nutricionista para determinar cómo puede cumplir con sus necesidades alimenticias durante el embarazo. Derrame cerebral: Interrupción repentina del flujo de sangre a todo el cerebro o a alguna parte de este y que se produce debido a una obstrucción o rompimiento de un vaso sanguíneo en el cerebro causando pérdida del conocimiento y parálisis temporal o permanente. Por último… Preeclampsia: Problema médico durante el embarazo en el que ocurren niveles elevados de presión arterial y proteína en la orina. La obesidad es un problema grave en Estados Unidos y puede causar muchos problemas médicos. La obesidad durante el embarazo puede exponerla a sufrir complicaciones y también hacerle daño a su bebé. Tomar medidas para deshacerse del peso excesivo y lograr un peso saludable antes de quedar embarazada es una buena manera de evitar esos problemas. Si es obesa y ya está embarazada, aún hay muchas medidas que puede tomar para mantenerse lo más sana posible. Glosario Anestesiólogo: Médico que se especializa en aliviar el dolor. Antibióticos: Medicamentos que se administran para tratar infecciones. Calorías: Unidades de calor que se usan para expresar el combustible o el valor de energía del alimento. Cirugía bariátrica: Procedimientos quirúrgicos que causan la pérdida de peso para el tratamiento de la obesidad. Diabetes gestacional: Diabetes que ocurre durante el embarazo. Examen de ecografía (ultrasonido): Examen que usa ondas sonoras para examinar estructuras internas. Durante el embarazo, puede usarse para examinar al feto. Hipertensión gestacional: Presión arterial alta que comienza durante la segunda mitad del embarazo. Índice de masa corporal (IMC): Número que se calcula a partir de la estatura y el peso y que se usa para determinar si el peso de una persona se encuentra por debajo de lo normal, si es normal o si la persona tiene sobrepeso o es obesa. Macrosomía: Problema médico en que el feto crece muy grande. Nacimiento de un niño muerto: Parto de un bebé muerto. Obesidad: Problema médico caracterizado por un exceso de grasa corporal. Parto por cesárea: Parto de un bebé a través de incisiones en el abdomen y útero de la madre. Prematuro: Que nace antes de las 37 semanas de embarazo. Trombosis venosa profunda: Problema médico en que se forma un coágulo de sangre en las venas de las piernas u otras partes del cuerpo. Este Folleto Educativo para Pacientes fue elaborado por el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos (American College of Obstetricians and Gynecologists). Diseñado para ayudar a los pacientes, presenta información actualizada y opiniones sobre temas relacionados con la salud de las mujeres. El nivel de dificultad de lectura de la serie, basado en la fórmula Fry, corresponde al grado escolar 6to a 8vo. El instrumento de Evaluación de Idoneidad de Materiales (Suitability Assessment of Materials [SAM]) asigna a los folletos la calificación “superior”. Para asegurar que la información es actualizada y correcta, los folletos se revisan cada 18 meses. La información descrita en este folleto no indica un curso exclusivo de tratamiento o procedimiento que deba seguirse, y no debe interpretarse como excluyente de otros métodos o prácticas aceptables. Puede ser apropiado considerar variaciones según las necesidades específicas del paciente, los recursos y las limitaciones particulares de la institución o tipo de práctica. Derechos de autor mayo de 2013 por el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos (American College of Obstetricians and Gynecologists). Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta publicación podrá reproducirse, almacenarse en un sistema de extracción, publicarse en Internet, ni transmitirse de ninguna forma ni por ningún método, sea electrónico, mecánico, de fotocopiado, grabación o de cualquier otro modo, sin obtener previamente un permiso por escrito del editor. ISSN 1074-8601 Las solicitudes de autorización para hacer fotocopias deben dirigirse a: Copyright Clearance Center, 222 Rosewood Drive, Danvers, MA 01923. Para pedir Folletos de Educación de Pacientes en paquetes de 50, sírvase llamar al 800-762-2264 o hacer el pedido en línea en sales.acog.org. 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