REVISTA DE LA SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA PUBLICACION OFICIAL DE LA SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA Rev Soc Bol Ped Vol. 52, Nº 3 2013 1 SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA • Fundada el 7 de abril de 1943 • Afiliada a la Asociación Latinoamericana de Pediatría (ALAPE) • Afiliada a la Asociación Internacional de Pediatría (A.I.P.) • Miembro de las Sociedades de Pediatría del Cono Sur • Miembro de la Asociación Boliviana de Editores de Revistas Biomédicas (ABEREB) • Condecorada con la “Orden de la Salud Pública”, por el Ministerio de Salud y Deportes • Condecorada con el “Condor de los Andes” por el Gobierno Boliviano ¡Para la Niñez Boliviana! 2 DIRECTOR-EDITOR Dr. Manuel Pantoja Ludueña DIRECTOR EMERITO Ac. Dr. Eduardo Mazzi Gonzáles de Prada CO - EDITOR Dr. Héctor Mejía Salas COMITE EDITORIAL REVISTA DE LA SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA Ac. Dr. Eduardo Aranda Torrelio Dr. Juan Pablo Hayes Dorado Dr. Alfredo Mendoza Amatller Dr. Adalid Zamora Gutiérrez Dirigir correspondencia: SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRÍA Teléfono: (591-2).6223836 ● Celular 71822222 - 71822232 [email protected] [email protected] Av. Camacho No. 263 Potosí - Bolivia SOCIEDAD PACEÑA DE PEDIATRIA Teléfono (591.2) 2240081 ● Casilla Postal No. 1027 Dra. Lilian Acuña [email protected] DIRECTIVA SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRÍA (Gestión 2013 - 2015) PRESIDENTE: VICEPRESIDENTE: SECRETARIA GENERAL: SECRETARIA DE ACTAS: SECRETARIA DE HACIENDA: SECRETARIO DE CULTURA PRENSA y BIBLIOTECA: VOCAL: DIRECTOR DE LA REVISTA: PAST-PRESIDENTE: Dr. Rodolfo Torres Córdova Dr. Edson López Álvarez Dra. Consuelo Murillo Sánchez Dra. Soledad Meza Jancko Dra. Aleida Miranda Armijo Dr. Erick Lenis Vargas Dra. Carminia Barja Duran Dr. Manuel Pantoja Ludueña Dr. Luis Zabaleta Loayza 3 4 REVISTA DE LA SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA Volumen 52, Nº 3, 2013 EDITORIAL Ácido fólico y la prevención de los defectos del tubo neural............................................................... 136 Folic acid and prevention of neural tube defects Ac. Dr. Eduardo Mazzi Gonzales de Prada ARTÍCULOS ORIGINALES Ginecomastia puberal............................................................................................................................ 138 Pubertal gynecomastia Dr. Juan Pablo Hayes Dorado Administración de ácido fólico y otros micronutrientes en mujeres embarazadas de Colombia........ 143 Administration of folic acid and other micronutrients to pregnant women in Colombia Drs.: Esperanza Holguín-Hernández y José G. Orozco-Díaz CASOS CLÍNICOS Caso inusual de enfermedad hemolítica neonatal................................................................................ 155 Unusual case of neonatal hemolytic disease Drs.: Gustavo Choque Osco, Eduardo Mazzi Gonzales de Prada, Julio Álvarez Endara, Manuel Pantoja Ludueña Hepatoblastoma: causa inusual de abdomen agudo quirúrgico............................................................ 159 Hepatoblastoma: unusual cause of acute surgical abdomen Drs.: Nelly Fabiani Hurtado, David Ballón Cossío, Astrid Riveros Síndrome de Casamassima................................................................................................................... 162 Casamassima syndrome Drs.: Miguel Céspedes Lesczinsky, Vania Vejarano Vásquez, Claudia López Beltrán, Carlos Omar Bersatti 5 ACTUALIZACIÓN Manifestaciones gastrointestinales de niños con espectro autista......................................................... 165 Gastrointestinal manifestations of children with autism epectrum Dra.: Indhira Alparo Herrera ARTÍCULOS DEL CONO SUR Asistencia ventilatoria no invasiva domiciliaria en niños: impacto inicial de un programa nacional en Chile.................................................................................................................. 168 At-home non-invasive ventilatory assistance for children: initial impact of a national program in Chile Drs.: Francisco Prado A, Pamela Salinas F. Acompanhamento sistematizado da hiperbilirrubinemia em recém-nascidos com 35 a 37 semanas de idade gestacional................................................................................................... 179 Systematic follow-up of hyperbilirubinemia in neonates with a gestational age of 35 to 37 weeks Drs.: Elizabete Punaro, Maria Aparecida Mezzacappa, Fernando Perazzini Facchini A musicoterapia pode aumentar os índices de aleitamento materno entre mães de recém-nascidos prematuros: um ensaio clínico randomizado controlado...................................................................... 187 Music therapy may increase breastfeeding rates among mothers of premature newborns: a randomized controlled trial Drs.: Martha N. S. Vianna, Arnaldo P. Barbosa, Albelino S. Carvalhaes, Antonio J. L. A. Cunha EDUCACIÓN MÉDICA CONTÍNUA Guía práctica para el manejo del niño expuesto perinatalmente al VIH............................................... 197 Practical guide for the management of the child perinatal exposed to HIV Drs.: MSc. Juan Pablo Rodríguez Auad, Eduardo Mazzi Gonzales de Prada CUESTIONARIO # 49............................................................................................................... 202 ÍNDICE DE AUTORES.............................................................................................................. 204 ÍNDICE TEMÁTICO.................................................................................................................... 206 APÉNDICE...................................................................................................................................... 209 6 EDITORIAL Ácido fólico y la prevención de los defectos del tubo neural Folic acid and prevention of neural tube defects Ac. Dr. Eduardo Mazzi Gonzales de Prada* El ácido fólico, vitamina del complejo B juega un papel transcendente en la prevención de defectos congénitos, sobre todo en aquellos del tubo neural (DTN). Su deficiencia en mujeres en edad fértil, se traduce en una incidencia mayor de estos y su administración disminuye la ocurrencia de los mismos. Los DTN ocurren en el primer mes de embarazo (el extremo proximal del tubo neural se cierra alrededor del día 23 y el distal hacia el día 27) y se exteriorizan por el cierre incompleto del tubo neural y varían sus defectos desde una espina bífida oculta sin mayores consecuencias hasta la falta del cierre de todo el tubo neural que produce el defecto más grave, la craneorraquisquisis. La incidencia de los DTN es muy variable en diferentes países y en general ocurren 1-2 casos por cada 1.000 recién nacidos vivos. Los indicios actuales demuestran que la administración de ácido fólico disminuye en un 60 a 70% la incidencia de DTN. La causa de los DTN es desconocida, aunque existen muchos factores que en forma aislada o combinada afectan el desarrollo normal del SNC. Actualmente se reconocen algunos factores de riesgo: radiación, exposición a calor intenso (sauna), fármacos anticonvulsivantes (carbamazepina, ácido valproico), factores genéticos, infecciones virales al inicio del embarazo, intoxicación por plomo, diabetes materna pre-gestacional, historia familiar o previo hijo(a) afectado y la obesidad materna. Además hay una asociación importante con la desnutrición materna y sobre todo la deficiencia de ácido fólico, que ocurre por ingesta inadecuada o insuficiente de folatos, aumento de su consumo por el embarazo, lactancia materna, etc., interferencia en su utilización por alcoholismo, anticonceptivos orales, cimetidina, cotrimoxazol, etc., y por su absorción deficiente debido a enfermedad celiaca, sprue tropical y síndrome del intestino corto. El folato, vitamina del complejo B es hidrosoluble y es considerado un nutriente esencial, vale decir que los humanos no pueden sintetizarla, aunque pequeñas cantidades que no logran alcanzar las necesidades diarias de folatos son producidas por bacterias intestinales; por lo que, su única fuente son los alimentos, sobre todo: vegetales de hoja verde (espinacas, acelga, repollo), legumbres (frijoles, porotos, arvejas, habas, garbanzos, lentejas, maníes, soja), frutas (naranja, mango, palta), frutos secos (nueces, almendras), hígado y cereales. Las formas naturales de folato son susceptibles a la destrucción por cocción o procesamiento, reduciendo el nivel de folatos ingerido con los alimentos. Los folatos son cofactores de las enzimas que sintetizan ADN y ARN y necesarias para la conversión de la homocisteína en metionina. Durante las primeras etapas de desarrollo fetal, la síntesis de * Profesor Emérito de Pediatría. Facultad de Medicina. UMSA Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 136 - 7 136 ácidos nucleicos y proteínas está en su apogeo, y por consiguiente los requerimientos de folatos por la gestante aumentan rápidamente en ese período. Cuando el folato resulta insuficiente, la producción de ácidos nucleicos se inhibe y las células no logran fabricar suficiente ADN para la mitosis. Además, la inhibición del ciclo de metilación se traduce en incapacidad para metilar proteínas, lípidos y mielina. El mecanismo por el cual el ácido fólico previene la aparición de DTN se desconoce. Se considera que su carencia alimentaria o un error congénito del metabolismo de los folatos, conduce a la consecuente acumulación de homocisteína, que con su metabolismo inadecuado produce alteraciones en la síntesis de las enzimas: 1) sintasa de cistathión, 2) sintasa de metionina, o 3) 5,10 metileno tetrahidrofolato reductasa; estas a la vez alteran el desarrollo embrionario normal del tubo neural con la consecuente asociación de defectos del tubo neural. Otra teoría, menos generalizada, sugiere que el ácido fólico puede reducir la frecuencia de los DTN neurales al provocar en forma selectiva el aborto de los fetos afectados. En 1991, el Centro para el Control de Enfermedades (CDC) publicó una revisión de las evidencias de la prevención de la recurrencia de embarazos aquejados por defectos del tubo neural y recomendó la administración de 4 mg de ácido fólico para las mujeres que habían tenido un bebé o un feto con algún defecto del tubo neural. Al año siguiente, el Servicio de Salud Pública de los Estados Unidos recomendó que todas las mujeres en edad fértil consuman 0,4 mg (400 microgramos) diarios de ácido fólico. El ácido fólico también puede llegar a prevenir otros defectos congénitos, como labio y paladar fisurados, deficiencias de las extremidades, defectos conotroncales y anormalidades de las vías urinarias. Se requieren otras investigaciones para confirmar y aclarar el nexo entre el ácido fólico y estas otras anormalidades congénitas. Hay distintas estrategias de intervención a las que se puede recurrir para aumentar las concentraciones EDITORIAL / Dr.: E. Mazzi sanguíneas de folatos en la mujer: administración de capsulas de complejo B o ácido fólico y/o enriquecimiento de harinas con folatos y mejorar la dieta, aconsejando consumir alimentos ricos en folatos, con estas medidas se está consiguiendo reducir en forma importante los DTN. La elección de la estrategia a seguir dependerá del país, la población receptora y de los recursos disponibles En resumen, se recomienda prevenir y disminuir la incidencia de los DTN con la administración oral de 0,4 mg/día de ácido fólico en mujeres en edad fértil y sobre todo en el periodo periconcepcional; se sugiere tomar el ácido fólico un mes antes de la concepción hasta el segundo o tercer mes del embarazo. En mujeres que ya tuvieron un hijo afectado, se aconseja incrementar la dosis oral de ácido fólico a 4 mg/día. Es importante informar y educar a la población sobre la importancia de consumir alimentos ricos en ácido fólico, tomar capsulas o añadir folatos a las harinas de consumo humano. Se aconseja además evitar los baños de sauna durante las primeras semanas de embarazo y evitar los factores de riesgo mencionados anteriormente. Referencias 1. Acuña J, Yoon P, Erickson JD La prevención de los defectos del tubo neural con ácido fólico. Centros para el Control y la Prevención de enfermedades (CDC). Organización Panamericana de la Salud. Ginebra:OMS/OPS. Marzo 2013. Localizable en www.OMS/OPS. 2. Center for Disease control and Prevention. Birth defects. Consulta. Enero 2013. Localizable en: http:// www.nlm.nih.gov/medlineplus/birthdefects.html. 3. Mazzi E. Defectos del tubo neural. En: Mazzi E, Sandoval O, Aranda E, Bartos A, Peñaranda RM, Kaune V, Velasco VH, Zamora A, Montano J, eds. Texto de la Catedra de Pediatría. 6ta. Ed. La Paz: Elite Impresiones 2013.p.267-72. 4. U.S. Preventive Services Task Force. Folic acid for the prevention of neural tube defects: U.S. Preventive Services Task Force recommendation statement. Ann Intern Med 2009; 150:626. 137 ARTICULO ORIGINAL Ginecomastia puberal Pubertal gynecomastia Dr. Juan Pablo Hayes Dorado* Resumen: La ginecomastia puberal puede causar problemas de autoestima y deterioro en la calidad de vida en los púberes afectados, al representar las glándulas mamarias un símbolo femenino. El objetivo del presente trabajo fue analizar las características clínicas y bioquímicas de los púberes con ginecomastia, atendidos en el consultorio de endocrinología pediátrica del “Centro Médico Siraní”, durante el período 2008 - 2012. Se atendieron 123 pacientes derivados con el diagnóstico de ginecomastia; 26 fueron excluidos (22 por presentar lipomastia y 4 por no cumplir el seguimiento clínico) y se estudiaron 97. La mayoría de los pacientes presentó talla adecuada para la edad y desarrollo genital estadios 2 y 3 de Tanner, con una evolución de seis a doce meses de ginecomastia, bilateral y simétrica. La ansiedad fue el síntoma más frecuente y en 95 de ellos no se evidenciaron antecedentes de ingesta de fármacos. En todos los pacientes fueron normales los niveles de testosterona, estradiol, LH, FSH, prolactina, HCG y TSH. El tratamiento fue expectante en 83 púberes, indicándose tamoxifeno en 6 pacientes (los que presentaron ansiedad severa); ocho fueron derivados a cirugía plástica, por presentar ginecomastia de más de dos años de evolución. La ansiedad fue el síntoma más frecuente entre los pacientes, los exámenes de laboratorio fueron normales y el tratamiento, en general, fue expectante; en los púberes con ansiedad severa se indicó tamoxifeno y los que presentaron ginecomastia de más de dos años de evolución fueron derivados a cirugía plástica. Palabras clave: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 138-42: Ginecomastia, Puberal, Lipomastia. Abstract: Pubertal gynecomastia can cause problems of selfesteem and deterioration in the quality of life in the affected adolescents, as far as mammary glands represent a feminine symbol. The objective of the present work was to analyze the clinical and biochemical characteristics of the adolescents with gynecomastia, who were seen at the endocrinology paediatric room of the “Centro Médico Siraní”, between 2008 - 2012. 123 patients derived with the gynecomastia diagnosis were seen; 26 were excluded (22 to present lipomastia and 4 not to fulfil the clinical pursuit) and 97 were studied. Most of the patients presented stature accord to chronological age and genital development stages 2 and 3 of Tanner, with an evolution of six to twelve months of bilateral and symmetrical gynecomastia. Anxiety was the most frequent symptom and in 95 of them antecedents of drug ingestion was not demonstrated. In all the patients the testosterone, estradiol, LH, FSH, prolactin, GH and TSH levels were normal. The treatment was expectant in 83 adolescents, tamoxifen was indicated in 6 patients (those who presented severe anxiety); 8 were derived to plastic surgery, to present gynecomastia of more than two years of evolution. Anxiety was the main symptom among the patients, the laboratorial results were normal and the treatment, in general, was expectant; in the adolescents with severe anxiety tamoxifen was indicated and the ones who presented gynecomastia of more than two years of evolution were derived to plastic surgery. Key words: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 138-42: Gynecomastia, Pubertal, Lipomastia. * Médico pediatra. Centro Médico Siraní. Santa Cruz de la Sierra, Bolivia. Correspondencia: Dr. Juan Pablo Hayes, correo electrónico: [email protected] Conflicto de intereses: el presente trabajo no tiene conflicto de intereses. Articulo aceptado para su publicación 20/10/13. Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 138 - 42 138 Introducción La ginecomastia es el crecimiento uni o bilateral de la glándula mamaria en el varón, siendo provocada por la proliferación glandular y depósito de grasa1-2. La ginecomastia puberal es la proliferación glandular del tejido mamario en la etapa puberal; se considera un fenómeno fisiológico, explicado por un desbalance transitorio en la relación andrógeno/ estrógeno3. Durante los primeros estadios de la pubertad, hay un incremento relativo de los estrógenos derivados principalmente de la aromatización periférica de los andrógenos testiculares y adrenales; la ginecomastia resultante, generalmente involuciona en forma espontánea, cuando aumenta la producción de testosterona, en las fases tardías de la pubertad4. La ginecomastia se diagnostica en el 30 a 60 % de los púberes, pudiendo causar un significativo impacto psicosocial negativo en ellos, especialmente en la función social, salud mental y autoestima2,5. Es importante diferenciarla de la lipomastia o pseudoginecomastia, caracterizada por la ausencia de proliferación glandular2. El objetivo del presente trabajo fue analizar las características clínicas y bioquímicas de los púberes con ginecomastia, atendidos en el consultorio de endocrinología pediátrica del “Centro Médico Siraní”, durante el período 2008 - 2012. Material y método Se estudiaron a los pacientes atendidos en el consultorio de endocrinología pediátrica del “Centro Médico Siraní”, con el diagnóstico de ginecomastia puberal, durante el período enero 2008 a diciembre 2012. Se excluyeron del estudio los púberes con lipomastia y los que no cumplieron el seguimiento clínico. GINECOMASTIA PUBERAL/ J. P. Hayes Las variables investigadas fueron: edad, talla (Z score para la edad, tablas de crecimiento de la OMS, 2006), IMC (percentiles para la edad, tablas de crecimiento de la OMS, 2006), desarrollo genital (estadios de Tanner), tiempo de evolución de la ginecomastia (menos de seis meses, de seis a doce meses, de 13 a 24 meses y más de 24 meses de evolución), características clínicas (bilateralidad, unilateralidad; simetría, asimetría), sintomatología (ansiedad, sensibilidad, dolor), antecedentes de ingesta de fármacos (positivos, negativos), hallazgos de laboratorio (ALT, AST, creatinina; niveles de testosterona, LH, FSH, estradiol, prolactina, HCG y TSH, determinados por radioinmunoanálisis), edad ósea (según Greulich y Pyle) y tratamiento (expectante, administración de tamoxifeno, derivación a cirugía plástica). Resultados Se atendieron 123 púberes derivados con el diagnóstico de ginecomastia; 26 fueron excluidos y se estudiaron 97. Se excluyeron 22 pacientes por presentar lipomastia y 4 por no cumplir el seguimiento clínico. Las características clínicas y bioquímicas de los 97 pacientes estudiados, fueron: La edad más frecuente de los púberes fue de 12 años (39 pacientes, 40.2% del total); siendo 21 púberes (21.6%) de 13 años; 18 pacientes (18.6% del total) de 14 años; 11 de 11 años y 8 púberes de 10 años. Respecto al peso, 57 pacientes (58.8% del total) presentaron IMC adecuado; en 24 (24.7% de los púberes) se evidenció sobrepeso y en otros 16 (16.5% de los pacientes) se diagnosticó obesidad. En 48 púberes (49.5% del total) se observó desarrollo genital Tanner II y en 35 (36.1% de los pacientes), desarrollo genital Tanner III (ver figura # 1). El tiempo de evolución de la ginecomastia fue menor a seis meses en 57 púberes (58.8% del total) y entre seis y doce meses, en 26 del total (26.8% de los púberes) (ver figura # 2). 139 Figura # 1. Desarrollo puberal de los pacientes (estadios de Tanner) 14.40% 36.10% Tanner II Tanner III Tanner IV 49.50% Figura # 2. Tiempo de evolución de la ginecomastia 14.40% 26.80% Enf. < 6 meses Enf. 6 - 12 meses Enf. > 12 meses 58.80% La ginecomastia fue bilateral en 76 púberes (78.4% del total), siendo unilateral en 21 (21.6%); simétrica en 79 (81.4 % de los púberes) y asimétrica en 18 (18.6 % del total). El síntoma más frecuente fue la ansiedad (48 pacientes, 49.5 % del total), observándose sensibilidad o dolor en la zona en 14 púberes (figura # 3). Figura # 3. Síntomas de los pacientes 9.30% Ansiedad Dolor Sensibilidad Asintomático Ansiedad y sensibilidad 12.40% 14.40% 14.40% 49.50% GINECOMASTIA PUBERAL/ J. P. Hayes En 95 pacientes no se evidenciaron antecedentes de ingesta de fármacos en los seis meses previos al diagnóstico; dos púberes con onicomicosis, recibieron ketoconazol por seis y ocho semanas, respectivamente. En todos los pacientes fueron normales los niveles de ALT, AST, creatinina, testosterona, estradiol, LH, FSH, prolactina, HCG y TSH. La edad ósea fue acorde a la edad cronológica en 54 pacientes (55.7% del total), observándose adelantada (diferencia mayor a 12 meses) en 43 púberes. El tratamiento fue expectante en 83 pacientes (85.6% del total); en 6 (los que presentaban ansiedad severa) se indicó tamoxifeno 20 mg/día, por tres meses, observándose regresión de la ginecomastia en 4 de ellos; 8 púberes (8.3% del total) fueron sometidos a cirugía plástica (los que presentaron ginecomastia de más de dos años de evolución). Discusión La ginecomastia fisiológica se observa en neonatos, púberes y mayores de 50 años de edad; es una condición autolimitada, aunque puede ser tratada para minimizar el estrés emocional y la incomodidad física que causa6. En general la ginecomastia puberal aparece entre los 13 y 14 años de edad, durante 6 a 12 meses, involucionando posteriormente en el 95% de los casos2. Se diagnostica ginecomastia en aproximadamente el 50% de los púberes, cuando presentan un desarrollo puberal Tanner 3; considerándose el límite fisiológico de evolución de esta condición, dos años desde su inicio o cuando el paciente tiene 17 años de edad6. El tejido mamario en el varón contiene receptores proteicos para estrógenos y andrógenos; los estrógenos estimulan la proliferación de los conductos mamarios y los andrógenos la inhiben; el desbalance hormonal entre estos factores es el responsable principal de la ginecomastia2. 140 Se ha evidenciado que puede ser físicamente incómoda y psicológicamente estresante, provocando un impacto negativo en la imagen corporal y autoestima de los afectados2. Los púberes también pueden presentar ginecomastia no fisiológica o patológica, la cual es importante diferenciarla de la fisiológica puberal6. La ginecomastia patológica es provocada por diversas causas: tumores endocrinos (testiculares, adrenocorticales, pituitarios), disfunciones endocrinas (hipogonadismo, hipertiroidismo, obesidad), enfermedades no endocrinas (cirrosis, insuficiencia renal, infección por VIH), medicamentos y factores idiopáticos2. El síndrome de Klinefelter, alteración cromosómica más frecuente en el sexo masculino, está caracterizado por hipogonadismo, nivel bajo de testosterona, causante del desarrollo tardío de la pubertad con disminución del vello facial y corporal, menor desarrollo muscular, osteoporosis y ginecomastia7. Varios medicamentos pueden provocar ginecomastia mediante diversos mecanismos fisiopatológicos: antiandrógenos, antipsicóticos de primera generación, espironolactona, verapamilo, cimetidina, inhibidores de proteasa e inhibidores nucleósidos de la transcriptasa reversa - antirretrovirales8. También se han descrito como fármacos causantes de ginecomastia: estrógenos, gonadotropina coriónica humana, análogos de gonadoliberina, hormona de crecimiento, inhibidores de 5 alfa reductasa, esteroides anabólicos, ketoconazol, nifedipino, omeprazol, y opioides9. Clínicamente la ginecomastia puede ser unilateral y asimétrica10. Los pacientes pueden referir sensibilidad en la zona, además de alcanzar volúmenes considerables, causando una apariencia femenina en los púberes2. Para llegar al diagnóstico etiológico es importante realizar una historia clínica detallada, con énfasis en el consumo de medicamentos y duración del agrandamiento mamario; en el examen físico se buscarán GINECOMASTIA PUBERAL/ J. P. Hayes signos de tiroidopatía, hipogonadismo y la presencia de masas abdominales2. Respecto a los exámenes complementarios, algunos autores recomiendan evaluar los niveles plasmáticos de testosterona, estradiol, HCG, LH, FSH, prolactina, TSH y T4, en los afectados2. En otros trabajos se sugiere también determinar los valores de AST, ALT y creatinina en los pacientes6. Asimismo se ha recomendado solicitar ecografía adrenal y testicular2. Sin embargo, para otros autores, la ecografía testicular debería realizarse sólo cuando se palpa una masa testicular o cuando la ginecomastia es mayor a 5 cm6. Algunos consideran que la mayoría de los púberes con ginecomastia son controlados adecuadamente sólo con observaciones periódicas; no siendo necesarios, en general, los estudios de laboratorio y radiológicos; los cuales deben solicitarse cuando se palpa una masa testicular o cuando la ginecomastia se diagnostica antes del inicio puberal o si persiste después de un período de observación de 12 a 18 meses4. Como tratamiento se recomienda el control periódico de los pacientes cada tres a seis meses, al ser la ginecomastia generalmente una condición autolimitada2. Los púberes deben ser observados periódicamente, ya que la resolución espontánea de la ginecomastia se observa en la mayoría de los casos, en uno a dos años10. También se ha sugerido que el paciente disminuya peso, si presenta sobrepeso u obesidad; por otro lado, debe suspender el tratamiento con cualquiera de los fármacos asociados a ginecomastia2. Respecto al tratamiento farmacológico, se ha descrito que la administración de tamoxifeno puede ser una terapia efectiva y segura para los pacientes con ginecomastia puberal11. El tamoxifeno, bloqueador o modulador selectivo del receptor estrogénico, es efectivo en disminuir el volumen glandular; considerándose su uso cuando el diámetro de la glándula mamaria es mayor a 3-4 cm3. Los pacientes deben 141 recibir 20 a 40 mg diarios de tamoxifeno, por un tiempo de dos a cuatro meses2. Se ha reportado la regresión completa de la ginecomastia en 60% de los pacientes y la regresión parcial en el 20%, con la administración de tamoxifeno, 20 mg/día, por tres o más meses de terapia4. En cuanto al tratamiento quirúrgico, su práctica depende de los síntomas y requerimientos del paciente; la decisión de realizar la cirugía debe ser tomada en forma individual12. La ginecomastia puberal generalmente es del tipo glandular y graso; sin embargo, la persistencia de esta condición, causa fibrosis e hialinización del tejido periductal, produciendo hipertrofia glandular que no involuciona, cuyo único tratamiento es el quirúrgico13. La cirugía debe garantizar una cicatriz mínima, respetando la estética de la zona, para lo cual la selección del método quirúrgico apropiado dependerá del grado de severidad, la presencia de piel redundante y del volumen del tejido mamario1. En el presente trabajo se observó que en algunos pacientes derivados con el diagnóstico de ginecomastia, se evidenció lipomastia (diagnóstico diferencial importante). Los púberes con ginecomastia, en general, presentaron talla adecuada para la edad y desarrollo genital estadios 2 y 3 de Tanner, en forma semejante a lo referido en otros estudios. El tiempo de evolución de la ginecomastia más frecuentemente referido, fue de seis a doce meses; observándose bilateralidad y simetría en la mayoría de los pacientes, hallazgos similares a los reportados en otros trabajos. El síntoma más frecuente fue la ansiedad; en algunos púberes se evidenció sensibilidad en la región afectada; los hallazgos de laboratorio fueron normales en todos los casos y el tratamiento fue expectante en la mayoría de los pacientes; sólo en aquellos con ansiedad severa se indicó tamoxifeno y los que presentaban la patología por más de dos años, fueron derivados a cirugía plástica, siguien- GINECOMASTIA PUBERAL/ J. P. Hayes do las recomendaciones de la mayoría de los estudios revisados. Referencias 1. Wolter A, Scholz T, Diedrichson J, Liebau J. Surgical treatment of gynecomastia: an algorithm. Handchir Mikrochir Plast Chir 2013;45:73-9. 2. Barros A, Sampaio M. Gynecomastia: physiopathology, evaluation and treatment. Sao Paulo Med J 2012;130:187-97. 3. Akgül S, Kanbur N, Gücer S, Safak T, Derman O. The histopathological effects of tamoxifen in the treatment of pubertal gynecomastia. J Pediatr Endocrinol Metab 2012;25:753-5. 4. Morcos R, Kizy T. Gynecomastia: When is treatment indicated?. J Fam Pract 2012;61:719-25. 5. Nuzzi L, Cerrato F, Erikson C, Webb M, Rosen H, Walsh E et al. Psychosocial impacto f adolescente gynecomastia: a prospective case-control study. Plast Reconstr Surg 2013;131:890-6. 6. Dickson G. Gynecomastia. Am Fam Physician 2012;85:716-22. 7. Wosnitzer M, Paduch D. Endocrinological issues and hormonal manipulation in children nd men with Klinefelter syndrome. Am J Medic Genet C Semin Med Genet 2013;163:16-26. 8. Bowman J, Kim H, Bustamante J. Drug-induced gynecomastia. Pharmacotherapy 2012;32:1123-40. 9. Deepinder F, Braunstein G. Drug-induced gynecomastia: an evidence-based review. Expert Opin Drug Saf 2012;11:779-95. 10. Carlson H. Approach to the patient with gynecomastia. J Clin Endocrinol Metab 2011;96:15-21. 11. Lapid O, van Wingerden J, Perlemuter L. Tamoxifen therapy for the management of pubertal gynecomastia: a systematic review. J Pediatr Endocrinol Metab 2013;11:1-5. 12. Song Y, Wang Y, Huang R, He X, Zhang J, Zhang G et al. Surgical treatment of gynecomastia: Mastectomy compared to liposuction technique. Ann Plast Surg 2013;2:2. 13. Lee J, Kim I, Kim T, Kim Y. Surgical correction of gynecomastia with minimal scarring. Aesth Plast Surg 2012;36:1302-6. 142 ARTICULO ORIGINAL Administración de ácido fólico y otros micronutrientes en mujeres embarazadas de Colombia Administration of folic acid and other micronutrients to pregnant women in Colombia Drs.: Esperanza Holguín-Hernández1, José G. Orozco-Díaz2 Resumen Objetivo. Caracterizar el consumo de ácido fólico (AF) y otros micronutrientes en forma de medicamentos en un grupo de mujeres gestantes colombianas. Métodos. Estudio observacional descriptivo. Se obtuvo información por medio de entrevistas a gestantes y de sus registros de historia clínica de control prenatal y/o atención del parto en cuatro ciudades de Colombia. La muestra fue de 1 637 mujeres atendidas en 15 instituciones. Resultados. A 1 315 gestantes (80,3%) les recomendaron consumir AF, con prescripción realizada por médico al 84% de ellas; 90,3% adhirieron al tratamiento. A 85,6% el AF les fue suministrado por la empresa aseguradora de salud, y 10,7% lo compró de su bolsillo. La prescripción fue pertinente en 0,2% de las mujeres. Su consumo fue totalmente oportuno en 0,2% y totalmente inoportuno en 41,9% de las gestantes. A 1 192 mujeres (72,8%) les recomendaron otros micronutrientes; a 77,6% de ellas se los recomendó el médico, y 88,7% adhirieron al tratamiento. Conclusiones. Se recomienda y se consume AF y otros micronutrientes de manera inadecuada, sin evaluar las necesidades individuales de las mujeres gestantes. Se invita a reflexionar sobre la utilidad de los programas que promueven el consumo masivo de micronutrientes en forma de medicamento durante el embarazo; los programas parecen desconocer las causas fundamentales de los problemas nutricionales que aquejan a la población. Palabras clave Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 143-54: Utilización de medicamentos; prescripciones de medicamentos; prescripción inadecuada; medicamentos a base de vitaminas y minerales; ácido fólico; salud materno-infantil; sociología médica; Colombia. Abstract Objective. To characterize the intake of folic acid (FA) and other micronutrients in medicinal form in a group of pregnant women in Colombia. Methods. Descriptive observational study. Information was obtained from interviews of pregnant women and from the clinical records of their prenatal check-ups and/or delivery in four cities in Colombia. The sample consisted of 1 637 women seen in 15 institutions. Results. A total of 1 315 pregnant women (80.3%) were advised to take FA, and 84% received a prescription, 90.3% of whom adhered to the treatment. FA was provided to 85.6% of them by their health insurance company and 10.7% purchased it themselves. The prescription was appropriate for 0.2% of the women; its use was entirely appropriate for 0.2% of the pregnant women and totally inappropriate for 41.9%. Other micronutrients were recommended to 1 192 women (72.8%), 77.6% of whom received the advice from their physician, with 88.7% adhering to the treatment. Conclusions. FA and other micronutrients are inappropriately recommended to pregnant women and taken without assessing their individual needs. The usefulness of programs that promote mass consumption of micronutrients in medicinal form during pregnancy should be reexamined. These programs seem not to recognize the fundamental causes of the population’s nutritional problems. Key words Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 143-54: Drug utilization; drug prescriptions; inappropriate prescribing; drugs on basis of vitamins and minerals; folic acid; maternal and child health; sociology, medical; Colombia. 1. Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá, Colombia. La correspondencia se debe dirigir a José Gilberto Orozco-Díaz, [email protected] 2. Universidad Nacional de Colombia, Bogotá, Colombia. Artículo reproducido con permiso de la OPS/OMS y que fue publicado en la Revista Panamericana de Salud Pública 2013;34(2):99-106. Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 143 - 54 143 Los medicamentos de mayor consumo durante el embarazo son vitaminas y minerales (micronutrientes), analgésicos y antibióticos(1, 2). Los micronutrientes revisten especial interés debido a que los problemas nutricionales afectan a una proporción importante de la población colombiana, incluyendo a las mujeres gestantes —entre quienes 16,2% registra bajo peso y 44,7% tiene anemia(3–5). Si bien se ha demostrado que el consumo de ácido fólico (AF) previo a y durante las primeras 12 semanas de gestación disminuye el riesgo de nacimiento con defectos del tubo neural (DTN)(6, 7), lamentablemente un número importante de embarazos no son planificados y muchas mujeres comienzan el control prenatal (CPN) después de la semana 12(1, 2, 8–13) . En este sentido, la administración de AF en períodos posteriores a la semana 12 no produce beneficios sino más bien lo contrario, por lo que hay una creciente preocupación sobre los efectos potencialmente negativos de la sobreexposición del feto —y también de la población general— a este y otros micronutrientes(7, 14–16). Algunos estudios en población general indican que un consumo elevado de folatos puede reducir el riesgo de adenomas colorrectales y de cáncer(17), en tanto que otros sugieren que promueve su progresión(18–21). En cáncer de mama un estudio sugirió un efecto protector(22) y otro un aumento del riesgo(23). El consumo excesivo de AF se asocia con deficiencia de vitamina B , nacimientos múltiples y 12 alteración de la función inmune, y los usuarios de suplementos tienden a tomar más de lo recomendado(24–31). Estos hallazgos son consistentes con el papel del folato en la proliferación celular y en la reducción de mutaciones. Hay además otros micronutrientes que no producen beneficios(6, 32) sino que más bien generan algunos riesgos(33). Varios estudios muestran que su con sumo reduce el riesgo de parto pretérmino extremo y de niños pequeños para la edad gestacional (PEG(34, 35), a la vez que otros han observado mayor riesgo de parto pretérmino cuando se consumen dia- riamente durante el tercer trimestre(33), mayor riesgo de recién nacido grande para la edad gestacional, muerte perinatal(36) y mastitis subclínica en mujeres infectadas con VIH (factor de riesgo para la transmisión madre–hijo)(37). Frente a este panorama, la existencia de programas que promueven el consumo masivo e indiscriminado de AF y micronutrientes genera varios grupos de inquietudes. El primero se refiere a los efectos biológicos de los suplementos: ¿cuál es su eficacia, efectividad y seguridad en diferentes subgrupos de embarazadas?, ¿es posible afirmar que los beneficios superan a los riesgos en todo tipo de mujer embarazada?, ¿cuáles subgrupos de embarazadas se beneficiarían más?, ¿estas intervenciones afectan a otras poblaciones además de aquellas para las que se encuentran destinadas? Un segundo grupo de inquietudes se relaciona con la pertinencia de la prescripción de micronutrientes en forma de medicamentos durante el embarazo: ¿reciben los suplementos las embarazadas que realmente los necesitan?, ¿el consumo del AF se hace de manera oportuna y adecuada?, ¿consumir los micronutrientes en forma de medicamentos es la manera más adecuada? Por último, el tercer grupo de inquietudes se refiere al ámbito de la salud pública, orientado a indagar acerca de las causas y los efectos sociales del consumo indiscriminado de micronutrientes en forma de medicamentos durante el embarazo: ¿cuáles son los efectos de la medicación del embarazo?, ¿a quiénes beneficia el consumo de estos nutrientes y los programas que los promueven?, ¿sobre qué concepción de salud se basa dicha recomendación? Dados estos cuestionamientos, re sulta perentorio generar información de calidad que contribuya a esclarecer el valor real de los programas de micro nutrientes durante el embarazo, porque aunque en casos particulares pueden aliviar transitoriamente una deficiencia nutricional, también pueden conllevar el riesgo de pasar por alto el problema nutricional de la población, perdiéndose de vista su de- ADMINISTRACIÓN DE ÁCIDO FÓLICO Y OTROS MICRONUTRIENTES EN... / Holguín E. y col. 144 terminación social. El presente trabajo tiene como propósito caracterizar el consumo de ácido fólico y otros micronutrientes en un grupo de gestantes en Colombia y forma parte del estudio sobre consumo de hierro, ácido fólico y micronutrientes en este grupo de población. Materiales y métodos Se realizó un estudio observacional descriptivo de corte transversal sobre utilización de medicamentos, que exploró hábitos, factores asociados y efectos de la prescripción y el consumo de AF y otros micronutrientes en embarazadas. La muestra estuvo integrada por mujeres que recibieron atención prenatal o del parto en al menos dos instituciones prestadoras de servicios de salud (IPS) en cada una de las cuatro ciudades de Colombia escogidas por conveniencia. En cada ciudad se incluyó como mínimo una IPS de régimen contributivo y una IPS de régimen subsidiado y vinculado.3 Se calculó el tamaño muestral para encontrar una prevalencia de consumo adecuado de micronutrientes de 50%, con una precisión del 5% y una confianza del 95% (Programa Epi-Info 6); el número osciló entre 182 y 384 para una población de entre 250 y 15 000 muje res atendidas por año. Se seleccionó la muestra por conveniencia, incluyendo todas las mujeres atendidas consecutivamente desde el momento de inicio de la recolección de la información hasta completar el tamaño calculado de la muestra para la institución. Se consideró prescripción pertinente de AF la que se hizo antes y durante el primer trimestre de la gestación; parcialmente pertinente la que se hizo únicamente antes o únicamente durante el primer trimestre, o durante el primero y más trimestres, y prescripción no pertinente la que se hizo en perío- dos distintos de antes o durante el primer trimestre de gestación. En cuanto al consumo de AF, se consideró totalmente oportuno al que se hizo antes y durante el primer trimestre de la gestación; parcialmente oportuno al que se hizo únicamente antes o únicamente durante el primer trimestre, o durante el primero y más trimestres, y totalmente inoportuno al que se hizo en períodos distintos de antes o durante el primer tri mestre de gestación. Se consideró adherencia cuando el consumo recomendado se hizo todos o casi todos los días. La información fue recolectada entre agosto de 2009 y agosto de 2010 por estudiantes y profesionales de la salud. Las fuentes de información fueron entrevistas y registros clínicos de las mujeres que asistieron al CPN entre(28–40) semanas de gestación y/o atención del parto y control de primer mes posparto; esto permitió evaluar el consumo de los medicamentos de interés durante el embarazo y los desenlaces al final del embarazo. Los medicamentos se registraron mediante la clasificación Anátomo-terapéutica y química (ATC)(38) y los diagnósticos mediante la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-10)(39). El estudio fue aprobado por el Comité de Ética de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Colombia en diciembre de 2008. Según la Resolución 008430 del Ministerio de Salud(40), la investigación fue considerada sin riesgo, pues no se realizó intervención ni modificación de variables biológicas, fisiológicas, psicológicas o sociales de las participantes. Las mujeres participantes firmaron un consentimiento informado, donde se hizo explícito el compromiso de los investigadores de utilizar la información estrictamente para el estudio y no permitir que su identidad pudiera ser conocida por personas distintas. 3. Se trata de los tres regímenes de financiamiento de los servicios de salud en Colombia: al contributivo pertenecen las personas que realizan aportes mensuales al sistema, al subsidiado las que dependen de aportes del Estado y los vinculados no pertenecen a ninguno de los dos; existe otro grupo que aporta directamente a empresas aseguradoras, es decir medicina prepagada. ADMINISTRACIÓN DE ÁCIDO FÓLICO Y OTROS MICRONUTRIENTES EN... / Holguín E. y col. 145 Resultados Se encuestaron 1 637 mujeres en 15 instituciones, 623 (38,1%) en Bogotá, 457 (27,9%) en Cali, 416 (25,4%) en Barranquilla y 141 (8,6%) en Manizales. En el cuadro 1 se pueden ver las características sociodemográficas de la muestra. CUADRO 1. Características sociodemográficas de las 1 637 mujeres que formaron parte del estudio sobre administración de ácido fólico y otros micronutrientes en embarazadas de Colombia, 2009 y 2010 Característica No. % Frecuencia acumulada Edad (años) < 15 1,2 1,2 15–19 375 22,9 24,1 20–24 490 29,9 54,0 25–29 365 22,3 76,3 30–34 206 12,6 88,9 35–39 131 8,0 96,9 40–44 40 2,4 ≥ 45 5 SD 6 63,5 NA Casada 255 15,6 NA Unión libre 784 47,9 NA Sin Pareja Soltera 302 18,4 NA 295 18,0 NA Separada 4 0,2 NA Viuda 3 0,2 NA SD 296 18,1 NA 1 019 62,2 62,2 43 2,6 64,8 Estudiante 168 10,3 75,1 Trabaja fuera del hogar 393 24,0 99,1 14 0,9 100,0 Ocupación Hogar SD Régimen de aseguramiento 615 37,5 37,5 99,4 Subsidiado 784 47,9 85,4 0,3 99,7 Vinculado 129 7,9 93,3 0,4 100,0 Prepago 3 0,2 93,5 106 6,5 100,0 SD 16 1,0 1,0 Primaria 300 18,3 19,3 Secundaria 856 52,3 71,6 Superior 453 27,7 99,3 12 0,7 100,0 Estrato socioeconómico 0 8 0,5 0,5 1 611 37,3 37,8 2 596 36,4 74,2 3 316 19,3 93,5 4 29 1,8 95,3 5 9 0,5 95,8 6 2 0,1 96,0 66 4,0 100,0 SD 1 039 Contributivo Escolaridad SD En pareja Desempleada 19 Analfabeta Estado civil SD: Sin datos. NA: Datos no aplicables. Características gestacionales Eran primigestantes 760 mujeres (46,4%; intervalo de confianza de 95% [IC95%] 43,99–48,88), 692 tenían entre dos y tres gestaciones (42,3%; IC95% 39,87–44,71) y más de tres, 185 mujeres (11,3%; IC95% 9,82–12,96). El mínimo de gestaciones fue una, máximo 11, mediana dos, moda una, percentil 25 una y percentil 75 tres. La edad mínima de las primigestantes fue de 13 años, máxima 45, mediana 20 y moda 19. Tuvieron embarazo de alto riesgo por edad 205 mujeres (12,5%; IC95% 10,98–14,25), 52 menores de 15 años y 153 mayores de 35 años. Tuvieron anemia en algún momento 330 mujeres (20,2%; IC95% 18,25–22,20). En 629 mujeres ADMINISTRACIÓN DE ÁCIDO FÓLICO Y OTROS MICRONUTRIENTES EN... / Holguín E. y col. 146 (38,4%; IC95% 36,07–40,84) se diagnosticó al menos una enfermedad asociada. De 1 599 mujeres con información del desenlace al final de la gestación (97,7% de la muestra), 557 (34,8%; IC95% 32,51–37,23) tuvieron al menos una complicación materno-fetal, 400 parto por cesárea (25,0%, IC95% 22,9–27,2), 163 hipertensión diagnosticada en segundo y tercer trimestres (10,2%, IC95% 8,0–10,9) y 135 prematurez (8,4%, IC95% 7,2–9,9). Nueve mujeres tuvieron hijos con mal formaciones (0,6%, IC95% 0,3–1,1), de las cuales dos fueron neurológicas (una espina bífida), tres cardiovascular y renal, dos gastrointestinal y dos labio hendido. Hábitos de prescripción y consumo de ácido fólico y otros micronutrientes A 1 315 mujeres (80,3%; IC95% 78,30– 82,21) les recomendaron consumir AF. De ese total, a 1 105 (84,0%) se lo recomendó el médico, 1 188 adhirieron al tratamiento (90,3%; IC95% 88,59–91,86) y a 14 mujeres (1,3%) se lo recomendaron desde antes del embarazo —a 3 de ellas antes y durante el primer trimestre. Entre las mujeres a quienes se les recomendó AF (n = 1 315), 1 126 (85,6%; IC95% 83,59–87,46) lo adquirieron a través de su EPS/ ARS4 y 140 (10,7%; IC95% 9,06–12,47) lo compraron. Para tres mujeres la prescripción fue pertinente, existió adherencia y por tanto el consumo fue oportuno (0,2%; IC95% 0,05–0,58) (cuadros 2 y 3). A 1 192 mujeres (72,8%; IC95% 70,58– 74,95) les recomendaron consumir otros micronutrientes. A 925 (77,6%) se los recomendó el médico y 1 057 adhirieron al tratamiento (88,7%; IC95% 86,71– 90,39). De esas 1 192 mujeres, 802 (67,3%; IC95% 64,52–69,93) los adquirieron a través de su EPS/ ARS y 336 (28,2%; IC95% 25,67– 30,85) los compraron. La recomendación del consumo de micronutrientes se hizo en diversos períodos de la gesta- CUADRO 2. Pertinencia de la prescripción de ácido fólico (AF) en 1 637 mujeres que formaron parte del estudio sobre administración de AF y otros micronutrientes en embarazadas de Colombia, 2009 y 2010 Pertinencia Frecuencia Pertinentea Proporción 3 0,2 Parcialmente pertinenteb 546 33,4 No pertinentec 738 45,1 28 1,7 314 19,2 8 0,5 1 637 100,0 SD de período de prescripción No prescrito SD de prescripción Total SD: Sin datos. a Prescrito antes de la gestación y durante el primer trimestre. b Prescrito en el primer trimestre y más tiempo o solo antes de la gestación o solo durante el primer trimestre. c Prescrito en períodos distintos a los definidos como “pertinente”. CUADRO 3. Oportunidad del consumo de ácido fólico (AF) observada en 1 637 mujeres que formaron parte del estudio sobre administración de AF y otros micronutrientes en embarazadas de Colombia, 2009 y 2010 Oportunidad Totalmente oportuno No. % IC95% 3 0,2 0,05–0,6 Parcialmente oportuno 479 29,3 27,08–31,5 Totalmente inoportuno 686 41,9 39,51–44,3 No consumoa 415 25,4 23,27–27,5 54 3,3 NA 1 637 100,0 NA SD Total SD: Sin datos. NA: Datos no aplicables. a Incluye a 314 mujeres a quienes no se recomendó y 101 a quienes se recomendó pero no adhirieron al tratamiento. ción y la adherencia fue de 88,67% (1 057 de 1 192 mujeres; IC95% 86,70–90,39). A 994 mujeres se les prescribió al menos un me- dicamento durante la gestación (60,72%; IC95% 58,30–63,09). Entre los más prescritos por grupo anatómico, 571 pertenecieron al sistema nervioso (ATC-N) (57,4%; IC95% 54,29–60,53); 414 fue- 4 EPS/ARS: Entidad Promotora de Salud/Administradora del Régimen Subsidiado. ADMINISTRACIÓN DE ÁCIDO FÓLICO Y OTROS MICRONUTRIENTES EN... / Holguín E. y col. 147 ron anti-infecciosos sistémicos (ATC-J) (41,6%; IC95%38,57–44,79); 386 fueron para el sistema genitourinario y hormonas sexuales (ATC-G) (38,8%; IC95% 35,80–41,95) y 346 para el tracto alimentario y metabolismo (ATC-A) (excluyendo hierro, AF y otros micronutrientes) (34,8%; IC95% 31,86– 37,87). El grupo terapéutico más frecuente fue el de analgésicos (ATC-N02) (561, 56,4%)(38). Exploración de asociaciones Las mujeres con datos completos de desenlaces y consumo se agruparon por estrato socioeconómico (ESE) de sitio de vivienda en: bajo —estratos 0, 1 y 2—, 1 215 mujeres (74,2%; IC95% 73,02— 76,31); medio —3 y 4—, 345 (21,1%; IC95% 19,14—23,15) y alto —5 y 6—, 11 (0,67%; IC95% 0,35—1,24). En la exploración no se incluyeron las de estrato alto debido a su número reducido. La estratificación es una herramienta del Estado colombiano para clasificar la vivienda de acuerdo con el nivel de ingresos, cuyos criterios incluyen las características de la vivienda, acceso a servicios públicos, condiciones de hacinamiento y nivel de educación (41); existen seis ESE según el ingreso por salario mínimo legal vigente (SMLV): 1 = menor de uno (22,3%), 2 = entre 1 y 3 (41,2%), 3 = entre 3 y 5 (27,1%), 4 = entre 5 y 8 (6,3%), 5 = entre 8 y 16 (1,9%) y 6 = mayor de 16 SMLV (1,2%). Se recomendó más AF y otros micronutrientes a las mujeres de estrato bajo que a las de estrato medio (P < 0,05); no hubo diferencia en la adquisición de AF (P > 0,05) y hubo mayor adquisición de otros micronutrientes a través de la EPS/ARS en mujeres de estrato bajo (P < 0,05) (cuadro 4). El consumo de AF parcialmente oportuno fue mayor en las mujeres de estrato medio que en las de estrato bajo (P < 0,05) y fue totalmente inoportuno en más mujeres de estrato bajo (cuadro 5). No se encontraron diferencias significativas en los desenlaces fetales entre las mujeres con consumo oportuno y parcialmente oportuno de AF versus las que lo consumieron de modo totalmente inoportuno o no lo consumieron: prematurez, riesgo relativo (RR) 1,25; recién nacido PEG, RR 1,1; muerte fetal, RR 1,09, y malformaciones, RR 1,14 (P > 0,05). Las mujeres que consumieron otros micronutrientes tuvieron mayor riesgo de tener recién nacidos PEG, RR 1,69 (IC95% 1,14–2,51, P = 0,0000), diferencia del riesgo 7,19% (IC95% 2,08– 12,31) y fracción atribuible 40,8 (IC95% 12,1–60,1). DISCUSIÓN Las características de la gestación de las mujeres del estudio —mediana de edad del nacimiento del primer hijo de 21,7 años y número promedio de hijos por mujer de 2,0— son concordantes con lo reportado para las mujeres colombianas en edad fértil, 21,6 y 2,1 respectivamente(42). La proporción de anemia encontrada (31,6%) es similar a la registrada para las mujeres en edad fértil en el país (32,8%) y menor que la informada para las gestantes (44,7%)(41). Se encontró mayor proporción de mujeres que vivía en ESE 2 ó menos (74,2% versus 63,5%)(43), mayor proporción de afiliadas al régimen contributivo (47,5% versus 37,6%), menor al subsidiado (47,9% versus 52%) y 7,9% que no tenían afiliación. Estas diferencias podrían deberse a que el estudio no incluyó población rural, medicina privada ni prepagada, o a que las mujeres de estrato 2 tienen más embarazos, o a que la proporción de ESE 2 haya au mentado y refleje una desmejora en las condiciones económicas de la población colombiana(4, 44, 45). La recomendación y consumo elevados de AF y otros micronutrientes encontrados podrían obedecer en parte a la existencia de la norma5 y son un poco menores que los reportados para las gestantes colombianas (80,3% versus 85%)(45). La norma no parece considerar los vacíos de conocimiento sobre los beneficios y riesgos del uso masivo. Como ya se 5 Formulación de micronutrientes. ˝Se deberá formular . . . sulfato ferroso en dosis de 60 mg de hierro elemental/día y 1 mg/día de AF durante toda la gestación y hasta el sexto mes de lactancia. . .calcio durante la gestación, hasta completar una ingesta mínima diaria de 1 200-1 500 mg˝ (43). ADMINISTRACIÓN DE ÁCIDO FÓLICO Y OTROS MICRONUTRIENTES EN... / Holguín E. y col. 148 CUADRO 4. Asociación entre la recomendación y adquisición de ácido fólico (AF) y otros suplementos y el estrato socioeconómico del sitio de vivienda, observada en 1 637 mujeres que formaron parte del estudio sobre administración de AF y otros micronutrientes en embarazadas de Colombia, 2009 y 2010 Estrato socioeconómico Total Recomendación y adquisición Bajo (0,1 y 2) SD No. % No. % 100,0 66 4 1 215 74,2 1 315 80,3 54 81,8 1 007 1 126 85,6 43 79,6 140 10,7 3 49 3,7 1 192 EPS/ARS Compra Total mujeres No. % 1 637 Medio (3 y 4) No. Alto (4 y 5) % No. % P 345 21,1 11 0,7 NA 82,9a 244 70,7b 10 90,9 0,0000 861 85,5c 215 88,1d 7 70,9 0,2910 5,6 114 11,3c 21 8,6d 2 20,0 0,2202 8 14,8 32 3,2 8 3,3 1 10,0 NA 72,8 46 69,7 914 75,2e 224 64,9f 8 72,7 0,0001 802 67,3 24 52,2 655 71,7g 119 53,1h 4 50,0 0,0000 336 28,2 14 30,4 225 24,6g 94 42,0h 3 37,5 0,0000 54 4,5 8 17,4 34 3,7 11 4,9 1 12,5 NA Ácido fólico Recomendación por estrato Adquisición EPS/ARS Compra SD Otros suplementos Recomendación Adquisición SD SD: Sin datos. NA: Datos no aplicables. EPS/ARS: Entidad Promotora de Salud/Administradora del Régimen Subsidiado. a Mujeres de ESE bajo a quienes se recomendó ácido fólico (1 007 de n = 1 215). b Mujeres de ESE medio a quienes se recomendó ácido fólico (244 de n = 345). c Mujeres de ESE bajo a quienes se recomendó ácido fólico y lo adquirieron a través de su EPS/ARS (861) o por compra (114) (n = 1 007). d Mujeres de ESE medio a quienes se recomendó ácido fólico y lo adquirieron a través de su EPS/ARS (215) o por compra (21) (n = 244). e Mujeres de ESE bajo a quienes se recomendó otro suplemento (914 de n = 1 215). f Mujeres de ESE medio a quienes se recomendó otro suplemento (224 de n = 345). g Mujeres de ESE bajo a quienes se recomendó otro suplemento y lo adquirieron a través de su EPS/ARS (655) o por compra (225) (n = 914). h Mujeres de ESE medio a quienes se recomendó otro suplemento y lo adquirieron a través de su EPS/ARS (119) o por compra (94) (n = 224). mencionó, se conocen los beneficios del suplemento de AF en ciertos períodos y grupos de riesgo, pero no sus riesgos por sobreexposición fetal a largo plazo ni en la población general, y existe controversia sobre beneficios y riesgos de otros micronutrientes(18, 22–28). Este estudio mostró que, en casi la mitad de las gestantes, el AF se prescribió en períodos en los que no ha demostrado tener utilidad, mientras que solo en 0,2% de los casos la prescripción fue pertinente y el consumo oportuno. Una intervención de demostrada utilidad se vuelve inútil, y potencialmente peligrosa, en una sociedad donde la ingesta inadecuada e inequitativa de alimentos se conjuga con el acceso inequitativo e inoportuno a los servicios de salud. Muchos embarazos son no deseados, el ac ceso a consulta pre-concepcional es raro y el CPN muchas veces es tardío o nulo, y la prescripción (y consumo) de AF se hace como un acto administrativo, lo que lleva a la prescripción no pertinente y al consumo inoportuno. Dado que la pertinencia de la prescripción no garantiza el consumo oportuno, hay que orientar los esfuerzos a mejorar la prescripción, el acceso y la adherencia. Si bien los programas de suplementación masiva de micronutrientes pretenden enfrentar la ingesta inadecuada de alimentos derivada de la inequidad en la sociedad actual, pierden de vista que las interven- ADMINISTRACIÓN DE ÁCIDO FÓLICO Y OTROS MICRONUTRIENTES EN... / Holguín E. y col. 149 CUADRO 5. Asociación entre el consumo de ácido fólico (AF) y otros suplementos y el estrato socioeconómico del sitio de vivienda (ESE), observada en 1 637 mujeres que formaron parte del estudio sobre administración de AF y otros micronutrientes en embarazadas de Colombia, 2009 y 2010 Estrato socioeconómico Bajo (0,1 y 2) SD Consumo/Característica Medio (3 y 4) Alto (4 y 5) Total No. % No. % No. % No. % P 1 637 66 4,0 1 215 74,2 345 21,1 11 0,7 NA Prescrito 1 315 54 4,1 1 007 82,9 244 70,7 10 90,9 0,00002 Adherencia 1 188 50 4,2 918 91,2 211 86,5 9 90,0 0,02684 20 2 0,1 16 1,6 2 0,8 0 0,0 NA 1 120 0 0,0 902 80,5 209 18,7 9 0,8 NA 3 0 0,0 2 0,2a 1 0,5b 0 0,0 NA Consumo parcialmente oportuno 459 0 0,0 314 34,8c 140 67,0d 5 55,6 0,00000 Consumo totalmente inoportuno 658 0 0,0 586 65,0e 68 32,5f 4 44,4 0,00000 Prescritos 1 192 46 3,9 914 76,7 224 18,8 8 0,7 NA Adherencia 1 057 37 80,4 827 90,5g 186 83,0h 7 87,5 0,00126 Total mujeres Ácido fólico SD período de consumo Total adherencia, período de consumo y ESE Consumo totalmente oportuno Otros micronutrientes SD: Sin datos. NA: Datos no aplicables. a Mujeres con ESE bajo, prescripción oportuna y adhesión al tratamiento (2 de n = 902). b Mujeres con ESE medio, prescripción oportuna y adhesión al tratamiento (1 de n = 209). c Mujeres con ESE bajo, prescripción parcialmente oportuna y adhesión al tratamiento (314 de n = 902). d Mujeres con ESE medio, prescripción parcialmente oportuna y adhesión al tratamiento (140 de n = 209). e Mujeres con ESE bajo, prescripción totalmente inoportuna y adhesión al tratamiento (586 de n = 902). f Mujeres con ESE medio, prescripción totalmente inoportuna y adhesión al tratamiento (68 de n = 209). g Mujeres con ESE bajo, AF prescrito y adhesión al tratamiento (827 de n = 914). h Mujeres con ESE medio, AF prescrito y adhesión al tratamiento (186 de n = 224). ciones asistenciales individuales deben basarse en las necesidades particulares del paciente. La evidente problemática nutricional, que genera mayor riesgo para las gestantes más pobres y sus hijos, no se puede resolver con el suplemento de algunos de los nutrientes que son solo parte de sus deficiencias. Los programas de suplementación masiva de micronutrientes en una sociedad empobrecida e inequitativa no solo son de utilidad biomédica dudosa o desconocida y desaprovechada para el AF, sino que además pueden generar riesgos innecesarios para la salud en la población objetivo y en la población general (8–10) y, más importante todavía, promueven la pérdida de la perspectiva colectiva del problema nutricional, provocan una desviación del reconocimiento de las necesidades reales de la población gestante, no apuntan a la solución de los problemas fundamentales, y generan o fortalecen problemas económicos, políticos y culturales que determinan la situación nutricional de las gestantes. Más aún, estos programas suelen profundizar las inequidades económicas, ya que la inversión en intervenciones de beneficios dudosos y riesgos poco conocidos deriva los recursos hacia quienes menos los necesitan (productores, comercializadores e intermediarios de micronutrientes), se pierde la oportunidad de inversión en medidas de demostrada utilidad, como el acceso al CPN para detección de riesgo por bajo peso o ingesta inadecuada y de condiciones médicas asociadas (p. ej. consumo de ADMINISTRACIÓN DE ÁCIDO FÓLICO Y OTROS MICRONUTRIENTES EN... / Holguín E. y col. 150 ciertos medicamentos o riesgo familiar de DTN)(46), todo lo cual sería fácil de lograr con mayor acceso a trabajos adecuadamente remunerados y acceso oportuno a los servicios de salud. Adicionalmente, la mayor frecuencia de recomendación de AF y otros micronutrientes, y la menor oportunidad de consumo de AF en mujeres de ESE más bajos encontrada, apoyan la hipótesis de que los programas de suplementación masiva contribuyen a profundizar la inequidad, pues quienes más se podrían beneficiar son las que menos los reciben. La suplementación masiva de micronutrientes tiene un sentido político, que se traduce en pérdida de autonomía por parte de las gestantes al conducirlas a asumir su condición fisiológica como dependiente de las intervenciones asistenciales de salud sin cuestionar su utilidad. Asimismo, contribuye a medicalizar la gestación y fomenta relaciones de “men dicidad” al promover la solución de un problema estructural de alimentación por medio de la entrega institucional de micronutrientes. Además, estas intervenciones afianzan una concepción biologista y asistencialista de la salud; estimulan la sensación de mantenimiento de la salud en función del consumo de servicios asistenciales y medicamentos, hacen perder de vista la necesidad de condiciones sociales adecuadas para el mantenimiento de la salud (p. ej. alimentación, educación y trabajo), niegan la esencia social de la salud y favorecen la medicalización de la vida. En los análisis exploratorios no se encontró ningún efecto benéfico ligado a los desenlaces maternofetales relevantes en las mujeres que recibieron AF, pero sí se halló un mayor riesgo del recién nacido PEG entre consumidoras de otros micronutrientes. Tal resultado debe ser examinado con precaución, confrontándolo con hallazgos de estudios contra dictorios que muestran que el consumo de micronutrientes reduce el riesgo de partos pretérmino extremo y nacimientos de niños PEG(34, 35) y otros que lo asocian con riesgo de parto pretérmino(33) y de recién nacido grande para la edad gestacional y muerte perinatal(36), sugiriendo que la suplementación rutinaria de micronutrientes no es racional y que se deben buscar otras estrategias para mejorar su ingesta —sin que impliquen riesgos de sobreexposición. Conclusiones y recomendaciones Las limitaciones de este trabajo son las propias de un estudio descriptivo con selección de muestra por conveniencia. Las características fundamentales de la muestra son similares a las reportadas para las mujeres colombianas, lo que permite extrapolar los resultados a las gestantes colombianas, de procedencia urbana, que asisten a control institucional de la gestación y el parto. El tamaño de la muestra es adecuado para describir hábitos de prescripción y consumo, pero es insuficiente para evaluar algunos desenlaces. Por esta razón, y por el diseño, las asociaciones presentadas son exploratorias y se deben interpretar con las precauciones del caso. Los resultados invitan a reflexionar acerca de la utilidad de los programas de suplementación masiva de micronutrientes, que no solo desconocen —u ocultan— las causas fundamentales de los problemas nutricionales de las gestantes, sino que además contribuyen a profundizarlas. La intervención para el aumento del consumo de micronutrientes de mayor impacto en la salud de las gestantes y sus hijos está destinada a fortalecer la nutrición, propósito que va de la mano con la mejora en el acceso al empleo con condiciones adecuadas. En este sentido, aun cuando algunas medidas han mostrado cierta utilidad, como la fortificación de alimentos con AF, que ha disminuido el nacimiento de niños con DTN(47, 48), es preciso evaluar adecuadamente su relación beneficio/riesgo, dados los hallazgos de riesgos por sobreexposición en las gestantes, sus hijos y la población general(18–23, 25–28, 31) . Haría falta entonces determinar el estado nutricio nal de la población, evaluando cada nu triente particular, para poder proponer este tipo de ADMINISTRACIÓN DE ÁCIDO FÓLICO Y OTROS MICRONUTRIENTES EN... / Holguín E. y col. 151 intervenciones masivas sin exponer a la población a riesgos de sobreexposición. Con esta idea, reviste gran importancia definir las intervenciones individualmente, con base en las necesidades de las gestantes que derivan de los riesgos detectados en el CPN —por ejemplo, la mayor probabilidad de déficit de folatos por deficiencia nutricional o consumo de medicamentos—, para lo cual se requiere mejorar el acceso a los servicios de salud. Esta estrategia dirigiría los recursos a intervenciones más efectivas según las necesidades particulares de las gestantes, al tiempo que evitaría exponer a las gestantes y a sus niños a riesgos de exposición innecesarios. En casos de necesidad individual, se deberá evaluar la efectividad de la suplementación de origen dietario, comparándola con la de origen sintético, para determinar cuál de las dos conlleva un mayor beneficio. Financiamiento. Los recursos para el presente estudio provinieron de un convenio INVIMA-Universidad Nacional de Colombia. Conflictos de interés. Ninguno declarado por los autores. Referencias 1. 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Presentamos el caso de un neonato de 20 días de vida del sexo masculino con grupo y Rh similares a la madre, transferido a nuestro hospital por presentar ictericia con niveles séricos de bilirrubina elevada y anemia severa. Previo a estudios hematológicos se inicio fototerapia y transfusiones sanguíneas. Estudios posteriores confirmaron que la anemia hemolítica e ictericia del paciente fueron debidas a la presencia de anticuerpos irregulares Anti C y anti Cw. La hemolisis cedió paulatinamente, la evolución del neonato fue favorable y el paciente fue externado con una biometría hemática normal y sin problemas posteriores. El presente caso nos recuerda y llama la atención que con la declinación de la anemia hemolítica por incompatibilidad Rh, se debe tener en cuenta ictericia y hemolisis secundaria a grupos inusuales o menores. Palabras clave: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 155-8: Enfermedad hemolítica, isoinmunizacion, ictericia, neonato. Abstract Hemolytic disease of the fetus and newborn is an autoimmune disease, frequently seen in cases of ABO incompatibility, less frequent in Rh disease and very rare in cases on incompatibility to minor blood groups. We report the case of a 20 days old newborn with compatible blood group and Rh, transferred to our hospital because jaundice and severe anemia. After a lab work up, he received blood transfusions and phototherapy. The lab results were positive for antibodies anti C and anti Cw. The jaundice and anemia resolved and the patient was discharge without any further problems. Introducción rinatal, ha pasado a ser en la actualidad una patología de aparición ocasional, sobre todo desde la prevención mediante la administración de gammaglobulina anti Rh de la enfermedad hemolítica por incompatibilidad Rh.1 La enfermedad hemolítica neonatal considerada hace unas décadas una enfermedad frecuente y grave que influía considerablemente en la morbimortalidad pe- Key words: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 155-8: Hemolytic disease, isoimmune sensitization, jaundice, newborn. * Médico Residente de segundo año de pediatría. Hospital del Niño “Dr. Ovidio Aliaga Uria”. ** Médico del Servicio de Neonatología. Hospital del Niño “Dr. Ovidio Aliaga Uria”. *** Medico Hematólogo. Hospital del Niño “Dr. Ovidio Aliaga Uria”. Correspondencia: Dr. Gustavo Choque Osco, correo electrónico: [email protected] Conflicto de intereses: los autores expresan que el presente trabajo no tiene conflicto de intereses. Artículo aceptado para su publicación el 4/11/13. Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 155 - 8 155 La enfermedad hemolítica del feto y del recién nacido es una afección inmunológica autoinmune, en la cual la sobrevida del hematíe fetal y del recién nacido está acortada debido a la acción de anticuerpos maternos que pasan a través de la placenta y que son específicos contra antígenos de origen paterno presentes en las células rojas fetales y del recién nacido. la atención la ictericia prolongada que presentaba el paciente hasta la región de los tobillos. Al examen físico de ingreso el neonato se encontraba activo reactivo afebril, piel y mucosas hidratadas, persistía la coloración amarillenta de piel y mucosas, fontanelas normotensas, cardiopulmonar normal, abdomen blando depresible no doloroso, ruidos intestinales normales y un examen neurológico normal. En 1932, Diamond, Blackfan y Batty describieron la Erytroblastosis foetalis2. Smith C. Denominó a esta entidad enfermedad hemolítica del feto y del recién nacido, a la que hoy en día, dada la extensión de los conocimientos sobre ella, se le denomina enfermedad hemolítica perinatal (EHPN)2. En nuestra institución se realizo la determinación de bilirrubina total, la cual estaba en 20.7 mg/dL a predominio de la indirecta, se continua con la fototerapia con la remisión de la ictericia y ultimo control en 8.3 mg/dL a predominio de la indirecta; la determinación del TSH neonatal fue normal; la Hb: de 11,7 g/dL y Hto de 35%, la prueba de Coombs directa positiva y el estudio de inmunohematologia revelo la presencia de anticuerpos irregulares Anti C y anti Cw, clínicamente significativos en la enfermedad hemolítica del recién nacido, que serian responsables de la sensibilización y hemolisis del neonato. Desde entonces hasta la fecha han ocurrido grandes progresos en el conocimiento de los grupos sanguíneos que han permitido precisar que la EHPN no sólo se debe a anticuerpos contra el antígeno D, sino que también están involucrados otros antígenos del sistema Rh, el sistema ABO y de otros sistemas antigénicos; con los avances científicos en el diagnóstico, profilaxis y tratamiento de esta entidad se ha logrado disminuir su incidencia y morbimortalidad3. Hoy en día el interés se centra en la mejora de las medidas preventivas y en la atención de los casos residuales en centros de referencia para su mejor manejo y tratamiento. Caso clínico Se trata de un neonato de 20 días de vida, sexo masculino que ingresa a nuestro hospital transferido del Hospital Corea de la ciudad de El Alto, cuyo motivo de consulta inicial fue la coloración amarillenta de piel y mucosas, se le realizo en el mencionado hospital determinación de la bilirrubina sérica total, la cual se encontraba en 27 mg/dL y una Hb de 7,2 g/ dL, Hto 22%, ambos grupos de la madre y del niño eran O-Rh positivos, se le inicio fototerapia y transfusión de hemoderivados. Transferido para la valoración por hematología a nuestra institución, llamo Desde su ingreso, el paciente no presento signo-sintomatología neurológica ni otros signos de peligro. El paciente fue externado en buenas condiciones generales y controlado en consultorio, los últimos controles solicitados indicaron una Hb: de 12,3 g/ dL y Hto: 38%, reticulocitos 1%. Actualmente el paciente se encuentra asintomático con buena evolución y seguimiento periódico. Discusión La enfermedad hemolítica del recién nacido es cada vez menos frecuente, sobre todo la incompatibilidad por Rh que casi ha desaparecido por la introducción de la gammaglobulina anti Rh administrada a las pacientes Rh negativas, luego del primer parto, sangrado, aborto, etc., con una otra dosis alrededor del segundo trimestre del embarazo. 1 Estudios por citometría de flujo han demostrado que pequeñas transfusiones fetomaternas ocurren con mucha frecuencia en los embarazos3. Cuando CASO INUSUAL DE ENFERMEDAD HEMOLÍTICA NEONATAL / Choque G. y col. 156 los eritrocitos fetales que contienen algún antígeno heredado del padre y que no lo posee la madre, acceden a la circulación materna, se forman anticuerpos específicos; a este fenómeno se denomina isoinmunización. Estos anticuerpos que corresponden a la clase IgG atraviesan la placenta y se unen a los hematíes fetales, los cuales son destruidos fundamentalmente en el bazo (macrófagos y linfocitos k y Nk)3-4. Y conllevan a la hemolisis de severidad variable4. El antígeno D del sistema Rh es la causa más común de isoinmunización, pero se han descrito más de 43 antígenos capaces de producir enfermedad hemolítica. Los del sistema Rh son AntiD, -c, -C, -Cw, -Cx, -e, -E, Ew, - ce, -Ces, -Rh32, -Goa, -Bea, -Evans, - LW, como los corroborados en nuestro paciente. Otros sistemas como el factor Kell, Duffy o Kidd tienen también importancia clínica5. En general, se recomienda que a toda mujer embarazada se le realice en forma rutinaria, estudios de grupo sanguíneo, Rh y cribado de anticuerpos mediante la prueba de Coombs indirecto, para descartar problemas de sensibilización. La gravedad de la enfermedad hemolítica del RN por isoinmunización Rh varía desde leve a severa y puede ser evitada con la administración de gamma globulina anti Rh luego de cualquier hemorragia, aborto o primer embarazo y alrededor de la semana 28 de gestación. El seguimiento obstétrico es importante con pruebas serológicas y estudios de liquido amniótico. La evaluación de la historia perinatal, es el primer paso a considerar por parte del pediatra encargado de atender al hijo de una madre inmunizada6-7. En sangre de cordón se determina inmediatamente hematocrito, hemoglobina, grupo, Rh, prueba de Coombs y otras determinaciones necesarias. Debe estar preparada sangre, de las mismas características que las descritas para el feto y cruzada con la madre7. De acuerdo con los datos clínicos y severidad del cuadro se realiza fototerapia intensiva y recambio sanguíneo de acuerdo a Normas establecidas. Generalmente se indica cuando los valores de Hb en sangre de cordón son < de 10 g/L o la bilirrubina > 5 mg/dL. Se ha demostrado una efectividad considerable con el uso de fototerapia intensiva, aun en casos de ictericia hemolítica, también se sugiere en algunos casos la administración de fenobarbital y más recientemente de metaloporfirinas, aunque sin consenso universal8. Estos niños pueden presentar anemia tardía (entre las 4-6 semanas de vida), que habrá que vigilar en particular en aquellas formas que no han precisado recambio sanguíneo y en las que la hemólisis ha seguido actuando más tiempo, como es el caso de nuestro paciente estudiado. Las experiencias llevadas a cabo en los años 60, partiendo de la hipótesis de que la isoinmunización podría prevenirse mediante la administración de anticuerpos específicos, llevó a la recomendación universal de esta medida con una drástica reducción en la aparición de nuevos casos7-8. Sin embargo todavía se observan casos de hemolisis debido a la omisión de la profilaxis al momento del parto y /o luego de abortos, biopsia corial, o sangrados vaginales. El presente caso nos estimula a investigar en los paciente con ictericia neonatal y anemia, las diferentes causas de anemia hemolítica perinatal y sobre todo a considerar incompatibilidad a grupos menores.9 Referencias 1. Mazzi E. Ictericia neonatal. En: Mazzi E, Sandoval O, eds. Perinatología. 2da. Ed. La Paz: Elite Impresiones 2002. p.483-501. 2. López de Roux MR, Cortina L, Enfermedad Hemolítica Perinatal. Rev Cubana Hematol Inmunol Hemoter 2000;16:161-83 3. Creasy RK, Resnik R, Iams JD. Maternal-Fetal Medicine: Principles and Practice. Fifth Edition. Saunders, Philadelphia 2008 CASO INUSUAL DE ENFERMEDAD HEMOLÍTICA NEONATAL / Choque G. y col. 157 4. Rennie JM and Roberton Textbook of Neonatology. NRC. Elsevier Churchill Livingstone. Fourth Edition 2009. 5. Martin RJ, Fanaroff AA, Walsh MC. Care of the high-risk neonate. Saunders,8th Edition, Philadelphia 2006. 6. Madero L y Muñoz Villa A. Hematologia y Oncología Pediátricas. 2ª edición. Ergón, Madrid 2010 7. 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CASO INUSUAL DE ENFERMEDAD HEMOLÍTICA NEONATAL / Choque G. y col. 158 CASO CLINICO Hepatoblastoma: causa inusual de abdomen quirúrgico agudo Hepatoblastoma: unusual cause of acute surgical abdomen Drs.: Nelly Fabiani Hurtado*, David Ballón Cossío**, Astrid Riveros** Resumen Presentamos el caso clínico de un escolar de 6 años y 3 meses con hepatoblastoma y que se manifestó como un abdomen agudo quirúrgico, que es una presentación poco frecuente dentro de la incidencia de este tumor. Abstract: We present the clinical case of a school for 6 years and 3 months with hepatoblastoma and which manifested itself as a surgical acute abdomen, which is a rare presentation within the incidence of this tumor. Palabras Claves: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 159-61: Hepatoblastoma, abdomen agudo quirúrgico. Key words: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 159-61: Hepatoblastoma, acute surgical abdomen. Introducción depende del tamaño o afectación del hígado y de otros órganos; este tumor tiene en su interior áreas de necrosis y vascularización y que puede verse comprometidas en caso de traumatismo a nivel abdominal3. Cuando hablamos de abdomen agudo es importante diferenciar entre aquel que necesita una intervención médica y el que amerita una intervención quirúrgica. En pediatría, el abdomen quirúrgico puede presentarse con síntomas inespecíficos como dolor abdominal, diarrea, vómitos y fiebre, entre otros, por lo cual el diagnóstico puede retrasarse o incluso no diagnosticarse 1. Entre las primeras causas pediátricas de abdomen agudo quirúrgico está la apendicitis, las menos frecuentes son secundarias a tumores o traumas, siendo más frecuente la ruptura esplénica antes que la ruptura hepática 2. El hepatoblastoma es un tumor primario poco frecuente en pediatría, con clínica muy variable que Presentamos el caso clínico de un paciente con hepatoblastoma que produjo un abdomen agudo quirúrgico, como una presentación poco frecuente dentro de la incidencia de este tumor. Caso clínico Paciente de 6 años 3 meses de edad, de sexo masculino, con el antecedente de haber recibo un leve golpe a nivel del flanco derecho tres meses antes de su ingreso, presentando de inmediato dolor intenso en esta misma región, que obligaba a posición antiálgi- * Médico Residente de Pediatría de Segundo Año. Hospital del Niño “Dr. Ovidio Aliaga Uria”. ** Médico de Unidad de Oncología. Hospital del Niño “Dr. Ovidio Aliaga Uria”. Correspondencia: Dra. Nelly Fabiani, correo electrónico: [email protected] Conflicto de intereses: los autores expresan que el presente trabajo no tiene conflicto de intereses. Artículo aceptado para su publicación el 12/11/13. Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 159 - 61 159 ca. Una semana después el paciente presentó fiebre, hiporexia, palidez, astenia, adinamia e intensificación del dolor que era de tipo visceral. Consultó en una clínica privada donde se considero como un abdomen agudo quirúrgico. Se le realizó una laparoscopia exploratoria donde se encontró un hematoma localizado en la capsula hepática, con diátesis hemorrágica leve a nivel de una vena hepática. Se realizó la hemostasia y limpieza de la región. Durante el post-operatorio se observo un aumento de volumen de la región del hipocondrio derecho, que estaba asociado a perdida de peso, alzas térmicas y compromiso general. Se realizo una tomografía computarizada (TC) donde se observó una masa a nivel hepático donde se localizaba la hemorragia, motivo por el cual se dio su transferencia al Hospital del Niño, donde clínicamente se le observó con un estado emaciado, ictericia escleral leve, asimetría abdominal a predominio del hemiabdomen derecho, con masa palpable de 13-8-4 cm, perímetro abdominal de 68 cm, no doloroso a la palpación, de consistencia firme. El hemograma reportaba hemoglobina 12 g/dL, glóbulos blancos 18,100/µL, plaquetas 203,000/µL. Glucemia 88 mg/dL, bilirrubina total 1,2 mg/dL, bilirrubina directa de 0,7 mg/dL, TGO 184 UI/L, TGP 98,5 UI/L, tiempo de Figura # 1.- TAC de abdomen con contraste. Se observa la presencia de la masa a nivel hepático, con presencia de imágenes heterogéneas, con regiones de necrosis dentro de la masa protrombina 15 seg y actividad de 76,8%. TC contrastada de tórax sin alteración o compromiso pulmonar, α-fetoproteina (AFP) en 356 UI/mL. Se decidió no realizar biopsia diagnóstica, asumiéndose el caso como un hepatoblastoma PRETEXT III H1 (inoperable) por la clínica y los estudios de gabinete y laboratorio. Se inició quimioterapia según protocolo SIOPEL. Discusión El abdomen quirúrgico en pediatría tiene síntomas muy inespecíficos, siendo el dolor a nivel abdominal el dato más importante, y para la correcta aproximación de este es necesario una correcta anamnesis, exploración clínica y estudios de imagen, teniendo en cuenta que la administración de analgésicos no influye en el diagnóstico de este tipo de emergencia abdominal1,2. Entre las emergencias mas reportadas están en primer lugar la apendicitis, otras patologías intestinales como anomalías congénitas, invaginaciones, obstrucciones etc1,2. Por otro lado, el abdomen agudo traumático puede ser cerrado o abierto, siendo las lesiones de vísceras sólidas las más frecuentes, el compromiso hepático es el segundo mas frecuente en los traumatismos cerrados con afectación del lóbulo derecho, siendo la tomografía computada el método de elección para el diagnóstico. Existen criterios para el manejo conservador, así como es importante determinar la localización y compromiso de la lesión para determinar la intervención quirúrgica3. Nuestro paciente tenia todos lo datos para realizar una laparoscopia de emergencia por el hemoperitoneo que presentaba. El hepatoblastoma es un tumor maligno considerado un tumor primario del hígado, representando con los tumores hepáticos solo el 1% de todos los tumores pediátricos, con mayor incidencia en la población infantil. La mayoría se diagnostica antes de los 5 años y es más frecuente en niñas4. Aunque el hepatoblastoma se reporta asociado a síndromes genéticos como el síndrome de Beckwith-Weidemann, HEPATOBLASTOMA: CAUSA INUSUAL DE ABDOMEN QUIRÚRGICO POST- / Fabiani H. y Col. 160 hemihipertrofia, adenomatosis polipoide familiar, el 80% de los casos no se asocia a estos síndromes4,5. Se presenta generalmente con dolor abdominal, masa palpable, constipación, trombocitosis, observándose con mayor frecuencia la afectación del lóbulo derecho del hígado5. Raramente este tumor produce una presentación como emergencia abdominal espontánea o secundaria a un traumatismo6,7, reportándose solo entre un 2-3% en el momento del diagnóstico. La hemorragia secundaria al trauma puede detenerse a nivel de la capsula y limitarse o liberarse a nivel abdominal produciendo un sangrado incontrolable, que se correlaciona con recurrencia del tumor, complicaciones quirúrgicas y mortalidad, motivo por el cual la ruptura se considera como un factor de algo riesgo10. Esta incidencia es tan baja que en el reporte del grupo International Childhood Liver Tumours Strategy Group (SIOPEL), de 151 pacientes ninguno presento ruptura al diagnóstico11. Aunque hay opciones para el manejo de esta emergencia como la ligadura de la arteria hepática o quimioembolización, depende mucho de la disponibilidad de medios, la condición del paciente y el tamaño de tumor al momento de la ruptura6, y la mortalidad por esta complicación es alta8,9. Una vez estabilizada la emergencia, se deberá iniciar esquemas de quimioterapia y programar la exéresis del tumor para su manejo. Según la clasificación de extensión de la enfermedad previa al inicio del tratamiento (PRETEXT), se considera la ruptura hepática como un estadio III. Actualmente el paciente se encuentra estable, sin complicaciones, y recibiendo esquemas de quimioterapia según esquemas SIOPEL. Referencias 1. Mccoollough M, Sharieff GQ. Abdominal surgical emergencies in infants and young children. 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HEPATOBLASTOMA: CAUSA INUSUAL DE ABDOMEN QUIRÚRGICO POST- / Fabiani H. y Col. 161 CASO CLINICO Síndrome de Casamassima Casamassima syndrome Drs.: Miguel Céspedes Lesczinsky*, Vania Vejarano Vásquez**, Claudia López Beltrán**, Carlos Omar Bersatti** Resumen El síndrome de Cassamasima se caracteriza por una triada que consiste en alteraciones costovertebrales, atresia anal y alteraciones genitourinarias, siendo un síndrome de presentación rara y cuya supervivencia estará determinada por la gravedad de las alteraciones. Presentamos el caso de un niño con características típicas de este síndrome. Palabras claves: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 162-4: alteraciones costales y vertebrales, atresia anal, anomalías urinarias, Cassamasima. Introducción En el año 1938 Jarcho y Levin describieron a dos hermanos que tenían múltiples malformaciones costales y vertebrales, consistentes en hemivértebras, vértebras fusionadas, agenesia y duplicación vertebral, a partir de entonces esta enfermedad se conoce como Síndrome de Jarcho-Levin, que aunque siendo una enfermedad rara es común en la zona hispana de América sobretodo en la población puertorriqueña. Ha recibido múltiples nombres como hemivértebras múltiples hereditarias, displasia espondilocostal, displasia costovertebral, síndrome de anomalías vertebrales pleomórficas y otros, cuando el fenotipo de Jarcho-Levin se acompaña de anomalías renales y/o atresia anal * ** Abstract Cassamasima syndrome is characterized by a triad consisting costovertebral alterations, anal atresia, and genitourinary disorders, being rare and whose survival is determined by the severity of the disturbances. We report the case of a child with typical features of this syndrome. Keywords: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 162-4: rib and vertebral abnormalities, anal atresia, urinary abnormalities, Cassamasima. se denomina Síndrome de Casamassima. Para algunos autores este último sólo sería una variante fenotípica del primero, para otros autores es una patología totalmente diferente apoyados en estudios más recientes que así lo plantean. Presentamos el caso de un niño con las características que definen a este síndrome y hacemos una breve revisión de la literatura. Caso clínico Paciente de 1 año y 1 mes de edad que ingresa al servicio de Pediatría del Hospital Materno Infantil Boliviano Japonés, con cuadro clínico de constipación, siendo secundario a cirugía correctiva de ano Médico Pediatra. Hospital Materno Infantil Boliviano Japonés. Trindad - Beni Médico Residente de segundo año de Pediatria. Hospital Materno Infantil Boliviano Japonés. Trinidad- Beni Correspondencia: Dra. Miguel Céspes Lesczinsky, correo electrónico: [email protected] Conflicto de intereses: los autores expresan que el presente trabajo no tiene conflicto de intereses. Artículo aceptado para su publicación el 2/10/13. Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 162 - 4 162 imperforado y fístula perianal, lográndose la remisión del mismo. Antecedente de ser producto de 4ta gesta, obtenido por parto eutócico vaginal, aparentemente sin complicaciones durante el embarazo y 4 controles médicos durante el mismo, peso de nacimiento 2.000 gramos, recibe lactancia materna exclusiva durante 6 meses y luego alimentación complementaria, presentó retraso en la adquisición del sostén cefálico y de la sedestación, a los 7 y 12 meses respectivamente. A los 9 días de vida requirió ingreso en Neonatología por sospecha de infección respiratoria. La cirugía correctiva de la imperforación anal se realiza a los 2 meses de vida. No refiere otros antecedentes de importancia. Al examen físico paciente hidratado, en buen estado general, activo, reactivo, la sedestación no se logra sin apoyo, no se logra poner en bipedaestación, no camina, desarrollo cognitivo acorde a la edad. Cabeza normocéfala, con frente amplia, en boca se observan caries dentales, cuello sin adenopatías ni alteraciones, tórax levemente asimétrico en lado derecho, con un mayor diámetro anteroposterior, a la auscultación cardiaca sin soplos, auscultación pulmonar con MV conservado, abdomen blando depresible, no doloroso, no se palpan visceromegalias. Se observa asimetría en la longitud de los miembros inferiores, siendo el derecho más corto por 2 cm, asimismo existe una limitación a la abducción de la cadera, pie derecho en aducción y rotación interna y dorsiflexión plantar, en región anal se evidencia estrechez producto de la cicatriz quirúrgica. Con el antecedente de la internación en Neonatología donde se evidenció en la radiografía de tórax alteraciones vertebrales y costales, se decide tomar nuevas placas radiográficas, donde evidenciamos la presencia de alteraciones en vértebras dorsales y lumbares, abarcando desde D4 a L2, con vértebras en mariposa, hemivértebras, con fusión de D6 y D7, D8 y D9, lo que provoca la presencia de escoliosis, asimismo fusión de arcos costales en su inserción esternal de 3era a 6ta costillas del lado derecho y 4ta a 8va costillas del lado izquierdo, lo que provoca una dismiSÍNDROME DE CASAMASSIMA / Céspedes M. y Col. nución de la longitud del tórax en su conjunto. En la radiografía de pelvis se observa hipoplasia de pelvis izquierda, ausencia del acetábulo derecho y oblicuidad del techo cotiloideo. En la ecografía abdominal reporta agenesia de riñon derecho. Hemograma y bioquímica sanguínea normales, orina normal. Con todos los datos se llega al diagnóstico de Sindrome de Casamassina. Discusión Casamassima y cols. en el año 1981 describieron a dos hermanos que presentaban el fenotipo de Jarcho-Levin acompañado de atresia anal y anomalías urogenitales, es así que estos autores consideraron que se trataba de una enfermedad diferente y aislada, además como los casos descritos se trataban de una familia consanguínea concluyeron que la herencia más probable era autosómica recesiva. Para otros autores sin embargo el Síndrome de Casamassima sólo es una variante del Síndrome de Jarcho-Levin, no habiendo consenso en cuanto a conceptos, ya que muchos han considerado como Jarcho-Levin todo defecto severo costovertebral al margen que se presenten aislados o acompañados de otros defectos congénitos, lo que ha dado lugar a un grupo muy heterogéneo en cuanto a clínica y etiología, esto ha llevado a usar el término “fenotipo Jarcho-Levin” para referirse a las manifestaciones costovertebrales en niños con defectos múltiples, tampoco hay consensos sobre su patrón de herencia, algunos consideran que puede ser autosómico recesiva, dominante o esporádica. Su prevalencia es baja y es una enfermedad rara, en un estudio español con más de 1.400.000 recién nacidos vivos se determinó una frecuencia de 0,3 por 100.000 nacidos vivos. En cuanto a la etiología se cree que esta pudiera deberse a alteraciones en los genes Pax1 y Pax9 ya que estos intervienen tanto en el desarrollo del sistema esquelético como genitourinario. La patogénesis es poco conocida aunque se sabe que las alteraciones se dan en las primeras seis semanas de gestación, durante el proceso de diferenciación me163 senquimal, las somitas se dividen en dermotomos, miotomos y esclerotomos, las células esclerotómicas se dirigen hacia afuera para formar una envoltura pericordal, desde la cual el área densa central formará los discos intervertebrales y el área densa periférica las vértebras y costillas, una alteración en la secuencia y en la regulación de las señales de la diferenciación celular sería la causante de las alteraciones vertebrales, las anomalías costales al parecer son secundarias a estas. Las manifestaciones clínicas que se han descrito para el fenotipo Jarcho-Levin son occipucio prominente, frente amplia, narinas antevertidas, puente nasal ancho, implantación baja del cabello, tórax corto, cuello corto, escoliosis, extremidades largas en relación al tronco, hipoplasia de la pelvis y pie equinovaro, nuestro paciente presentaba algunas de estas características. Entre las malformaciones asociadas tenemos atresia de ano, estenosis duodenal, hernias, fusión de lóbulos frontales, sindactilia, entre las alteraciones genitourinarias, criptorquidia, hidrocele, hidronefrosis, riñon en herradura, agenesia renal, displasia multiquística, utero bicorne, cloaca persistente, fístula urinaria y otros, la triada del síndrome de Casamassina son las alteraciones costovertebrales, atresia anal y anomalías genitourinarias. La radiografía es el método de elección para demostrar las alteraciones esqueléticas, ecografía, TAC, gamagrafía para las alteraciones renales y vías urinarias. Aunque en un principio se pensaba que se trataba de un síndrome letal, se ha visto una sobrevida de hasta 56% aunque esto no es compartido por otros autores, el pronóstico estará dado por SÍNDROME DE CASAMASSIMA / Céspedes M. y Col. los problemas respiratorios que son dependientes de las alteraciones de la caja torácica, infecciones recurrentes por esta misma causa y la gravedad de las alteraciones genitourinarias. Entre los diagnósticos diferenciales podemos citar disostósis espondilocostal, síndrome de Klippel Feil, asociación VACTERL, síndrome de Goldenhar, etc. Referencias 1. Martínez ML, Bermejo Sanchez E, Martínez S, Nieto C, Egüés J y col. Síndromes de Jarcho-Levin y Casamassima: Diagnóstico diferencial y frecuencia en España. An Esp Pediatr 1998;48:510-4. 2. Freire-Abelleira C, Gonzáles-Herranz P, De la Fuente-Gonzáles C, Castro-Torre M. Anomalías congénitas de vértebras y costillas: Síndrome de Jarcho-Levin. Revisión clínica. Acta Ortop Gallega 2006;2:7-10. 3. 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(Asunción) 2013;40:161-6. 164 ACTUALIZACION Manifestaciones gastrointestinales de niños con espectro autista Gastrointestinal manifestations of children with autism epectrum Dra.: Indhira Alparo Herrera* Introducción Descrita en 1943 como una psicosis infantil precoz por L. Kanner; el autismo es un cuadro de desorden del neurodesarrollo, específicamente en el área social que implica múltiples alteraciones en forma secundaria a otras áreas del desarrollo, ver cuadro # 1. Cuadro # 1. Trastornos del espectro autista ●Interacción social defectuosa ●Lenguaje y comunicación alterados ●Conductas estereotipadas ●Conductas repetitivas ●Conductas restrictivas ●Trastornos del sueño ●Patrones de conducta auto-agresiva e irritabilidad Se han descrito múltiples elementos implicados en la etiología de este trastorno; alteraciones metabólicas genéticas, inmunológicas, toxinas de alimentos, intoxicación por metales pesados (Hg, Pb), alergia alimentaria (caseína, gluten), agentes infecciosos, timerosal, respuesta inmune inadecuada a la triple viral, etc. Sin embargo los factores etiológicos verdaderos son aún desconocidos.1 Alteraciones gastrointestinales Las alteraciones funcionales del sistema gastrointestinal ampliamente descritas, son aún descono- cidas en cuanto a las consecuencias que podrían ocasionar, especialmente en la función cerebral. Se han descrito básicamente dos mecanismos de alteración gastrointestinal, responsables de todas las manifestaciones clínicas: inflamación crónica del tracto gastrointestinal y deterioro en la permeabilidad intestinal. Se han considerado como causas de inflamación crónica del tracto gastrointestinal múltiples sustancias, sin embargo ninguna es determinante de este tipo de alteración. Entre los implicados: antibióticos, anti-inflamatorios no esteroideos, pesticidas, toxinas, gluten, caseína, aditivos químicos, colorantes, preservantes, insuficiencia enzimática y mala absorción de proteínas.2 La integridad de la pared intestinal es importante en la adecuada absorción de nutrientes, bloqueo de toxinas, bacterias, alergenos y péptidos de alimentos que pueden ser dañinos; en el trastorno del espectro autista, el incremento de la permeabilidad intestinal permite que penetren en la circulación sistémica muchos de los elementos mencionados y estos producen las anormalidades en la conducta descritas en este tipo de trastorno. Esta alteración en la permeabilidad intestinal es la que permite la asociación entre enfermedad inflamatoria intestinal crónica y trastornos del espectro * Pediatra Gastroenteróloga. Hospital del Niño “Dr. Ovidio aliaga Uría”. La Paz Correspondencia: Dra. Indhira Alparo, correo electrónico: [email protected] Conflicto de intereses: ninguno que declarar. Articulo recibido el 8/8/13 y que fue aceptado para su publicación el 23/12/13. Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 165 - 7 165 autista. Eatan descritas lesiones del tipo hiperplasia nodular linfoide y colitis inespecífica en biopsias de íleon y finalmente se investiga si hay asociaciones entre los cambios histológicos y la etiopatogenia de los trastornos del espectro autista.3 Los síntomas digestivos que se han descrito con mayor frecuencia son: dolor abdominal, pirosis, diarrea, sialorrea, rumiación, vómitos, regurgitaciones, pérdida de peso, bruxismo, irritabilidad y constipación. Para caracterizar estas alteraciones en el trastorno del espectro autista existen diferentes estudios de laboratorio que deben tomarse en cuenta: Estudios básicos ●Hemograma, Plaquetas ●Hierro sérico ●Pruebas hepáticas, renales, pancreáticas y tiroideas ●Ig A, G, M, IgA secretória salival ●Ac anti caseomorfina y gluteomorfina ●Test IgE específica e IgG ●Ph y azúcares reductores en heces ●Sangre oculta en heces ●Leucocitos fecales, esteatocrito ●Coproparasitológico ●Coprocultivo y cultivo para levaduras ●Perfil celiaco ●Estudio para sobrecrecimiento bacteriano Estudios endoscópicos Endoscopia digestiva alta Colonoscopia ● Los individuos con TEA cuyas familias reporten síntomas gastrointestinales merecen evaluación gastrointestinal minuciosa. ● Todas las condiciones gastrointestinales comunes que se encuentren en individuos con desarrollo neurológico típico también están presentes en individuos con trastorno del espectro autista. Hiperplasia nodular linfoide ● Los encargados de la atención de pacientes autistas deben estar alertas a la presentación de señales atípicas de trastornos gastrointestinales comunes en pacientes con autismo. Presencia de H. pylori Gastritis eosinofílica Buscar trofozoítos de Giardia lamblia Atrofia total o parcial de vellosidades intestinales Colon e ileon: Colitis El consenso referente a las manifestaciones gastrointestinales en pacientes con trastorno del espectro autista (TEA); resalta lo siguiente: Hiperplasia nodular linfoide Esófago: ERGE, eosinofilia Duodeno: Duodenitis La dificultad central que impide poder reconocer y caracterizar la disfunción gastrointestinal en el trastorno del espectro autista radica en las dificultades de comunicación. Niños con trastornos del espectro autista padecen con más frecuencia diversas alteraciones gastrointestinales. No existe acuerdo para definir el carácter primario o secundario de estas alteraciones.6 ●Las anomalías de comunicación características de trastorno del espectro autista podrían ocasionar presentaciones inusuales en tracto gastrointestinal, incluyendo perturbaciones del sueño y problemas de comportamiento. Estudio histológico Estómago:Gastritis y/o por defectos enzimáticos; es la causa de la llamada enteropatía autista. Por lo que se fundamentan las dietas sin gluten y caseína en el trastorno del espectro autista.4,5 Estas sustancias mal metabolizadas producirían neuropéptidos (caseomorfina y gliadinmorfina) que pasarían al torrente sanguíneo y de aquí al cerebro provocando toxicidad. Los niveles urinarios de caseomorfina y gliadinmorfina estarían aumentados en estos casos. El supuesto exceso de opioides cerebrales provenientes de una alta absorción intestinal, por alteraciones en la permeabilidad de la mucosa ● Si una persona con trastorno del espectro autista estuviese bajo una dieta restringida, la supervisión profesional debe ayudar a identificar y contrarrestar insuficiencias alimentarias. MANIFESTACIONES GASTROINTESTINALES DE NIÑOS CON ESPECTRO AUTISTA / Alparo I. 166 ●La integración de metodologías conductuales y biomédicas podría ser ventajosa al conceptualizar el papel que desempeña el dolor como evento desencadenante de problemas de comportamiento. No existen pruebas de mecanismos patogénicos específicos a trastornos del espectro autista que justifiquen un método diagnóstico distinto, ni dietas restrictas sin comprobación de trastornos gastrointestinales que las justifiquen. ● Se deberán incluir ensayos genéticos como parte de los datos que se recopilen en protocolos de investigación. Referencias ● Los datos actuales no son suficientes para poder establecer un papel causal de inflamación intestinal, aumento de permeabilidad intestinal, irregularidades inmunológicas o alergias alimentarias en trastornos del espectro autista. Tratamiento e intervencion nutricional Fundamentada por la enteropatia autista, el manejo nutricional se basa en los siguientes: ●Dieta libre de gluten, caseína, colorantes y preservantes ● Tratamiento de las infecciones gastrointestinales ● Tratamiento de ERGE y otras entidades: esofagitis eosinofílica, gastritis por H. pylori, duodenitis inespecífica o eosinofílica. ● Manejo de la insuficiencia pancreática. ●Probióticos: Lactobacillus GG. ●L-glutamina Conclusiones Los individuos con trastornos del espectro autista y con síntomas gastrointestinales merecen la misma minuciosa evaluación que se les practicaría a individuos sin este trastorno. 1. Horvath K, Perman JA. Autistic disorder and gastrointestinal disease. 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MANIFESTACIONES GASTROINTESTINALES DE NIÑOS CON ESPECTRO AUTISTA / Alparo I. 167 ARTICULOS DEL CONO SUR - CHILE(1) Asistencia ventilatoria no invasiva domiciliaria en niños: impacto inicial de un programa nacional en Chile At-home non-invasive ventilatory assistance for children: initial impact of a national program in Chile Francisco Prado A.1, Pamela Salinas F.2 Resumen Introducción: La asistencia ventilatoria no invasiva domiciliaria (AVNI) es una modalidad de ventilación mecánica prolongada que puede ser proporcionada a niños con insufi ciencia ventilatoria crónica. Objetivo: Describir las características clínicas, resultados en su evolución y calidad de vida relacionada a salud (CVRS) en pacientes ingresados a un programa nacional de AVNI. Pacientes y Métodos: Se revisaron los registros de pacientes del programa durante 24 meses (2006–2008). Se utilizó un protocolo de seguimiento previamente defi nido. Resultados: 177 niños, edad promedio 9,7 ± 4,7 años. Catorce fallecieron por causas no relacionadas a la AVNI. Diagnósticos: enfermedad neuromuscular (ENM) 64%, mielomeningocele operado 6%, síndrome apnea obstructiva del sueño 6%, enfermedad del parénquima pulmonar 20% y miscelánea 4%. Respecto al año previo al ingreso las hospitalizaciones disminuyeron de 60 a 21% (p < 0,00001) y de 1,3 hospitalizaciones/ paciente/año a 0,3 (p < 0,00001). En 82 pacientes la CVRS mejoró, AUQUEI 17,2 ± 5,6 puntos (p < 0,05), IRS 26,4 ± 8,2 puntos (p < 0,05). En 21 pacientes con ENM y entrenamiento respiratorio hubo mejoría de la Pimax (27 cmH2O; p < 0,05) y no hubo disminución en la CVF. Conclusiones: AVNI disminuyó las hospitalizaciones y mejoró la CVRS de los pacientes ingresados al programa nacional. En un grupo de pacientes mejoró la fuerza muscular con estabilización de la función respiratoria. Palabras clave: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3) 168-78: Ventilación no invasiva, niños, atención domiciliaria, programa nacional. Abstract Introduction: Prolonged mechanical ventilation may be provided to children with chronic ventilatory failure as non-invasive ventilatory assistance at home (NIVA). Objective: To describe clinical characteristics, evolution outcomes and Health Related Quality of Life (HRQOL) of pediatric patients admitted into the Chilean NIVA program. Patients and Methods: Medical fi les of patients included in the program, were reviewed during a period of 24 months (2006-2008), using follow-up protocols. Results: There were a total of 177 children, with an average age of 9.7 ± 4.7 years. Fourteen patients died of nonrelated causes. Diagnoses were: neuromuscular disease (NMD) 64%, myelomeningocele 6%, obstructive sleep apnea syndrome 6%, lung disease 20% and miscellaneous 4%. Compared to the previous year, hospitalization decreased from 60 to 21% (p < 0.00001) and from 1.3 hospitalizations/patient/year to 0.3 (p < 0.00001). HRQOL improved signifi cantly, AUQUEI 17.2 ± 5.6 (p < 0.05), IRS 26.4 ± 8.2 points (p < 0.05) in 82 patients. In 21 patients with NMD an average increase of 27 cmH2O on muscular inspiratory pressure (p < 0.05) after respiratory training was observed. Conclusions: The NIVA program reduced hospitalizations and improved HRQOL. In a group of patients the muscle strength increased with stable respiratory function. Key words: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3) 168-78: Non invasive ventilation, Children, Home Care, National Program. 1. Médico Neumólogo Pediatra, Programa Asistencia Ventilatoria No Invasiva, Unidad de Salud Respiratoria, División de Atención Primaria en Salud, Ministerio de Salud de Chile 2006-2009. Departamento de Pediatría Campus Centro, Facultad de Medicina, Universidad de Chile. 2. Enfermera, Programa Asistencia Ventilatoria No Invasiva, Unidad de Salud Respiratoria, División de Atención Primaria en Salud, Ministerio de Salud de Chile 2006-2009. Correspondencia a: Dr. Francisco Prado A. E-mail: [email protected] (1) Artículo original de Chile, publicado en Revista Chilena de Pediatría 2011; 82: 289-99 y que fue seleccionado para su reproducción en la XVII Reunión de Editores de Revistas Pediátricas del Cono Sur. Chile 2012. Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 168 - 78 168 Introducción La asistencia ventilatoria no invasiva domiciliaria (AVNI) es una modalidad de ventilación mecánica efectiva en el manejo de pacientes con apneas obstructivas del sueño por alteración de la vía aérea superior, y pacientes con compromiso primario (enfermedades neuromusculares) o secundario de la bomba respiratoria (fibrosis quística, enfermedad pulmonar obstructiva crónica), tanto en exacerbaciones respiratorias agudas como en pacientes con insuficiencia respiratoria crónica. En estas dos últimas condiciones y escenarios clínicos, agudo y crónico, con hipoventilación e hipercapnia1-4. En el año 200616 se inició el Programa Nacional en la Atención Primaria en Salud para abordar en forma sistemática las necesidades de AVNI domiciliaria en niños y adolescentes con hipoventilación nocturna derivada de diversas patologías de la bomba respiratoria, vía área o parénquima pulmonar, integrando distintos niveles de atención en la red asistencial, considerando el hogar y la familia como eje central en la entrega de la AVNI. Su objetivo fue mejorar la expectativa y CVRS, junto con disminuir los gastos asociados a VMP, en pacientes cuyo único escenario posible era estar hospitalizados en unidades de paciente crítico. Cuando existe compromiso de la bomba respiratoria la AVNI mejora la ventilación alveolar y el intercambio gaseoso, estabiliza la declinación de la función pulmonar, mejora los trastornos respiratorios del sueño (TRS) y disminuye las exacerbaciones. Optimizando los costos sanitarios, la calidad de vida relacionada con salud (CVRS) y mejorando la sobrevida5-7. El objetivo de esta comunicación es describir las características clínicas, tipo de asistencia ventilatoria, junto con los resultados del seguimiento y evolución en un grupo de niños con VMP, incorporados al Programa Chileno de AVNI en domicilio en su etapa inicial. La heterogeneidad y complejidad de los diagnósticos y enfermedades de base han determinado que la experiencia pediátrica domiciliaria sea restringida. Sin embargo, diversas estrategias de ventilación mecánica prolongada (VMP) y necesidades tecnológicas complementarias como tos asistida, tienen un rol creciente1. Las publicaciones que han revisado su impacto en la historia natural de la enfermedad, especialmente en las enfermedades neuromusculares (ENM) y cifoescoliosis, recomiendan su inicio precoz al pesquisar hipoventilación nocturna, condición que se adelanta a los trastornos de función pulmonar y gases sanguíneos en vigilia2,5,8. La evaluación periódica, que incluye estudios de los TRS, hipoventilación nocturna, función pulmonar y fuerza de la musculatura respiratoria y no respiratoria, permite decidir el inicio precoz de la AVNI5,7,8,10-12. Sujetos y Método Estudio descriptivo de los registros electrónicos (fichas clínicas) de una serie de 177 pacientes incorporados a un programa nacional de AVNI en domicilio, beneficiarios del Fondo Nacional de Salud (FONASA), con acciones de intervención y seguimiento protocolizado por un período de 24 meses (agosto 2006-agosto 2008). Los criterios de selección, inclusión y exclusión al Programa AVNI en domicilio se presentan en la tabla 1, para la inclusión de pacientes no se considero como obligatoriedad exámenes que objetivaran la hipoventilación nocturna como polisomnografía o capnografía en aquellos pacientes que presentaban signos y síntomas sugerentes con deterioro clínico o funcional diurno evidente, y además por la baja disponibilidad de estos exámenes en los centros hospitalarios a nivel nacional por limitaciones de recursos. Todos los pacientes ingresados al programa recibieron prestaciones en sus domicilios por profesionales de la salud contratados en la aten- En Chile existe experiencia con un número reducido de pacientes13-15 y otros reportes en Latinoamérica son escasos9. ASISTENCIA VENTILATORIA NO INVASIVA DOMICILIARIA EN NIÑOS:... / Prado F. y Col. 169 Tabla 1. Criterios de Inclusión y Exclusión para el Programa AVNI Criterios de selección Inclusión Exclusión Condición clínica estable, sin cambios importantes de los parámetros de AVNI en las últimas tres semanas Pacientes con insuficiencia respiratoria crónica y síndromes de hipoventilación nocturna secundarios a patología que cumplan los siguientes criterios: - Enfermedad neuromuscular de progresión rápida - Parálisis cerebral • Saturometría nocturna continua anormal (SpO2 < 90% >10% del tiempo de sueño) • CVF < 50% valor predicho, Pimax < 40 cm H2O, PFT tos bajo 150 l/m • GSA: PaCO2 >50 mmHg, EB> 4 mEq/l Necesidad de soporte ventilatorio nocturno por tiempos de permanencia no mayor a 10 hrs Pacientes con enfermedad neuromuscular de progresión lenta o estacionaria - Falta total de tolerancia a interfase Hipercapnea sin acidosis respiratoria. Requerimiento de oxígeno < de 2 l/m para mantener SpO2 > 93% Pacientes con compromiso primario o secundario del comando ventilatorio y síndrome de apneas obstructivas del sueño (SAOS) con: Necesidad de soporte ventilatorio por más de 10 hrs o ausencia de autonomía respiratoria fuera de soporte de presión positiva - Trastorno de deglución con ausencia de protección glótica • SpO2 frecuente < 90% en registro continuo por al menos 8 h de observación • Índice de apneas/hipopneas > 5/ hr32, CO2 transcutáneo > 50 mmHg por más 50% tiempo registro nocturno2,33 IPAP/EPAP no superior a 20/8 cmH2O Menor de 6 meses (relativo) Situación socioeconómica con instalaciones y servicios básicos apropiados. Nivel de instrucción que permita cumplimiento de indicaciones No cumplir con los criterios de evaluación social referidos en los criterios de inclusión Cuidadores comprometidos con el seguimiento y los controles Imposibilidad de mantener controles de seguimiento al alta AVNI: Asistencia Ventilatoria No Invasiva, SpO2: Saturación de oxígeno, CVF: Capacidad vital forzada, Pimax: Presión inspiratoria máxima, PFT: Pico flujo tos, GSA: Gases sanguíneos arteriales, EB: Exceso de base. ción primaria de salud o por medio de servicios externalizados a través de licitación pública centralizada. Estos profesionales, kinesiólogo, enfermera y médico, actuaban como facilitadores del proceso de autocuidado, entregando educación continua en relación al manejo de la enfermedad, equipamientos, acciones frente a descompensaciones y actividades de promoción en salud, de acuerdo a los requerimientos del grupo familiar. Entre las áreas complementarias abordadas por el Programa AVNI, se creó un protocolo de entrena- miento de la musculatura respiratoria (EMR), un protocolo de evaluación de CVRS y un protocolo de contingencias en respuesta a las emergencias por perdida de la estabilidad clínica. Con objeto de conocer la complejidad de los pacientes beneficiarios del Programa AVNI y definir las demandas para su atención en domicilio se utilizó un instrumento para la categorización de usuarios por dependencia y riesgo de los cuidados (CUDYR), identificando su complejidad17. ASISTENCIA VENTILATORIA NO INVASIVA DOMICILIARIA EN NIÑOS:... / Prado F. y Col. 170 Protocolo de entrenamiento de la musculatura respiratoria (EMR) El protocolo de EMR utilizó como carga de trabajo el 30% de la presión inspiratoria máxima (Pimax) generada a través de válvulas de umbral regulable (Treshold® IMT, Philips Respironics), cuya resistencia es independiente del flujo, y permiten fi jar la carga de entrenamiento. El entrenamiento se desarrolló en intervalos incrementales de 3, 5, 10 y 15 minutos, con 2 minutos máximo de descanso interseries durante 5 días a la semana, progresando según tolerancia. Se realizó en niños mayores de seis años con habilidades neurocognitivas y condición clínica que permitían su colaboración con Pimax menor de 80 cm de H2O18. En 26 pacientes con ENM, al inicio del EMR, se evaluó la función pulmonar (espirometría) y se correlacionó con la Pimax utilizando r de Pearson. La Pimax se obtuvo según la técnica descrita por Black y Hyatt para el registro de las presiones máximas generadas en la boca19 y las espirometrías según las recomendaciones de la Sociedad Americana del Tórax (ATS)20. Los resultados obtenidos se expresaron como porcentaje del valor predicho utilizando los valores de referencia de Szeinberg21 y Knudson22, respectivamente. En aquellos pacientes que siguieron rutinariamente el EMR se midió Pimáx al inicio y luego cada 3 meses por un período de 18 meses y la capacidad vital forzada (CVF) al inicio y a los 12 meses de seguimiento. Los valores de Pimax se expresaron como valor absoluto en cmH2O. Protocolo de evaluación de la calidad de vida relacionada con salud Este protocolo, incluyó la utilización de distintos instrumentos genéricos y específicos: Autoquestionnaire Qualité de Vie-Enfant-ImagéAUQUEI, Cuestionario de Insufi ciencia Respiratoria Severa-IRS, Escala de Impacto Familiar-IFS, Cuestionario de Salud de Goldberg y Apgar fami- liar23, que permitieran conocer diversos dimensiones de la CVRS al ingreso del Programa, a los 6 meses y al año. En este reporte se presenta la evaluación de 82 pacientes de la Región Metropolitana en un año de seguimiento. Protocolo de plan de contingencias frente a emergencias La evaluación de los eventos que constituyen un quiebre del basal clínico de los enfermos se abordó con un Protocolo de Plan de Contingencias frente a emergencias, falla de equipos u otras situaciones que provocaron alarma en el niño y/o familia (fi gura 1). En estos casos los usuarios del Programa recurrieron a una línea telefónica (Salud Responde del Ministerio de Salud, 6003607777), que entrega información, orientación y asistencia telefónica las 24 horas del día, a través de un flujograma de acciones y respuestas categorizadas por un profesional de la salud según lo que el cuidador refi era, contrastándolas con la información obtenida en la fi cha electrónica. Esta línea telefónica, operada por profesionales de la salud, apoya el cuidado en el domicilio de los pacientes, permitiendo la resolución de las contingencias en el nivel de la red asistencial que sea más efi ciente, ya sea contactando a los profesionales a cargo del paciente o al servicio de atención médica de urgencia (SAMU), en caso de ser necesario la resolución inmediata. Se analizaron los registros electrónicos de 159 pacientes ingresados entre el año 2006 y 2007, describiendo el número de eventos, su nivel de complejidad y resolución, además se comparó el número de hospitalizaciones en el año previo al ingreso del Programa y las hospitalizaciones registradas durante un año de prestaciones. Análisis estadístico Se realizó un análisis descriptivo mediante distribuciones de frecuencias para las variables cualitativas y promedio ± desviación estándar para las variables cuantitativas. Se efectuaron pruebas de normalidad Kolmogorov-Smirnov o Shapiro-Wilks, para defi nir ASISTENCIA VENTILATORIA NO INVASIVA DOMICILIARIA EN NIÑOS:... / Prado F. y Col. 171 Figura 1. Protocolo de plan de contingencias frente a emergencias, falla de equipos u otras situaciones que provocan alarma en el niño y/o familia. SpO2: Saturación de oxígeno. MP: Murmullo pulmonar. SAMU: Servicio de atención médica de urgencia. BP: Broncopulmonar. BC: Broncopulmonar coordinador. SU: Servicio de urgencia. UCIP: Unidad de cuidados intensivos pediátrico. ROJO - Apnea - Dificultad respiratoria Intensa - SpO2 < 90% - Cianosis - Hipoventilación (disminución FR, MP) - Compromiso sensorial - Bradicardia AMARILLA VERDE - Taquipnea - Retracción aislada - Fiebre - Aumento secreciones - Tos débil - Fallo equipos - Morbilidad Pediátrica general Salud Responde 600-360-7777 asesoría a cuidadores y coordinación con red de Atención Primaria y Samu. (LLAMADA) SAMU (LLAMADA) Kinesiólogo Evaluación telefónica dentro de un plazo 1 hora SU / Hospitalización Intermedio - UCIP (LLAMADA) Enfermera Evaluación telefónica dentro de un plazo de 24 h Coordinación Enfermera para Consultas no programadas y/o Hospitalizaciones BP BP BC BC DEMANDA NO RESUELTA tipos de análisis paramétricos (T de Student) o no paramétricos (prueba de rangos con signos de Wilcoxon). Se consideraron significativos los valores de p < 0,05. Se utilizó el programa estadístico Statistical Package for the Social Sciences (SPSS) versión 15.0 (USA, 2006) para Windows®. Resultados Las características clínicas de los pacientes ingresados al Programa de AVNI, diferenciadas según diagnóstico, se describen en la tabla 2. La edad promedio de los pacientes fue de 9,7 ± 4,7 años (rango entre 5 meses y 20 años). ASISTENCIA VENTILATORIA NO INVASIVA DOMICILIARIA EN NIÑOS:... / Prado F. y Col. 172 Tabla 2. Caracterización de los beneficiarios del Programa AVNI, según diagnóstico Enf. neuromuscular Estado a la fecha del reporte Activo Recuperado Fallecido Edad Sexo Femenino Masculino Terapia ventilatoria Generador de flujo de presión binivelada Modalidad S IPAP (cmH2O) EPAP (cmH2O) Modalidad S/T IPAP (cmH2O) EPAP (cmH2O) Frecuencia respiratoria Generador de flujo de presión continua en la vía aérea CPAP (cmH2O) Interfase Nasal Nasobucal Complicaciones locales (úlceras por presión en sitios de apoyo) Otras prestaciones Oxígenoterapia Entrenamiento muscular específico Morbilidad Hospitalizaciones año previo a AVNI Hospitalización durante un año en AVNI SAOS MMC operado Miscelánea (n = 114) Enf. del parénquima pulmonar (n = 35) (n = 10) (n = 11) (n = 7) 101 (88,5%) 4 (3,5%) 9 (8%) 30 (85,7%) 3 (8,5%) 2 (5,8) 7 (70%) 2 (20%) 1 (10%) 10 (91%) 6 (85,7%) 1 (9%) 1 (14,3%) 9,5 ± 4,7 8,1 ± 5,3 8,3 ± 4 11,4 ± 4 5,1 ± 2,7 43 (37,7%) 71 (62,3%) 14 (40%) 21 (60%) 5 (50%) 5 (50%) 7 (63,6%) 4 (36,3%) 3 (42,8%) 4(57,2%) 27 (23,7%) 10 ± 3 5±2 87 (76,3%) 14 ± 3 7±2 14 ± 3 17 (48,5%) 11 ± 2 6±2 17 (48,5%) 12 ± 2 6±1 10 ± 4 4 (40%) 8±1 4±1 5 (45,5%) 10 ± 2 4±2 6 (54,5%) 11 ± 2 5±2 10 ± 1 3 (42,8%) 11 ± 1 5±1 4 (57,2%) 12 ± 2 5±1 12 ± 3 1 (2,9%) 6 6 (60%) 8±1 111 (97,3%) 3 (2,6%) 3 35 (100%) 0 1 9 (90%) 1 (10%) 0 11 (100%) 0 0 6 (85,7%) 1 (14,3%) 0 19 (16,6%) 31 (27,2%) 26 (74,3%) 14 (40%) 2 (20%) 1 (10%) 3 (27,3%) 6 (54,5%) 2 (28,5%) 2 (28,5%) 1,3 ± 1 0,3 ± 0,5* 1,7 ± 1,4 0,4 ± 0,3* 1,1 ± 1,1 0,2 ± 0,4* 1,6 ± 0,7 0,3 ± 0,5* 0,8 ± 0,8 0,3 ± 0,6 12 53,4 ± 9,5 73,9 ± 4,2** 54 ± 17,7 89,1 ± 6** 53 ± 8,6 61,4 ± 4,5 2 58,1 ± 7,6 72,7 ± 3,1 62 ± 24,6 85,3 ± 8,4 51,5 ± 3,9 59,8 ± 10 5 56,4 ± 5,4 71,2 ± 2,7 52,9 ± 25,4 82,7 ± 9,2 47,5 ± 6,6 61,2 ± 7,8 2 55,7 ± 4,7 74,5 ± 5 65,1 ± 10,3 84,8 ± 4,6 49,1 ± 7,2 62 ± 3,4 Parámetros funcionales Número de pacientes Pimax (cm H2O) inicio Programa Pimax (cm H2O) a los 12 meses % Predicho CVF inicio Programa % Predicho CVF a los 12 meses % Predicho VEF1 inicio Programa % Predicho VEF1 a los 12 meses 21 67 ± 22 94 ± 24** 61,1 ± 26,6 63,2 ± 31,8 59,7 ± 25,5 62 ± 31 Calidad de vida relacionada con salud Número de pacientes AUQUEI inicio AUQUEI a los 12 meses IRS inicio IRS a los 12 meses IFS inicio IFS a los 12 meses 61 50,3 ± 12,3 69,7 ± 7,8** 49 ± 21,1 87 ± 10,6** 43,2 ± 17 55 ± 12,3 SAOS: Síndrome de apneas obstructiva del sueño, MMC: Mielomeningocele, IPAP: Presión positiva inspiratoria en la vía aérea, EPAP: Presión positiva espiratoria en la vía aérea, CPAP: Presión positiva continua en la vía aérea, cmH2O: centímetros de agua, AVNI: Asistencia ventilatoria no invasiva, Pimax: Presión inspiratoria máxima, CVF: Capacidad vital forzada, VEF1: Volumen espiratorio forzado al primer segundo, AUQUEI: Cuestionario autoaplicado de calidad de vida para niños con imágenes, IRS: Cuestionario insuficiencia respiratoria severa; IFS: Escala de impacto familiar. Los valores de la tabla, pueden ser promedio ± DS ó Número (%). *p < 0,0001, **p< 0,05. Prueba T de Student para variables CVRS, Pimax y Prueba de rango con signos de Wilcoxon para variable hospitalizaciones. ASISTENCIA VENTILATORIA NO INVASIVA DOMICILIARIA EN NIÑOS:... / Prado F. y Col. 173 La distribución según rangos de edad fue: < de 6 años 28,5%; 6 a 13 años 37% y > 13 años 34,5%. Setenta y un pacientes fueron hombres (61,7%). Los diagnósticos fueron: ENM/cifoescoliosis en 114 pacientes (64%), enfermedad del parénquima pulmonar con insuficiencia respiratoria crónica hipercápnica (fibrosis quística, bronquiolitis obliterante post viral, displasia broncopulmonar y misceláneas) en 35 (20%), mielomeningocele operado en 11 (6%), apnea obstructiva del sueño en 10 (6%) y misceláneas en 7 (4%). Al fi nalizar los 24 meses de revisión, 154 de los 177 pacientes ingresados se encontraban activos. Nueve pacientes (5,1%) fueron dados de alta y catorce pacientes fallecieron (8%) por causas no asociadas al uso de AVNI (evolución natural de la enfermedad y un paciente por sepsis abdominal secundaria a desplazamiento intraperitoneal de una sonda de gastrostomía). La AVNI fue entregada con generador de flujo y presión bi-nivelada (BiPAP) en modalidad espontánea o espontáneo/programado con mascarilla nasal preferentemente. Cincuenta y dos pacientes (29,4%) con enfermedad del parénquima pulmonar requirieron además oxígenoterapia prolongada una vez iniciada la AVNI para mantener SpO2 mayor a 90%. Cincuenta y cuatro (31%) recibieron EMR. Figura 2. Aumento (%) de la presión inspiratoria como porcentaje del límite inferior en 18 meses de entrenamiento muscular respiratorio. Pimax: presión inspiratoria máxima; cmH2O: centímetros de agua. La CUDYR fue realizada en 82 beneficiarios de la Región Metropolitana. La categorización por dependencia demostró autosuficiencia parcial 53%, dependencia parcial 40%, dependencia total 7%. La categorización por riesgo demostró bajo riesgo 72%, mediano 26% y alto 2%. La complejidad de las atenciones relacionadas con actividades de autocuidado e intervenciones demandadas por su estado de salud determinó complejidad baja 79%, mediana 18% y alta 2%. Se analizaron las fichas de eventos de los pacientes ingresados durante el año 2006 y 2007 que en agosto de 2008 llevaran un año en el Programa, lo que corresponde a 159 usuarios, detectando 124 eventos. El 44% de los eventos fue de mediana complejidad (código amarillo del plan de contingencia), 32% de alta complejidad (código rojo) y 24% de menor complejidad (código verde). Del total de eventos reportados 57% recibieron tratamiento médico en domicilio, 36% requirieron hospitalización y el resto fue manejado telefónicamente por kinesiólogo, enfermera o a través de la línea telefónica de Salud Responde. La principal causa de alteración del basal clínico de los pacientes fue respiratoria, 73% del total de eventos. Sólo 2,4% correspondió a falla de equipos. Comparado con el histórico de los 12 meses previos al ingreso, hubo disminución de las hospitalizaciones durante el primer año de seguimiento, de 60% a 21% (p = 0,00001). También hubo una disminución en el promedio de hospitalizaciones por niño y año (1,2 veces a 0,3 veces, p = 0,00001). La figura 3 grafica la evaluación de CVRS obtenida en 82 niños de la Región Metropolitana y sus familias comparando el momento del ingreso al programa con la evaluación a los 12 meses de su inclusión. La percepción de bienestar en salud aumento significativamente con los 2 instrumentos de CVRS, uno general y el otro específico para insuficiencia respiratoria: AUQUEI 17,2 ± 5,6 puntos (56,3 ± 7 vs 73,5 ± 4,4, p < 0,05), IRS 26,4 ± 8,2 puntos (63 ± 10,1 vs 89,4 ± 7,5, p < 0,05). La escala IFS aumento ASISTENCIA VENTILATORIA NO INVASIVA DOMICILIARIA EN NIÑOS:... / Prado F. y Col. 174 Figura 3. Calidad de vida relacionada con salud al ingreso, 6 y 12 meses de prestaciones en el programa AVNI, según AUQUEI, IRS e IFS. AUQUEI: Cuestionario autoaplicado de calidad de vida para niños con imágenes (Autoquestionnaire Qualité de Vie-EnfantImagé). IRS: Cuestionario de insufi ciencia respiratoria severa. IFS: Escala de impacto familiar. Prueba comparación de medias de variables T de Student. Pimáx inicial fue 67 ± 22 cmH2O y a los dieciocho meses fue de 94 ± 24 cmH2O (p < 0,05). El delta promedio de Pimáx fue 27 cmH2O (figura 2). La CVF fue de 61,2 ± 26,6% al inicio y 63,2 ± 31,7% a los 12 meses (p < 0,1940). Discusión Pese a existir reportes de un programa similar en Sudamérica9, es el programa chileno de AVNI en domicilio, el primero en tener cobertura nacional y continuidad presupuestaria incorporando a beneficiarios del sistema público menores de 20 años16. Existe escasa experiencia que analice la eficacia de la AVNI domiciliaria en pediatría entregada a través de programas específicos. 5,1 ± 1,7 puntos (49,9 ± 2 vs 55 ± 1,3, p > 0,05), destacando que en la dimensión de dominio (capacidad de la familia para abstraerse de la enfermedad y planificar actividades de recreación) se presento un aumento significativo (4,56 ± 1,2 vs 7 ± 0,6, p < 0,05). En la evaluación del Apgar familiar se observó un aumento de familias funcionales (59,5% vs 66%, p > 0,05). El Cuestionario de Goldberg presentó una disminución de los signos de trastornos del ánimo y alteraciones en el estado de ansiedad (37% vs 32%, p > 0,05). La correlación entre Pimax y espirometría se obtuvo al ingreso al programa en 26 niños con ENM. La mediana de edad fue 14 años (rango 8 a 18 años). La Pimax promedio fue 60,7%. CVF 46,7%; VEF1 65,7% y VEF1/CVF 95,4%. Se estableció una correlación moderada entre Pimax con CVF (Rho = 0,53; p = 0,01) y Pimax con VEF1 (Rho = 0,49; p = 0,05). No se encontró correlación con VEF1/CVF. Se analizó el efecto del EMR en 21 niños con ENM que alcanzaron 18 meses de entrenamiento regular, la mediana de edad fue de 13 años (rango 8 a 16 años). Usuarios de BiPAP 14/21 (66%). En ellos la Esta corresponde a encuestas o pequeñas series clínicas en niños y adolescentes con ENM, enfermedad del parénquima pulmonar con insuficiencia respiratoria crónica hipercapnica (fibrosis quística) y enfermedad de la vía aérea1,2,4,5,7,8,10,24. Las indicaciones de AVNI que se utilizaron en este programa son similares a las descritas en la literatura internacional, manteniendo la heterogeneidad diagnóstica y los diferentes tipos de compromiso de la bomba respiratoria4,26. Es así, como los motivos para el inicio de la AVNI fueron similares a lo clásicamente reportado, insuficiencia respiratoria crónica hipercapnica, hipoventilación nocturna en pacientes con falla primaria de la bomba respiratoria, obstrucción de la vía aérea superior por malformaciones craneofaciales y apnea obstructiva del sueño. En nuestra serie la indicación siempre fue electiva y protocolizada incluyendo preferentemente elementos clínicos, alteración de los gases sanguíneos, desaturación en registros nocturnos extendidos y función pulmonar con restricción pulmonar severa o disminución de la fuerza muscular inspiratoria. La AVNI utilizada con equipos de presión control bi-nivelada, mascarillas generalmente nasales y ciclados en forma espontánea, es una modalidad de uso habitual reportada en pediatría independien- ASISTENCIA VENTILATORIA NO INVASIVA DOMICILIARIA EN NIÑOS:... / Prado F. y Col. 175 te del diagnóstico primario y que se relaciona con disminución de la carga del trabajo respiratorio, aumento de la ventilación minuto y aumento del intercambio gaseoso10,26,27. En nuestra serie, al igual que en otras publicaciones destinadas a evaluar la eficacia de la AVNI en exacerbaciones respiratorias, hubo hallazgos similares en la disminución de las hospitalizaciones6. Pese a que no hicimos una evaluación de costos, los costos directos mensuales de un paciente en su domicilio son, para el programa evaluado, al menos un tercio de los costos de una hospitalización prolongada. Aún cuando la mayoría de la morbilidad registrada fue de causa respiratoria y condicionó eventos de complejidad mediana o alta, los planes de contingencia permitieron su apropiada resolución en la red asistencial involucrando escalonadamente los escenarios del domicilio, atención primaria, sistemas de pre-emergencia, centros secundarios y terciarios. Comparado con el histórico la importante disminución de las hospitalizaciones, probablemente podría significar ahorro en los gastos en salud. Los hallazgos descritos para la CUDYR, justifica que las prestaciones de los profesionales en el domicilio se basen en la supervisión y educación de acciones de autocuidado, permitiendo optimizar los recursos, logrando satisfacer proporcionalmente las demandas individuales y grupales17. Es interesante que a diferencia de lo reportado en otras publicaciones y en pacientes con ENM, nuestra evaluación a 12 meses de seguimiento en la CVRS y la evaluación funcional de la fuerza de la musculatura inspiratoria mostraran mejoría28,29. Es posible que los logros obtenidos en la percepción de bienestar en salud se deba a una metodología general y específica que evalúa las distintas dimensiones de la CVRS que podrían estar afectando al paciente desde un punto de vista integral. En este sentido, su aplicación y análisis permite identificar claramente que dimensión (relacionada con los síntomas, funcional o psicosocial) es necesario abordar, logrando establecer una intervención holística e interdisciplinaria, con intervenciones planificadas23. La mejoría en la fuerza muscular obtenida en pacientes con ENM podría ser atribuida a un protocolo simultáneo de EMR. En el estudio de Mellies et al5 y en nuestra serie hubo similitud en la estabilización de la CVF en pacientes con ENM con deterioro lento y progresivo. Estos resultados han sido descritos previamente por Koessler et al29. Sin embargo, la repercusión de estos hallazgos, combinando AVNI y protocolos de entrenamientos específicos sobre los músculos respiratorios debe ser analizada en un mayor número de pacientes para tener conclusiones sólidas. En este reporte la mortalidad fue baja y no se relacionó con complicaciones atribuibles a la AVNI. Las causas de muerte y la proporción fueron similares a una serie de 20 pacientes con VMP domiciliaria publicada recientemente30. Es posible que la baja morbilidad y mortalidad observada se deba a los beneficios de la AVNI reportados en adolescentes y adultos con ENM y cifoescoliosis, categoría diagnostica mayoritaria de los pacientes incorporados al programa. En este grupo la AVNI prolonga la supervivencia en pacientes con hipercapnea6,7 y en aquellos con normocapnia en vigilia (pero con hipoventilación nocturna) mejora la SpO2 y la PaCO2 durante el sueño, en relación a pacientes con las mismas características pero que no recibieron AVNI. De hecho estos últimos debieron ser incorporados a AVNI dentro del primer año de seguimiento por deterioro clínico o funcional diurno evidente2. Es probable que para los pacientes con enfermedad del parénquima pulmonar e insufi ciencia respiratoria crónica hipercápnica, que en nuestro reporte fundamentalmente fueron niños con bronquiolitis obliterante post viral, la explicación sea similar, aún cuando los beneficios de la AVNI han sido reportados específicamente en pacientes con fibrosis quística, disminuyendo la declinación de la función pulmonar en etapas avanzadas de la enfermedad30, permitiendo ser un puente para el transplante pulmonar3,31 y aumentando la sobrevida post transplante24. ASISTENCIA VENTILATORIA NO INVASIVA DOMICILIARIA EN NIÑOS:... / Prado F. y Col. 176 Una limitación del presente estudio es el caracter retrospectivo, con heterogeneidad en los diagnósticos y en el tipo de compromiso de la bomba respiratoria y la ausencia de un grupo control, lo que limita las posibilidades de obtener conclusiones robustas de la efectividad de la AVNI domiciliaria y protocolos de EMR simultáneos. Por otra parte, existían datos incompletos de las fichas clínicas, por lo que no se obtuvo valores en la totalidad de los pacientes de la función pulmonar y presión inspiratoria máxima, lo que sumado a que un tercio de los pacientes son menores de 6 años, limitó las posibilidades de presentar estas características. En el caso de los pacientes con ENM con deterioro de sus habilidades neurocognitivas y/o otras condiciones clínicas, como compromiso de los músculos faciales, limitaron su colaboración para estos exámenes funcionales. La evaluación de la CVRS y CUDYR no esta referido al total de la población, ya que se consideró a pacientes con seguimiento en centros urbanos para homogenizar los grupos y evitar variabilidad de los evaluadores. La evaluación de ingreso y/o seguimiento objetivo de la hipoventilación nocturna con estudios de sueño y capnografía no estuvo presente en todos los pacientes debido al acceso limitado de estos en los centros hospitalarios del país y a que en un grupo de pacientes el deterioro clínico y funcional era evidente, asociado a que previo al inicio de las prestaciones del Programa no existían instancias formales que brindaran asistencia ventilatoria a estos pacientes, impidiendo hacer un reporte de estos datos en la serie reportada. en países en vías de desarrollo. En nuestra serie y con más de un año de seguimiento, esta estrategia permitió disminuir las hospitalizaciones, coordinar la red asistencial para la resolución de las exacerbaciones, mejorar la CVRS y posiblemente impactó en la mejoría observada en la fuerza muscular inspiratoria como en la ausencia de declinación en la función pulmonar en un grupo de pacientes con ENM. Agradecimientos A todos los profesionales y técnicos del Programa AVNI, Salud Responde y Servicio de Atención Médica de Urgencia por su labor incondicional con los pacientes en pos de lograr su mejor manejo y calidad de vida. Referencias 1.- Fauroux B, Boffa C, Desguerre I, Estournet B, Trang H: Long-term noninvasive mechanical ventilation for children at home: a national survey. Pediatr Pulmonol 2003; 35: 119-25. 2.- Ward S, Chatwin M, Heather S, Simonds A: Randomised controlled of non-invasive ventilation for nocturnal hypoventilation in neuromuscular and chest wall disease patients with daytime normocapnia. 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Estos hallazgos sugieren que un Programa de AVNI es factible de ser implementado en niños y adolescentes, con criterios estrictos de selección, manejo interdisciplinario y acciones otorgadas por la atención primaria de salud en el domicilio 7.- Young HK, Lowe A, Fitzgerald DA, Seton C, Waters KA, Kenny E, et al: Outcome of noninvasive venti- 6.- Donha-Schwake C, Podlewski P, Voit T, Mellies U: Non- Invasive ventilation reduces respiratory tract infections in children with neuromuscular disorders. Pediatric Pulmonologyc 2008; 43: 67-71. ASISTENCIA VENTILATORIA NO INVASIVA DOMICILIARIA EN NIÑOS:... / Prado F. y Col. 177 lation in children with neuromuscular disease. Neurology 2007; 68: 198-201. 8.- Benditt J: Initiating Noninvasive Management of Respiratory Insuffi ciency in Neuromuscular Disease. Pediatrics 2009; 123: S236-8. 9.- Resener TD, Martínez FE, Reiter K, Nicolai T: Home ventilation of pediatric patients - description of a program. 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ASISTENCIA VENTILATORIA NO INVASIVA DOMICILIARIA EN NIÑOS:... / Prado F. y Col. 178 ARTICULOS DEL CONO SUR - BRASIL(1) Acompanhamento sistematizado da hiperbilirrubinemia em recém-nascidos com 35 a 37 semanas de idade gestacional Systematic follow-up of hyperbilirubinemia in neonates with a gestational age of 35 to 37 weeks Elizabete Punaro1, Maria Aparecida Mezzacappa2, Fernando Perazzini Facchini2 Resumo Objetivos: Identificar os resultados do acompanhamento da bilirrubinemia na primeira semana de vida em uma coorte de recém-nascidos (RNs) de 350/7 a 376/7 semanas de idade gestacional e estabelecer fatores de risco para reinternação para fototerapia pós-alta hospitalar (bilirrubinemia total > 18 mg/dL). Métodos: Estudo de coorte retrospectivo em hospital público universitário. Os recém-nascidos tiveram acompanhamento da bilirrubina total plasmática ou transcutânea pré- e pós-alta da enfermaria de alojamento conjunto para avaliação da necessidade de fototerapia. Foi empregada uma abordagem sistematizada, utilizando-se os percentis de risco de uma curva de referência. Resultados: Foram estudados 392 RNs. Uma consulta ambulatorial foi necessária em 61,7% dos RNs. Tiveram valores máximos de bilirrubinemia total ≥ 20 mg/dL 34 RNs (8,7%), e três RNs (0,8%) apresentaram bilirrubinemia total entre 25-30 mg/dL. Fototerapia foi indicada após alta em 74 RNs (18,9%). Os fatores de risco foram a perda de peso do nascimento até o primeiro retorno e os percentis à alta acima do P40. A bilirrubinemia total à alta acima do P95 foi associada ao maior risco de reinternação [RR = 49,5 (6,6370,3)]. A perda de peso até o primeiro retorno foi o único preditor clínico independente [RR = 1,16 (1,04-1,17)]. Conclusão: A abordagem sistematizada da bilirrubinemia na 1ª semana foi efetiva na prevenção de hiperbilirrubinemias perigosas. O suporte à amamentação e a alta hospitalar após a estabilização da perda de peso podem ser medidas preventivas da reinternação por hiperbilirrubinemia. Key words: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 179-86: Hiperbilirrubinemia, icterícia, recém-nascido prematuro, recém-nascido. Abstract Objectives: To determine the outcomes of an intervention for follow-up of bilirubinemia in the first week of life in a cohort of newborn infants with gestational ages between 350/7 and 376/7 weeks and to determine risk factors for readmission for phototherapy (total bilirubin > 18 mg/dL). Methods: Retrospective cohort study carried out at a public teaching hospital. Neonates underwent periodic monitoring of total bilirubin levels (measured in plasma or by transcutaneous device) before and after discharge to assess the need for phototherapy. A systematic approach, based on risk percentiles of a bilirubin reference curve, was employed. Results: The study sample comprised 392 neonates. Only one outpatient visit was required in 61.7% of newborns. Peak total bilirubin was ≥ 20 mg/dL in 34 neonates (8.7%), and reached 25-30 mg/dL in three (0.8%). Phototherapy was indicated after discharge in 74 neonates (18.9%). Weight loss between birth and first follow-up visit and total bilirubin above the 40th percentile at discharge were risk factors for requiring phototherapy. Total bilirubin above the 95th percentile at discharge was associated with greater risk of readmission (RR = 49.5 [6.6-370.3]). Weight loss between discharge and first follow-up visit was the sole independent clinical predictor (RR = 1.16 [1.04-1.17]). Conclusion: Systematic follow-up during the first week of life was effective in preventing dangerous hyperbilirubinemia. Encouraging breastfeeding and discharging neonates only after weight loss has been stabilized may prevent readmission due to hyperbilirubinemia. Key words: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 179-86: Hyperbilirubinemia, jaundice, premature infant, newborn infant. 1. Graduanda, Medicina, Faculdade de Ciências Médicas, Universidade Estadual de Campinas (UNICAMP), Campinas, SP. 2. Doutor(a). Professor(a) assistente, Departamento de Pediatria, Faculdade de Ciências Médicas (FCM), UNICAMP, Campinas, SP. Setor de Neonatologia, Hospital da Mulher Prof. Dr. José Aristodemo Pinotti, Centro de Atenção Integral à Saúde da Mulher (CAISM), UNICAMP, Campinas, SP. Não foram declarados conflitos de interesse associados à publicação deste artigo. Apoio financeiro: Bolsa de iniciação científica PIBIC- CNPq. Como citar este artigo: Punaro E, Mezzacappa MA, Facchini FP. Systematic follow-up of hyperbilirubinemia in neonates with a gestational age of 35 to 37 weeks. (1) Artículo original de Brasil, publicado en Jornal Pediatria (Rio J.) 2011; 87: 301-6 y que fue seleccionado para su reproducción en la XVII Reunión de Editores de Revistas Pediátricas del Cono Sur. Chile 2013. Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 179 - 86 179 Introdução Os recém-nascidos (RNs) prematuros apresentam maior risco de reinternação por hiperbilirrubinemia durante a 1ª semana de vida, em comparação aos RNs a termo1,2. A hiperbilirrubinemia nessas crianças é mais prevalente e intensa, podendo acarretar consequências graves devido à neurotoxicidade que ocorre em menor tempo de vida em relação aos RNs a termo, indicando que a prematuridade é um significativo fator de risco para o kernicterus3. A melhor estratégia preventiva de hiperbilirrubinemias graves/perigosas em RNs com 35 a 38 semanas de idade gestacional inclui a triagem da bilirrubinemia em todos os RNs por ocasião da alta hospitalar, seguida do acompanhamento ambulatorial adequado4,5. No nosso meio, são poucas as informações sobre os resultados do acompanhamento ambulatorial sistematizado durante a 1ª semana de vida de RN com idade gestacional inferior a 38 semanas, bem como são escassos os estudos sobre os preditores clínicos para hiperbilirrubinemia exclusivamente nesse grupo de RNs. Fatores de risco para hiperbilirrubinemia têm sido estabelecidos para o conjunto dos RNs a termo e prematuros atendidos em enfermarias de alojamento conjunto6,7. Uma vez que essas informações são fundamentais para permitir a estruturação de ações de saúde direcionadas para a prevenção da hiperbilirrubinemia e do kernicterus8, consideramos relevante descrever os resultados de um programa de seguimento ambulatorial da hiperbilirrubinemia. ta por todos os RNs de 350/7 a 376/7 semanas gestacionais, nascidos entre dezembro de 2005 e julho de 2008, que, após a alta do alojamento conjunto, tiveram acompanhamento ambulatorial dos valores de bilirrubinemia total (BT) durante a 1ª semana de vida, até níveis estáveis/decrescentes ou indicação de fototerapia. Foram excluídos os RNs sem informação acerca da evolução da bilirrubinemia após a alta e aqueles que tiveram indicação de fototerapia antes da alta hospitalar do alojamento conjunto. A rotina de seguimento da icterícia neonatal no serviço constituiu-se de 2 fases. Durante a internação após o parto, os RNs com icterícia clínica foram avaliados pela estimativa transcutânea da bilirrubinemia (BTc) (BiliChek®, Georgia Respironics, Murrysville, USA). Se BTc ≥ 14 mg/dL, foi dosada a bilirrubinemia total plasmática (BTP) pela espectrofotometria direta, com bilirrubinômetro Unistat® (Leica, Reichert, Buffalo, USA). Essa última foi realizada no próprio serviço. Os RNs com icterícia precoce (< 24 horas de vida e BT > 8 mg/dL) foram investigados quanto à presença de doença hemolítica e tratados com fototerapia quando necessário. Aqueles com icterícia tardia foram acompanhados conforme a necessidade clínica, com avaliações da BT até a alta. Casuística e métodos Independente das avaliações anteriores, na manhã do dia de alta hospitalar, todos os RNs foram avaliados pelo BiliChek® e/ou bilirrubinômetro Unistat®, sendo o primeiro calibrado a cada dosagem e o segundo diariamente, de acordo com especificações do fabricante. Os valores da BT eram plotados em uma curva de referência9, sendo o acompanhamento após a alta proposto para todos os RNs segundo os percentis de risco, independente da idade na alta. RNs com BT acima do P95 retornavam em 24 horas ou permaneciam internados para novo controle em 24 horas. Os RNs com BT entre P75- P95 retornaram em 48 horas e aqueles cujos valores estavam abaixo do P75 retornaram com 48-72 horas de vida. Estudo de coorte retrospectivo desenvolvido em serviço público universitário. A casuística foi compos- Durante o acompanhamento ambulatorial, todos os RNs foram avaliados até o declínio/estabilização da O objetivo deste estudo foi conhecer os resultados de um programa sistematizado de acompanhamento da hiperbilirrubinemia em RNs de 35 a 37 semanas de idade gestacional e, ainda, determinar alguns fatores de risco para reinternação por hiperbilirrubinemia. ACOMPANHAMENTO SISTEMATIZADO DA HIPERBILIRRUBINEMIA EM RECÉM... / Punaro E. y Col. 180 BT, com retornos agendados entre 24 a 72 horas, conforme os níveis de bilirrubinemia e percentis de risco. Durante o seguimento, a BT foi avaliada de forma semelhante à internação. Todos os RNs que faltavam aos retornos ambulatoriais foram reconvocados para consulta por até 2 vezes. A variável dependente reinternação para fototerapia foi considerada quando houve reinternação por hiperbilirrubinemia após a alta do alojamento conjunto. O critério para reinternação foi a BTP ≥ 18 mg/dL, independente do tempo de vida. Todos os RNs reinternados foram tratados com fototerapias duplas, com 14 lâmpadas azuis especiais (Philips® TL52) com irradiância espectral média superior a 45 μW/cm2/nm, com controle periódico da irradiância. As informações sobre as variáveis independentes estudadas foram coletadas das fichas de acompanhamento ambulatorial. As variáveis estudadas foram a idade materna e paridade, gênero, idade gestacional10, presença de incompatibilidade ABO e tipo de aleitamento à alta (seio ou fórmula exclusivos e aleitamento misto) e a hora de vida à alta. A incompatibilidade ABO foi considerada quando a mãe era do grupo O e RN A ou B, independentemente do teste de Coombs. Foram estudados a bilirrubinemia (BTc ou BTP) à alta e no retorno, seus valores máximos na primeira semana de vida e os percentis correspondentes da curva de referência9. Perda de peso entre o nascimento e a alta e entre o nascimento e o primeiro retorno ambulatorial, perdas de seguimento e número de consultas foram também avaliados. Mann-Whitney, após identificar a distribuição assimétrica destas variáveis pelo teste de KolmogorovSmirnov. A seguir, foi feita análise de regressão de Cox univariada e múltipla, incluindo todas as variáveis no modelo. O critério Stepwise foi utilizado para a seleção das variáveis. Foi considerado como significativo o valor de p < 0,05. O programa computacional utilizado foi o Statistical Analysis System for Windows, versão 9.1.3 (SAS Institute Inc, 2002-2003, Cary, NC, USA). Resultados No período, 1.916 RNs foram acompanhadas para controle da bilirrubinemia durante a primeira semana de vida, em um ambulatório criado para essa finalidade específica. Não havia informação disponível sobre a idade gestacional para três RNs. Foram identificados 445 RNs (23,2%) com idade gestacional entre 350/7 e 376/7 semanas. Três RNs foram excluídos por informações incompletas sobre a evolução da bilirrubinemia e 50 RNs (11,3%) foram excluídos por terem evoluído para fototerapia ainda durante a internação após o parto. Assim, 392 RNs foram encaminhados para seguimento ambulatorial. Tinham BT à alta ≥ 15 mg/dL 44 RNs (11,2%). Dezoito RNs (4,6%) faltaram ao retorno programado, mas compareceram após reconvocação. Um retorno ambulatorial foi realizado em 242 RNs (61,7%), 61 RNs (15,6%) retornaram duas vezes e 89 RNs (22,7%) retornaram a três ou mais consultas. Análise estatística Durante a primeira semana de vida, 74 RNs (18,9%) foram reinternados para fototerapia. Os valores médios da BT máxima atingida e seu momento de ocorrência foram, respectivamente, 20,2±2,2 mg/dL e 125,1±49,5 horas (Tabela 1). Nos 392 RNs, a frequência de valores máximos de BT ≥ 12,9, ≥ 15 e ≥ 20 mg/dL foi nesta ordem: 59,7, 33,4 e 8,7%. Para comparação das variáveis categóricas segundo a presença de internação para fototerapia foi empregado o teste de qui-quadrado. Na análise bivariada das variáveis numéricas foi utilizado o teste de A distribuição da idade gestacional na população estudada foi: 209 RNs (53,3%) com 37 semanas; 114 RNs (29,1%) com 36 semanas; e 69 RNs (17,6%) com 35 semanas. A distribuição da reinternação para O estudo foi aprovado pelo Comitê de Ética em Pesquisa da instituição. ACOMPANHAMENTO SISTEMATIZADO DA HIPERBILIRRUBINEMIA EM RECÉM... / Punaro E. y Col. 181 a fototerapia segundo a idade gestacional não diferiu entre as 3 categorias (p = 0,172). Os seguintes percentuais de reinternação foram observados: 35 semanas, 26%; 36 semanas, 14,9%; e 37 semanas, 18,7%. A frequência de reinternação foi significativamente diferente entre os percentis de risco à alta (p = 0,001): acima do P95, 47,6%; no P75-95, 24,3%; no P40-75, 13,5%; e abaixo do P40, 3,3% (Tabela 1). Três RNs (0,8%) apresentaram BT entre 25 e 30 mg/ dL. Um deles obteve alta com 82 horas de vida, perda de peso de 8% à alta e BTc = 13 mg/dL (P40-75) e não recebeu orientação para retorno. Com 192 horas de vida, esse RN foi encaminhado pela rede básica de saúde para tratamento com fototerapia, apresentando BTP = 27,0 mg/dL. Os dois restantes tiveram alta com 48 e 58 horas de vida, com BTc de 13,5 (> P95) Tabela 1 - Variáveis estudadas segundo a presença de internação para fototerapia (n = 392) Internação para fototerapia Variáveis Idade materna (anos) Primiparidade (n) Peso nascimento (g) Idade gestacional (semanas) Sexo (%) Sim (n = 74) Não (n = 318) p 26 (22,0-31,0) 26 (21,0-31,0) 0,501* 40,0 137,0 0,110† 2.825,0 (2.600,0-3.100,0) 2.787,5 (2.490,0-3.135,0) 0,351* 37,0 (36,0-37,0) 37,0 (36,0-37,0) 0,506* 62,2:37,8 52,8:45,2 0,196† 8,1 17,9 0,034† ‡ Masculino:feminino Incompatibilidade ABO (%) Tipo da alimentação (%)‡ Seio materno Fórmula Misto Alta hospitalar (horas) BT alta (mg/dL) 0,136† 96,0 92,0 0 4,7 1,4 2,2 61 (54,0-70,0) 66 (56,0-77,0) 0,033* 13,3 (12,1-15,0) 11,8 (9,7-12,9) < 0,001* Percentil à alta (%)§ < 0,001† > P95 27,4 6,9 P75-95 45,9 33,4 P40-75 21,6 32,0 < P40 4,0 27,7 Perda de peso NA (%) 8,2 (6,5-9,7) 7,9 (6,2-9,3) 0,395* Perda de peso NR (%) 7,9 (5,1-10,3) 5,5 (2,8-7,9) < 0,001* BT máxima (mg/dL) 19,7 (18,5-21,4) 12,9 (11,4-14,2) < 0,001* Hora da BT máxima (horas) 113 (97,0-141,0) 101 (64,0-121,0) < 0,001* Valores apresentados em mediana (intervalo interquartil) ou valores absolutos. BT = bilirrubinemia total; NA = entre nascimento e alta; NR = entre nascimento e retorno. * Teste de Mann-Whitney. † Teste do qui-quadrado. ‡ Sem informações em seis casos. § Sem informação em um caso do grupo com fototerapia. ACOMPANHAMENTO SISTEMATIZADO DA HIPERBILIRRUBINEMIA EM RECÉM... / Punaro E. y Col. 182 e 12,6 mg/dL (P75-95), respectivamente, retornando dentro do tempo proposto (24 e 48 horas após a alta), com BTP de 27,4 e 26,3 mg/dL. Um desses foi deficiente da atividade enzimática da G6PD. Os três RNs foram tratados com fototerapia e não desenvolveram sinais de encefalopatia bilirrubínica aguda. Os casos que foram internados para fototerapia diferiram daqueles que não necessitaram de fototerapia nas variáveis incompatibilidade ABO, perda de peso entre o nascimento e o retorno, duração da internação logo após o parto, valor da BT à alta e BT máxima atingida, bem como no tempo de vida em que atingiram o maior valor da BT (Tabela 1). Pela regressão univariada, foram identificados como fatores de risco de reinternação para fototerapia as variáveis perda de peso do nascimento até o primeiro retorno e os percentis de risco da curva de referência, sendo a BT acima do percentil P95 associada ao maior RR (RR = 14,44; p < 0,001) (Tabela 2). Pela análise de regressão logística multivariada permaneceram no modelo os percentis de risco e a perda de peso até o retorno, com os seguintes riscos relativos (RR) (IC95%): > P95, RR = 49,5 (6,6370,3) (p < 0,001); P75- 95, RR = 26,65 (3,6-196,5) (p = 0,001); < P75, RR = 14,4 (1,9-108,6) (p = 0,01) (Tabela 2). Ao suprimir do modelo os percentis de Tabela 2 - Análise de regressão logística univariada e multivariada para reinternação para fototerapia (n = 392) Variáveis Idade materna (anos) Análise univariada RR (IC95%) p Análise multivariada RR (IC95%) 1,01 (0,97-1,04) 0,536 – Paridade 0 – 1,37 (0,79-2,39) 0,269 0,90 (0,45-1,78) 0,762 Presente 1,00 0,064 Ausente 2,2 (0,96-5,08) 1 1,00 ≥2 Incompatibilidade ABO – Sexo – Masculino 1,32 (0,83-2,11) Feminino 1,00 0,246 Idade gestacional (semanas) – 35 1,4 (0,80-2,44) 0,240 36 0,80 (0,45-1,41) 0,440 37 1,00 Alimentação Seio materno – 1,00 Fórmula 0,80 (0,76-1,01) 0,058 Misto 0,64 (0,09-4,60) 0,657 Peso ao nascimento (g) 1,00 (0,99-1,00) 0,524 – Perda de peso entre NA (%) 1,04 (0,96-1,13) 0,384 – Perda de peso entre NR (%) 1,11 (1,05-1,17) < 0,001 1,1 (1,0-1,2) > P95 14,44 (4,29-48,61) < 0,001 49,5 (6,6-370,3) P75-95 7,37 (2,26-23,98) < 0,001 26,6 (3,6-196,5) P40-75 4,11 (1,20-14,12) 0,025 14,4 (1,9-108,6) < P40 1,00 Percentis à alta 1,00 IC95% = intervalo de confiança de 95%; NA = nascimento e alta; NR = nascimento e retorno; RR = risco relativo. ACOMPANHAMENTO SISTEMATIZADO DA HIPERBILIRRUBINEMIA EM RECÉM... / Punaro E. y Col. 183 risco da curva de referência, identificou-se que, neste estudo, a perda de peso entre nascimento e retorno foi o único fator preditor independente, RR 1,16 (1,04-1,17), p < 0,001. Para cada 1% de perda de peso o RR aumenta 16%. Discussão Neste estudo, verificou-se que a reinternação para fototerapia, após alta hospitalar em média nas 66,5±19,4 horas de vida, ocorreu em 18,9% dos RNs com 350/7 e 376/7 semanas em amamentação exclusiva. Os preditores para a reinternação foram o nível de bilirrubinemia total à alta acima do P40 de uma curva de referência e a perda de peso entre nascimento e o primeiro retorno ambulatorial. Reconhecidamente, os RNs entre 35-37 semanas de idade gestacional têm maior risco de hiperbilirrubinemia que RNs com 38 semanas ou mais2,11-14. Existem poucas informações sobre o acompanhamento na primeira semana de vida e a necessidade de reinternação para fototerapia, de forma a permitir a estruturação do atendimento necessário para estes pacientes. Esses percentuais podem variar muito em função da definição de hiperbilirrubinemia e do critério utilizado para fototerapia, bem como pela presença de outros fatores de risco para níveis elevados de bilirrubina, como a amamentação exclusiva e características raciais da população. Até o momento, este é o primeiro estudo no Brasil que descreve os resultados de uma rotina de acompanhamento universal de hiperbilirrubinemia neonatal, de base hospitalar, de uma grande coorte de RNs com 35-37 semanas. Esse acompanhamento foi fundamentado não apenas nos percentis de risco à alta, mas também na idade gestacional, conforme as recomendações recentes15,16. Neste estudo, a frequência de hiperbilirrubinemia foi maior, para todos os níveis de BT, que a descrita para coortes de RNs prematuros e a termo11,14. Embora com valores de BT distintos dos usados neste estudo, a porcentagem de indicação de fototerapia durante a primeira semana de vida e a frequência de reinternação para fototerapia foram semelhantes a outros relatos2,17,18. A indicação de fototerapia mais difundida, no momento, é a proposta pela Academia Americana de Pediatria12 cujos níveis de BT não são baseados em evidências e são primariamente resultado da opinião de especialistas19. O serviço utiliza como indicação de fototerapia BT igual a 18 mg/dL que é cerca de 1 mg/dL acima do P95 para 96 horas de vida9. É importante destacar que essa indicação de fototerapia leva em consideração a disponibilidade de aparelhos de fototerapia de alta intensidade existente no serviço, que garante queda rápida e segura da bilirrubinemia19. Por outro lado, só 11,2% dos 392 RNs estudados tinham à alta hospitalar (média de 70 horas de vida) níveis de BT ≥ 15 mg/dL, que já indicariam fototerapia segundo a Academia Americana de Pediatria12. Reavaliar a bilirrubinemia em ambulatório ou postergar a alta desses RNs são as duas possibilidades que se apresentariam, independente do critério de indicação de fototerapia utilizado. Na descrição original da curva de referência de Bhutani et al.9, 2,2 e 0% dos RNs, respectivamente nos percentis P40-75 e < P40 à alta, migravam para o P95, podendo necessitar de tratamento. Novos modelos de predição, utilizando a associação daquela curva9 com a idade gestacional7,20 e com a perda de peso7, demonstraram melhor acurácia para identificação de hiperbilirrubinemia que o uso da curva isoladamente. Os resultados deste estudo estão de acordo com esses autores. Neste estudo, identificamos que 9,1% dos RNs cuja BT à alta se situou abaixo do P75 evoluíram para hiperbilirrubinemia, necessitando de reinternação, valor superior ao descrito por Keren et al.7 (4%) para a mesma idade gestacional. Provavelmente, este resultado se deve ao predomínio de amamentação exclusiva nesta amostra, enquanto no estudo de Keren et al. menos de 50% dos RNs eram amamentados exclusivamente7. A ama- ACOMPANHAMENTO SISTEMATIZADO HIPERBILIRRUBINEMIA EM Y RECÉM... / Punaro E. ¿Existen diferencias entre los DA asmáticos con peso normal LOS... / Torello P. yy Col. Col. 184 mentação exclusiva, sobretudo quando ineficiente, aumenta o risco de BT > 17 mg/dL em 10 vezes21. significativo para reinternação e, provavelmente, decorre de amamentação insuficiente25,26. Da mesma forma, neste estudo, 3,3% dos RNs no percentil de mais baixo risco (< P40) tiveram níveis de bilirrubinemia indicativos de fototerapia, o que vem a reforçar a necessidade de acompanhar a BT, após a alta, todos os RNs nesse intervalo de idade gestacional (IG), independente do percentil de risco, reforçando as recomendações mais recentes15,16. As limitações deste estudo são consequentes à análise retrospectiva das fichas de atendimento ambulatorial que não continham informações sobre variáveis, como história de icterícia/fototerapia no filho anterior, presença de céfalohematomas/equimoses, entre outras, que poderiam estar associadas ao desfecho estudado. A ocorrência de BT ≥ 25 mg/dL é evento raro, ocorrendo em 0,15% dos nascimentos11. Nesse grupo de RN de mais alto risco observamos que três RNs atingiram BTP entre 25-30 mg/dL após a alta, níveis preocupantes com relação à ocorrência de encefalopatia3. Possivelmente tal elevação da BT poderia ter sido prevenida com controles mais frequentes da bilirrubinemia (cada 4-24 horas). Essa é a conduta proposta recentemente por alguns especialistas para os RNs entre 35-37 semanas acima do P75 à alta15,16. Tal abordagem parece ser necessária para reduzir ao máximo os níveis de bilirrubinemia perigosos e, provavelmente, também o kernicterus, embora a relação custo-eficiência e o balanço entre benefícios e riscos sejam desconhecidos22. Os fatores de risco para fototerapia encontrados neste estudo foram também descritos por outros autores como importantes marcadores de hiperbirrubinemia para RNs a termo e prematuros7,14,23. Contudo, esperava-se que os RNs de 35 semanas apresentassem maior risco de reinternação, comparativamente aos de maior idade gestacional, como já sugerido anteriormente12,24. Pode-se supor que o número relativamente pequeno de RNs mais imaturos, nesta amostra, tenha impedido a expressão da menor idade gestacional como fator de risco. A alta mais precoce não foi identificada como fator associado à hiperbilirrubinemia, neste estudo, embora a alta entre 48-72 horas de vida possa aumentar em duas vezes a chance de reinternação, comparativamente a alta mais tardia1. A maior perda de peso entre o nascimento e o retorno foi identificada como fator de risco isolado mais Concluindo, o programa de prevenção de hiperbilirrubinemia avaliado neste estudo foi efetivo, resolvendo 77% dos casos (alta ambulatorial ou internação para fototerapia) com duas consultas. Entretanto, deve ser aprimorado com controles de BT mais frequentes para os percentis > P75, conforme as sugestões mais recentes15. Os fatores de risco para a reinternação para fototerapia foram a manutenção da perda de peso após a alta e a bilirrubinemia à alta acima do P40 de uma curva de referência, muito embora abaixo deste percentil, 3,3% dos RNs tenham atingido BT acima de 18 mg/dL. Esses resultados indicam que medidas como o suporte à amamentação e alta após estabilização da perda de peso podem ser medidas preventivas de hiperbilirrubinemias perigosas, sobretudo na indisponibilidade do acompanhamento ambulatorial desses RNs. Agradecimentos Agradecemos à Helymar da Costa Machado da Câmara de Pesquisa da FCM-UNICAMP pela análise estatística deste estudo. Referências 1. Maisels MJ, Kring E. Length of stay, jaundice, and hospital readmission. Pediatrics. 1998;101:995-8. 2. Sarici SÜ, Serdar MA, Korkmaz A, Erdem G, Oran O, Tekinalp G, et al. Incidence, course, and prediction of hyperbilirubinemia in near-term and term newborns. Pediatrics. 2004;113:775-80. 3. Bhutani VK, Johnson L. Kernicterus in late preterm infants cared for as term healthy infants. Semin Perinatol. 2006;30:89-97. ACOMPANHAMENTO SISTEMATIZADO DA HIPERBILIRRUBINEMIA EM RECÉM... / Punaro E. y Col. 185 4. Watchko JF. Hyperbilirrubinemia and bilirubin toxicity in the late preterm infant. Clin Perinatol. 2006;33:839-52. 16. Bhutani VK, Vilms RJ, Hamerman-Johnson L. Universal bilirubin screening for severe neonatal hyperbilirubinemia. J Perinatol. 2010;30 Suppl:S6-15. 6. Newman TB, Liljestrand P, Escobar GJ. Combining clinical risk factors with serum bilirubin levels to predict hyperbilirubinemia in newborns. Arch Pediatr Adolesc Med. 2005;159:113-9. 18. Melamed N, Klinger G, Tenenbaum-Gavish K, Herscovici T, Linder N, Hod M, et al. Short-term neonatal outcome in low-risk, spontaneous, singleton, late preterm deliveries. Obstet Gynecol. 2009;114:253-60. 5. Mah MP, Clark SL, Akhigbe E, Englebright J, Frye DK, Meyers JA, et al. 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Correspondência: Maria Aparecida Mezzacappa Rua Virgínio Barbutti, 105 – Cidade Universitária CEP 13083-640 – Campinas, SP Tel.: (19) 3287.4751, (19) 3521.9307 E-mail: [email protected], mezacapa@ fcm.unicamp.br ACOMPANHAMENTO SISTEMATIZADO DA HIPERBILIRRUBINEMIA EM RECÉM... / Punaro E. y Col. 186 ARTICULOS DEL CONO SUR - BRASIL(1) A musicoterapia pode aumentar os índices de aleitamento materno entre mães de recém-nascidos prematuros: um ensaio clínico randomizado controlado Music therapy may increase breastfeeding rates among mothers of premature newborns: a randomized controlled trial Martha N. S. Vianna1, Arnaldo P. Barbosa2, Albelino S. Carvalhaes3, Antonio J. L. A. Cunha2 Resumo Objetivo: Avaliar o impacto da musicoterapia nos índices de aleitamento materno entre mães de recémnascidos prematuros. Método: Neste ensaio clínico controlado, randomizado e aberto, mães de neonatos prematuros com peso ≤ 1.750 g foram submetidas a sessões de musicoterapia três vezes por semana durante 60 minutos. Os desfechos foram os índices de aleitamento materno na ocasião da alta hospitalar do bebê e em consultas de seguimento (715 dias, 30 e 60 dias após a alta). Resultados: Foram avaliadas 94 mães (48 no grupo da musicoterapia e 46 no grupo controle). O aleitamento materno foi significativamente mais frequente no grupo da musicoterapia na primeira consulta de seguimento [risco relativo (RR) = 1,26; intervalo de confiança de 95% (IC95%) = 1,01‑1,57; p = 0,03; número necessário para tratar (NNT) = 5,6]. Esse grupo também apresentou índices mais elevados de aleitamento materno na ocasião da alta do bebê (RR = 1,22; IC95% = 0,99-1,51; p = 0,06; NNT = 6,3), e 30 e 60 dias após a alta (RR = 1,21; IC95% = 0,73-5,66; p = 0,13 e RR = 1,28; IC95% = 0,95‑1,71; p = 0,09, respectivamente), mas esses resultados não foram estatisticamente significativos. Conclusões: Este estudo demonstrou que a musicoterapia teve efeito significativo no aumento do índice de aleitamento materno entre mães de recém-nascidos prematuros na primeira consulta de seguimento, e uma influência positiva (embora não significativa) que se estendeu até 60 dias depois da alta. A musicoterapia pode ser útil para elevar os índices de aleitamento materno entre mães de prematuros. Pabras clave: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 187-96: Aleitamento materno, musicoterapia, bem-estar materno, lactente, recém-nascido. 1. 2. 3. Abstract Objective: To evaluate the impact of music therapy on breastfeeding rates among mothers of premature newborns. Method: In this open randomized controlled trial, mothers of premature neonates weighting ≤ 1,750 g were submitted to music therapy sessions three times a week for 60 minutes. The endpoints were breastfeeding rates at the moment of infant hospital discharge and at follow-up visits (7-15 days, 30 and 60 days after discharge). Results: A total of 94 mothers (48 in the music therapy group and 46 in the comparison group) were studied. Breastfeeding was significantly more frequent in the music therapy group at the first followup visit [relative risk (RR) = 1.26; 95% confidence interval (95%CI) = 1.01‑1.57; p = 0.03; number needed to treat (NNT) = 5.6]. Moreover, this group showed higher breastfeeding rates at the moment of infant discharge (RR = 1.22; 95%CI = 0.99-1.51; p = 0.06; NNT = 6.3) and at days 30 and 60 after discharge (RR = 1.21; 95%CI = 0.73-5.6; p = 0.13 and RR = 1.28; 95%CI = 0.95-1.71; p = 0.09, respectively), but those results were not statistically significant. Conclusions: This study demonstrated that music therapy had a significant effect in increasing breastfeeding rates among mothers of premature newborns at the first follow-up visit, and also a positive influence (although not significant) that lasted up to 60 days after infant discharge. Music therapy may be useful for increasing breastfeeding rates among mothers of premature newborns. Key words: Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 187-96: Breastfeeding, music therapy, maternal welfare, infant, newborn. MT, MSc. Maternidade Escola, Universidade Federal do Rio de Janeiro (UFRJ), Rio de Janeiro, RJ. MD, PhD. Department of Pediatrics, School of Medicine at Instituto de Puericultura e Pediatria Martagão Gesteira, UFRJ, Rio de Janeiro, RJ. MT. Maternidade Escola, UFRJ, Rio de Janeiro, RJ. Não foram declarados conflitos de interesse associados à publicação deste artigo. (1) Artículo original de Brasil, publicado en Jornal Pediatría (Río J.) 2001; 87: 206-12 y que fue seleccionado para su reproducción en la XVII Reunión de Editores de Revistas Pediátricas del Cono Sur. Chile 2013. Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 187 - 96 187 Introdução A musicoterapia vem apresentando resultados positivos em várias áreas, tais como saúde mental, educação especial, reabilitação e desenvolvimento social. Alguns estudos têm demonstrado que a musicoterapia pode reduzir a ansiedade materna, ajudando as mães a lidar com a internação dos seus recém-nascidos na unidade de terapia intensiva neonatal (UTIN), e também influenciar no comportamento do bebê prematuro, proporcionando períodos mais longos de sono tranquilo, menos choro e aumento no ganho de peso1-4; mas nenhum dos estudos abordou a influência da musicoterapia nos índices de aleitamento materno. A promoção do aleitamento materno é uma estratégia conhecida, simples e eficiente para reduzir a morbidade e a mortalidade em crianças de todo o mundo5; portanto, qualquer intervenção que eleve os índices de aleitamento materno pode ser de interesse dos profissionais da saúde. Este estudo tem o objetivo de avaliar o impacto da musicoterapia, que foi aplicada a mães de recém-nascidos prematuros durante a hospitalização, nos índices de aleitamento materno na ocasião da alta hospitalar do bebê e em consultas de seguimento. A hipótese é que a musicoterapia pode elevar tais índices. Métodos Este é um ensaio clínico controlado, randomizado (ECR) e aberto com mães de recém-nascidos prematuros internadas na unidade de terapia intensiva neonatal (UTIN), na unidade intermediária e no alojamento mãe-canguru da Maternidade Escola da Universidade Federal do Rio de Janeiro. Os critérios de inclusão foram os seguintes: mães de bebês prematuros com peso ao nascer ≤ 1.750 g e que estavam clinicamente estáveis (menor risco de mortalidade), conforme definido pela equipe da UTIN, e mães que assinaram o consentimento informado. Os critérios de exclusão foram os seguintes: mães que eram HIV positivo, mães de neonatos com problemas clínicos que prejudicavam a sucção do seio (por exemplo, encefalopatia com hipotonia grave, anomalias oro-faciais e problemas cardíacos), ou mães com deficiências auditivas graves. Também foram excluídas mães que, por qualquer motivo, tiveram três sessões, ou menos, de musicoterapia, e aquelas cujos recém-nascidos faleceram durante a internação hospitalar. O tamanho da amostra foi calculado considerandose o índice esperado de aleitamento materno na ocasião da alta hospitalar do bebê e na primeira consulta de seguimento (entre 7 e 15 dias após a alta). Segundo dados do serviço de acompanhamento, esse índice era de aproximadamente 75%. Esperando uma diferença absoluta de 22% entre os grupos, um intervalo de confiança de 95% (erro alfa de 5%) e um poder de 80% (erro beta de 20%), deveriam ser recrutados 92 sujeitos (46 em cada braço do estudo). Estimando-se uma perda de 7,5% após a randomização, o número total de sujeitos considerado necessário para a realização do estudo foi de 100. O aleitamento materno foi definido, de acordo com a Organização Mundial de Saúde6, como uma das seguintes condições: aleitamento materno exclusivo, predominante e complementar, os quais, para os propósitos do estudo, foram definidos coletivamente como “aleitamento materno”. Bebês que não recebiam nenhum tipo de aleitamento materno foram classificados como “aleitamento artificial”. Os desfechos foram os índices de aleitamento materno na ocasião da alta hospitalar do bebê, na primeira consulta de seguimento (entre 7-15 dias após a alta), e 30 e 60 dias após a alta. As variáveis demográficas, socioeconômicas e obstétricas, tais como: idade, estado civil, ocupação, escolaridade, religião, número de outros filhos, gravidez planejada, pré-natal e renda foram estudadas em ambos os grupos. O grupo controle (GC) recebeu apenas o atendimento habitual durante a internação e as consultas de seguimento. A MUSICOTERAPIA PODE AUMENTAR OS ÍNDICES DE ALEITAMENTO MATERNO... / Vianna M. y Col. 188 A intervenção musicoterápica Randomização e coleta de dados As sessões de musicoterapia foram oferecidas sistematicamente a todas as mães do grupo intervenção, mas não eram obrigatórias. As sessões foram conduzidas por dois musicoterapeutas (MNSV e ASC), em um espaço apropriado, durante 60 minutos, utilizando-se os seguintes instrumentos: teclado, violão, caxixi, chocalho, conga, tumba, surdo, ganzá, triângulo, afoxé, egg-shake, metalofone, clava, guizo, pandeiro, pandeirola e tantã. As sessões eram divididas em quatro movimentos: Após o recrutamento, os sujeitos foram randomizados de modo 1:1 para o grupo intervenção [grupo da musicoterapia (GM)] e para o grupo de comparação (GC), utilizando-se uma tabela de números aleatórios7. Empregou-se a randomização em blocos de oito sujeitos (quatro para cada braço). – Primeiro movimento (5-10 minutos) – expressão verbal / recepção: a sessão iniciava com a equipe da musicoterapia recepcionando as mães. Era um momento no qual elas podiam conversar livremente sobre si mesmas ou seus bebês. – Segundo movimento (20-30 minutos) – expressão musical / continente sonoro: os instrumentos musicais ficavam disponíveis, e os terapeutas interagiam com as mães tocando e/ou cantando qualquer tipo de música que elas desejassem. – Terceiro movimento – canções de ninar e relaxamento (15-20 minutos): neste momento, os musicoterapeutas ofereciam, cantando e tocando, um conjunto de canções de ninar brasileiras previamente selecionadas. Além disso, também poderiam ser tocadas gravações de peças de música instrumental erudita, como Thäis-Meditation, de Massenet (5 minutos de duração); Lullaby, de Brahms (2 minutos de duração); e Air on the G String, de Bach (5 minutos de duração). Durante este movimento, as luzes eram apagadas, o que favorecia o relaxamento. – Quarto movimento – encerramento (5 minutos): neste momento, as luzes eram acesas, e conversava-se livremente sobre a sessão ou sobre os acontecimentos dos dias anteriores. As mães que estavam no alojamento mãe-canguru participavam das sessões de musicoterapia acompanhadas dos filhos. A sequência de números aleatórios era conhecida somente por um dos autores (APB). Foi utilizado um sistema de randomização centralizada. Assim que um sujeito considerado elegível assinava o consentimento informado, a equipe de musicoterapia entrava em contato com o autor responsável pela randomização, que fornecia o grupo de alocação do sujeito. Para avaliar o tipo de aleitamento na ocasião da alta hospitalar do bebê e nas consultas de seguimento, um profissional da saúde que não estava envolvido no estudo e que desconhecia os objetivos do estudo e a classificação dos grupos entrevistou as mães, com o propósito de preencher uma questão préformatada com quatro opções de resposta, anexada aos prontuários médicos, assinalando uma das duas possibilidades definidas como “aleitamento materno” ou “aleitamento artificial”. Análise estatística As variáveis dicotômicas foram comparadas por meio do teste qui-quadrado ou do teste exato de Fischer, se fosse o caso. Os dados paramétricos foram comparados utilizandose o teste t de Student, e os dados não paramétricos foram comparados empregando-se o teste U de MannWhitney. Na análise dos dados, quando faltavam informações sobre o aleitamento materno, era atribuído o pior resultado (aleitamento artificial). Foi considerado p = 0,05 para indicar significância estatística. Também foi utilizado o risco relativo (RR), com intervalo de confiança de 95% (IC95%), para avaliar o impacto da intervenção no resultado, e foi calculado o número necessário para tratar (NNT). A MUSICOTERAPIA PODE AUMENTAR OS ÍNDICES DE ALEITAMENTO MATERNO... / Vianna M. y Col. 189 Aspectos éticos O estudo foi aprovado pelo Comitê de Ética em Pesquisa do Instituto de Puericultura e Pediatria Martagão Gesteira da UFRJ, e está de acordo com a Declaração de Helsinque de 1975, revisada em 1983. O número de registro do ensaio no site www. clinicaltrials.gov é: NCT00930761. Resultados Entre março de 2004 e junho de 2007, foram selecionadas 190 mães consideradas elegíveis. Dessas, 89 foram excluídas: 26 porque os recémnascidos preencheram algum dos critérios de exclusão, 18 porque seus filhos faleceram antes de serem considerados clinicamente estáveis pela equipe médica, 11 porque não concordaram em participar, e 34 porque não puderam ser contatadas durante a internação do bebê, a maioria por ter recebido alta hospitalar precoce. Assim, foram randomizadas 101 mães, 51 para o GM e 50 para o GC. Após o início da coleta de dados, ocorreram sete perdas (três no GM por não terem atingido o número mínimo estabelecido de sessões; e quatro no GC, três porque os recém-nascidos faleceram durante o período do estudo, e um porque a mãe se recusou a continuar participando do estudo). Ao final, restaram 94 mães, 48 no GM e 46 no GC (Figura 1). Características dos sujeitos As características demográficas, socioeconômicas e obstétricas das mães participantes foram semelhantes nos dois grupos (Tabela 1). O peso ao nascer, a idade gestacional, o tempo total de internação, o número de dias na UTIN e o número de dias no alojamento mãe-canguru foram semelhantes em ambos Figura 1 - Fluxograma do estudo A MUSICOTERAPIA PODE AUMENTAR OS ÍNDICES DE ALEITAMENTO MATERNO... / Vianna M. y Col. 190 Tabela 1 - Características demográficas, socioeconômicas e obstétricas das mães participantes n (%) Variável Idade da mãe (anos) 12-20 21-30 31-40 > 40 Estado civil da mãe Solteira Casada União estável Ocupação da mãe Dona de casa Empregada doméstica Estudante Desempregada Outras Escolaridade da mãe Fundamental incompleto Fundamental completo Médio incompleto Médio completo Superior incompleto Superior completo Religião da mãe Católica Evangélica Outras Nenhuma Número de outros filhos 0 1 2 3 ou mais Gravidez planejada Sim Não Pré-natal Sim Não Renda familiar mensal* < 300 301-500 501-750 > 750 Grupo da musicoterapia (n = 48) Grupo controle (n = 46) 12 (25,0) 25 (52,0) 9 (18,8) 2 (4,2) 13 (28,3) 19 (41,3) 11 (23,9) 3 (6,5) 11 (22,9) 11 (22,9) 26 (54,2) 9 (19,6) 13 (28,3) 24 (52,2) 14 (29,2) 2 (4,2) 7 (14,6) 2 (4,2) 23 (47,9) 16 (34,8) 7 (15,2) 5 (10,9) 1 (2,2) 17 (37,0) 14 (29,2) 1 (2,1) 12 (25,0) 12 (25,0) 4 (8,3) 5 (10,4) 15 (32,6) 3 (6,5) 11 (23,9) 14 (30,4) 1 (2,2) 2 (4,4) 25 (52,1) 12 (25,0) 2 (4,2) 9 (18,8) 24 (52,2) 13 (28,3) 1 (2,2) 8 (17,4) 29 (60,4) 12 (25,0) 2 (4,2) 5 (10,4) 30 (65,2) 7 (15,2) 5 (10,9) 4 (8,7) 19 (39,6) 29 (60,4) 15 (32,6) 31 (67,4) 44 (91,7) 4 (8,3) 43 (93,5) 3 (6,5) 22 (45,8) 11 (22,9) 9 (18,8) 6 (12,5) 32 (69,6) 9 (19,6) 2 (4,4) 3 (6,5) Equivalente a dólares estadunidenses. A MUSICOTERAPIA PODE AUMENTAR OS ÍNDICES DE ALEITAMENTO MATERNO... / Vianna M. y Col. 191 os grupos. No GC, as mães permaneceram significativamente mais dias internadas, acompanhando seus bebês, do que no GM (Tabela 2). 5,6). Trinta dias após a alta hospitalar do bebê, duas mães não compareceram à consulta (ambas no GC). Atribuindo a elas o pior resultado (aleitamento artificial), 38 mães (79%) continuavam oferecendo algum tipo de aleitamento materno aos filhos no GM, e 30 (65%) no GC (RR = 1,21; IC95% = 0,73‑5,66; p = 0,13). Sessenta dias depois, apenas uma mãe do GC não compareceu à consulta, 36 mães (75%) ainda ofereciam algum tipo de aleitamento materno no GM e 27 (59%) no GC (RR = 1,28; IC95% = 0,95-1,71; p = 0,09), como detalhado na Tabela 3. No grupo de estudo, a proporção entre as sessões de musicoterapia frequentadas em relação às oferecidas (adesão) variou de 17,5 a 100% (mediana: 65%), com uma média de 9±5,8 (variação: 3- 25) e uma mediana de sete sessões por sujeito. O tempo médio entre o nascimento e o início das sessões (tempo necessário para os bebês atingirem a estabilidade clínica) foi de 11±7,3 dias (mediana: 9). Desfechos Discussão Na ocasião da alta hospitalar do bebê, 42 mães (88%) continuavam oferecendo algum tipo de aleitamento materno aos filhos (exclusivo, predominante ou complementar) no GM, e 33 (72%) no GC (RR = 1,22; IC95% = 0,99-1,51; p = 0,06; NNT = 6,3). No momento da primeira consulta de seguimento (entre 7 e 15 dias após a alta), cinco mães não compareceram à consulta (um no GM e quatro no GC). O estudo revelou um impacto positivo da musicoterapia nos índices de aleitamento materno entre mães de recém-nascidos prematuros, principalmente mais próximo à intervenção, demonstrando uma diferença estatisticamente significativa entre os grupos na primeira consulta de seguimento (p = 0,03), e uma tendência à significância na ocasião da alta hospitalar do bebê e nas consultas de seguimento dos dias 30 e 60 (p = 0,06; p = 0,13; p = 0,09, respectivamente). A escolha de estudar mães de recémnascidos prematuros hospitalizados foi baseada em dois motivos: a) o alto nível de estresse geralmente Considerando essas mães como apresentando o pior resultado (aleitamento artificial), 42 mães (88%) continuavam oferecendo algum tipo de aleitamento materno aos filhos no GM, e 32 (70%) no GC (RR = 1,26; IC95% = 1,01-1,57; p = 0,03; NNT = Tabela 2 - Características dos recém-nascidos em ambos os grupos Variável Grupo da musicoterapia Grupo controle p Peso ao nascer (g)* 1,284±321 1,258±295 0,69 Idade gestacional (semanas)* 30,04±2,59 30,24±2,82 0,72 Tempo total de internação (dias)† 48,0 (12-133) 43,5 (16-251) 0,44 Dias na UTIN 40,5 (4-133) 40,0 (5-251) 0,45 Mães no alojamento mãe-canguru‡ 26 24 0,85 Dias no alojamento mãe-canguru* 13,69±5,09 14,83±6,60 0,49 33 27 0,31 10 (2-86) 18 (0-58) 0,001 29,5 (0-127) 16,50 (0-247) 0,34 † Mães que receberam alta antes do bebê‡ Dias com ambos (mãe e bebê) no hospital † Dias após a alta da mãe† UTIN = unidade de terapia intensiva neonatal. * Resultados apresentados como média e desvio padrão. † Resultados apresentados como mediana e intervalo. ‡ Resultados apresentados como “n” (número de mães). A MUSICOTERAPIA PODE AUMENTAR OS ÍNDICES DE ALEITAMENTO MATERNO... / Vianna M. y Col. 192 Tabela 3 - Índices de aleitamento materno entre mães de recém-nascidos prematuros, nos grupos de estudo e controle, em diferentes momentos após o parto Variável GM* GC* RR (IC95%) p NNT Aleitamento materno 42 (88) 33 (72) 1,22 (0,99-1,51) 0,06 6,3 Aleitamento artificial 6 (12) 13 (28) Aleitamento materno 42 (88) 32 (70) 1,26 (1,01-1,57) 0,03 5,6 Aleitamento artificial 6 (12) 14 (30) Aleitamento materno 38 (79) 30 (65) 1,21 (0,73-5,66) 0,13 7,1 Aleitamento artificial 10 (21) 16 (35) 36 (75) 27 (59) 1,28 (0,95-1,71) 0,09 6,3 Na ocasião da alta hospitalar do bebê Na primeira consulta de seguimento Na consulta de seguimento 30 dias após a alta Na consulta de seguimento 60 dias após a alta Aleitamento materno Aleitamento artificial 12 (25) 19 (41) GC = grupo controle; GM = grupo da musicoterapia; IC95% = intervalo de confiança de 95%; NNT = número necessário para tratar; RR = risco relativo. Valores apresentados como n (%). encontrado entre essas mães, devido à prematuridade dos filhos e o estado crítico de saúde deles; b) o fato de que muitas mães permaneciam no hospital durante o período de internação dos filhos, algumas por um longo tempo, permitindo a aplicação da intervenção musicoterápica de maneira regular. O uso da música como uma ferramenta complementar na promoção da saúde tem sido recentemente relatada na literatura médica. Definida como o uso terapêutico da música ou de atividades musicais no tratamento de doenças somáticas e mentais, a musicoterapia tem acumulado evidências científicas de sua efetividade no manejo da dor, da ansiedade e do estresse emocional, entre outras condições1-4,8-11. Na obstetrícia, um estudo demonstrou que o feto responde a estímulos musicais e à voz humana, com o aumento da frequência cardíaca e movimentos, em níveis significativamente maiores do que responde a um estímulo sham12, e outros estudos concluíram que sessões de musicoterapia passiva (isto é, a audição de músicas selecionadas) influem favoravelmente na sensação de conforto, e também reduzem os níveis de estresse e ansiedade durante o trabalho de parto e nascimento13,14. Na neonatologia, alguns estudos revelaram que ouvir música pode reduzir o estresse de pais e recém-nascidos prematuros na UTIN15; pode reduzir a queda da saturação de oxigênio durante a aspiração do tubo endotraqueal e acelerar a recuperação dos índices de saturação após o procedimento16; além disso, pode melhorar os parâmetros fisiológicos dos recém-nascidos, reduzir a perda de peso e diminuir o tempo de internação na UTIN e no hospital17, e também aumentar a sucção não nutritiva em bebês prematuros18. Pelo que sabemos, este é o primeiro ECR a avaliar o impacto da musicoterapia nos índices de aleitamento materno entre mães de neonatos prematuros. Lai et al. estudaram a influência da audição de canções de ninar durante 60 minutos por dia, por três dias consecutivos, em mães e recém-nascidos prematuros com peso inferior a 1.500 g1. Os autores não encontraram diferenças nos parâmetros fisiológicos dos recém-nascidos, e, embora tenham detectado uma redução dos níveis de ansiedade das mães do grupo de estudo, a influência da musicoterapia no A MUSICOTERAPIA PODE AUMENTAR OS ÍNDICES DE ALEITAMENTO MATERNO... / Vianna M. y Col. 193 índice de aleitamento materno não foi estudada. Nöcker- Ribaupierre relatou que o uso da musicoterapia aplicada a mães de recém-nascidos prematuros foi capaz de reduzir o estresse e aumentar o índice de aleitamento materno, mas os autores não realizaram um ECR19. O presente estudo utilizou principalmente a musicoterapia ativa, permitindo que as mães participassem do ato de “fazer música”, que é a produção musical oriunda das motivações expressivas internas do próprio sujeito, em que este escolhe os instrumentos musicais, a maneira de tocá-los, e as canções, além de ter a possibilidade de fazer improvisações, em um encadeamento espontâneo. Arnon et al. demonstraram, em um ECR com recém-nascidos internados em uma UTIN, que a musicoterapia ao vivo apresentou resultados significativamente superiores aos observados em sujeitos que ouviam música gravada ou não ouviam música (GC), tanto em avaliações subjetivas (escala comportamental) quanto em parâmetros objetivos (por exemplo, frequência cardíaca, frequência respiratória e saturação de oxigênio)20. Neste estudo, os dois grupos eram semelhantes quanto às características obstétricas, sócio-demográficas e culturais das mães, e também quanto ao perfil dos recém-nascidos. A única diferença significativa foi o número total de dias que as mães permaneceram internadas enquanto os filhos estavam na UTIN; mas acreditamos que essa diferença favorece a intervenção, porque, embora as mães do GM tenham permanecido internadas por menos tempo, ainda assim apresentaram uma maior tendência a continuar com o aleitamento materno. A mediana do tempo de internação de 48 dias no MG possibilitou uma média de 9±5,8 sessões (variação: 3-25, mediana: 7). O objetivo era conseguir o maior número possível de sessões, a fim de aumentar a exposição à intervenção; mas, infelizmente, isso nem sempre foi possível. Alguns recém-nascidos de maior peso receberam alta hospitalar mais cedo, e algumas mães tiveram de deixar o hospital, embora seus recémnascidos permanecessem internados. De qualquer forma, obtivemos uma mediana de sete sessões, o que equivaleu a 3 semanas de tratamento. Esse número, comparado à maioria dos estudos publicados, pode ser considerado um sucesso. Como as sessões não eram obrigatórias, a adesão das mães às sessões não foi de 100%, mas, mesmo assim, mediana de adesão de 65% (variação: 17-100%) também foi considerada excelente. Krout, ao estudar os efeitos da musicoterapia no estado de relaxamento, no conforto físico e no controle da dor em pacientes terminais, concluiu que o método foi eficiente quando realizou-se um mínimo de três sessões21. O modelo utilizado para as sessões de musicoterapia era extremamente singular, se comparado ao de outros estudos na literatura. As sessões de 1 hora de duração, divididas em quatro partes, permitiam, na sua fase inicial, uma expressão verbal espontânea, em que cada mãe poderia expressar algumas das suas enormes angústias por causa da internação dos seus frágeis recém-nascidos na UTIN, preparando o terreno para que as emoções pudessem vir à tona, a fim de prosseguir para a fase da expressão musical. Esses momentos iniciais propiciavam uma atmosfera terapêutica para a redução do estresse e da ansiedade, com o esperado impacto positivo na decisão de amamentar. Além disso, mais importante do que ouvir música, o ato de “fazer música” é amplamente reconhecido como um dos principais mecanismos de efetividade da musicoterapia. No nosso estudo, era na segunda fase das sessões que as mães podiam tentar (algumas pela primeira vez) manipular os instrumentos musicais e experimentar a sua capacidade de participar do “fazer música” e dos seus efeitos benéficos tão especiais. No terceiro movimento, o uso de canções de ninar estimulava a ligação mãe-filho e a consolidação desses vínculos afetivos, o que aumentava a chance de sucesso na promoção do aleitamento materno. Na fase final, de integração, permitia a troca de experiências entre as mães participantes e a equipe. Esse modelo é único. Os estudos existentes são escassos, e, em muitos relatos, predomina a A MUSICOTERAPIA PODE AUMENTAR OS ÍNDICES DE ALEITAMENTO MATERNO... / Vianna M. y Col. 194 musicoterapia passiva, ou seja, há pouca interação com instrumentos musicais. Os resultados deste estudo sugerem que a musicoterapia pode ter um impacto positivo no índice de aleitamento materno na ocasião da alta hospitalar (p = 0,06) e na primeira consulta de seguimento (p = 0,03), levando em consideração todos os tipos de aleitamento materno. Incluímos todos eles na análise porque acreditamos que o efeito de qualquer tipo de aleitamento materno (não apenas o exclusivo) é importante para o bebê prematuro. Embora este tenha sido um estudo clínico aberto sem grupo placebo, o desenho do estudo utilizado é mais poderoso do que os utilizados em estudos prévios. Os NNT encontrados indicam que, para que uma mãe se beneficie do tratamento, durante o período de hospitalização, de cinco a sete precisaram participar das sessões. Esse pequeno número sugere uma boa relação custo-benefício, em especial porque as sessões de musicoterapia são necessariamente em grupo. Além disso, é razoável pensar que, se as sessões pudessem continuar após da alta do recém-nascido, os efeitos positivos poderiam estender-se por mais tempo. Ocorreram três exclusões no GM e quatro no GC após a randomização; mas, mesmo se fosse utilizada a análise da intenção para tratar, os resultados obtidos não seriam diferentes. Outra questão que poderia ser levantada é que as sessões incluíam tanto musicoterapia quanto interações verbais, mas o tempo destinado a essas interações foi somente os primeiros 5 ou 10 minutos e os últimos 5 minutos, deixando 45-50 minutos para a musicoterapia. A única maneira de superar esse viés seria a criação de um terceiro grupo que teria somente os primeiros 5 a 10 minutos de conversa com a equipe e não receberia nenhuma musicoterapia, mas isso exigiria mais 50 sujeitos, pelo menos, e um longo tempo para concluir o estudo, o que inviabilizaria a pesquisa. Apesar da questão mencionada acima, este estudo revela claramente os benefícios da musicoterapia, da maneira singular como foi ofereci- da, isto é, combinada com outra ferramenta para o alívio do estresse. No entanto, o estudo precisa ser repetido em outros ambientes, com amostras maiores, para confirmar os resultados que encontramos. Além disso, se nossos achados forem confirmados, a musicoterapia poderia ser uma estratégia adicional, relativamente simples e de baixo custo a ser implementada nas maternidades para elevar os índices de aleitamento materno entre mães de bebês prematuros e, consequentemente, dos seus benefícios associados. Os resultados do estudo sugerem que a musicoterapia pode ter um impacto positivo na manutenção do aleitamento materno em mães de neonatos prematuros hospitalizados. Um NNT relativamente baixo e as características da intervenção com grupos de mães sugerem que essa abordagem poderia ser útil para elevar os índices de aleitamento materno entre mães de recém-nascidos prematuros. Referências 1. Lai HL, Chen CJ, Peng TC, Chang FM, Hsieh ML, Huang HY, et al. Randomized controlled trial of music during kangaroo care on maternal state anxiety and preterm infants’ responses. Int J Nurs Stud. 2006;43:139-46. 2. Cevasco AM. The effects of mothers’ singing on fullterm and preterm infants and maternal emotional responses. J Music Ther. 2008;45:273-306. 3. Kemper KJ, Hamilton C. Live harp music reduces activity and increases weight gain in stable premature infants. J Altern Complement Med. 2008;14:1185-6. 4. Keith DR, Russell K, Weaver BS. 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En más del 90%, estos niños adquieren la infección por transmisión perinatal o materno-infantil; es decir que adquieren la infección durante el embarazo, parto o lactancia materna. Este incremento en los casos de infección por el VIH en pediatría se observa más en países en vías de desarrollo y sobre todo en aquellos países que no cumplen con las medidas de prevención materno-infantil, las cuales han demostrado una eficacia impresionante en la prevención de la infección por el VIH. Esto contrasta con aquellos países que han cumplido con estas medidas de prevención a nivel preparto, intraparto y postparto, reduciendo la transmisión perinatal a menos del 1%. Para que el médico pueda realizar una intervención preventiva de la transmisión materno-infantil, debe conocer (como requisito fundamental) el estado serológico del VIH de la mujer embarazada. Apenas se confirma su embarazo, se debe realizar esta prueba para iniciar una intervención oportuna, temprana, segura y efectiva. Inicialmente la responsabilidad de solicitar la prueba a toda mujer embarazada recae sobre el médico general y/o obstetra, quienes son los que habitualmente diagnostican el embarazo. Es en este sentido que se debe concientizar al personal de salud, que la prueba de VIH debe ser realizada en forma rutinaria en la mujer embarazada, así como se solicita prueba universal para sífilis. Posteriormente el rol del pediatra o médico general que atiende al recién nacido es de vital importancia, porque es el encargado de verificar que antes del nacimiento del niño, la madre tenga el resultado de la prueba de serología para el VIH. Este punto es crítico para que los pediatras no olviden averiguar estos datos maternos cuando la mujer embarazada ingresa al hospital con trabajo de parto. Se debe informar al personal de salud que el hecho de conocer el estado serológico de la embarazada no es para modificar su cuidado y/o su manejo habitual, sino que, al saber que la mujer embarazada es portadora del VIH, se deben realizar las intervenciones médicas necesarias para evitar de una manera muy clara y efectiva la infección del recién nacido. Incluso, en aquellos casos donde la mujer es diagnosticada de infección por el VIH en la sala de partos, el sólo hecho de realizar cesárea, contraindicar la lactancia materna y dar profilaxis al recién * Pediatra Infectólogo. Máster en Ciencias Médicas. Hospital del Niño. “Ovidio Aliaga Uría” La Paz-Bolivia. ** Pediatra-Perinatologo. Hospital del Niño. “Ovidio Aliaga Uría” La Paz-Bolivia. Correspondencia: Dr. Juan pablo Rodríguez, correo electrónico: [email protected] Conflicto de intereses: Ninguno que declarar. Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 197 - 201 197 nacido con zidovudina es suficiente para evitarle la transmisión del VIH. Por lo tanto, todo el personal de salud que atiende al binomio madre-hijo, debe seguir las siguientes recomendaciones: Recomendaciones para el manejo correcto del recién nacido hijo de madre con la infección por el VIH 1.Disponer de medicamentos antirretrovirales en el hospital y/o salas de parto (Zidovudina, Lamivudina, Nevirapina) antes de cualquier nacimiento. Prever anticipadamente dicho abastecimiento. 2. Conocer el estado serológico de VIH en la mujer embarazada, comprobar si se realizó la prueba en el primer y tercer trimestre (procurar en forma rutinaria y con la debida consejería, consentimiento informado y la discreción necesaria, la prueba serológica a toda mujer embarazada). Si tiene una muestra de VIH negativa en el primer trimestre es razonable e ideal realizarle la prueba nuevamente en el tercer trimestre. Si no se conoce su estado serológico debe realizarse la prueba rápida de VIH en el momento del ingreso de la paciente. Debe considerarse como una “urgencia” realizar esta prueba a la mujer embarazada, sobre todo si ya ha iniciado trabajo de parto. Si la prueba de VIH es negativa, debe seguirse el manejo obstétrico de rutina. 3.Si la mujer embarazada tiene una prueba de ELISA o una prueba rápida para el VIH positiva, se debe iniciar en ese momento el tratamiento antirretroviral en ella. Toda mujer que inicia terapia antirretroviral, como prevención para la transmisión materno-infantil o por su propia salud, debe continuar con la terapia antirretroviral durante toda su vida, y no discontinuar la misma después del embarazo, parto o puerperio. 4.Si la prueba de VIH es positiva en el momento del trabajo de parto, se debe iniciar profilaxis a la madre de manera inmediata con antirretrovirales (triple terapia oral: Zidovudina (AZT), Lamivudina (3TC) y Nevirapina (NVP)) y realizar cesárea. 5.Idealmente la cesárea debe ser programada antes que se inicie el trabajo de parto y antes que se produzca la rotura de las membranas ovulares. 6.Si la madre ya estaba recibiendo tratamiento antirretroviral durante el embarazo, debe continuar el mismo durante el periodo intraparto y el puerperio, sin realizar modificaciones al mismo. 7.El manejo del recién nacido hijo de madre con VIH es muy similar al de cualquier recién nacido. Recomendaciones necesarias incluyen: ● Cambio de campos quirúrgicos antes de realizar la histerotomía (para reducir la cantidad de secreciones con las que el recién nacido entrará en contacto) ● Ligadura del cordón umbilical inmediata después de la extracción del recién nacido (no hacer la maniobra de ordeño) ● Extraer al bebé con la bolsa de las aguas íntegras y realizar una limpieza extrema de las secreciones de los orificios inmediatamente al nacimiento teniendo cuidado de no lesionar las barreras mucosas y facilitar el ingreso del virus ● Finalmente se recomienda baño escrupuloso del niño. 8.No cambiar el manejo habitual y de rutina que se realiza con el recién nacido. 9.Evitar la lactancia materna para evitar la transmisión del VIH por este medio y ofrecer en estos casos fórmulas artificiales. 10.Una vez estabilizado el neonato, se debe iniciar, en las primeras 6 horas de vida la profilaxis con medicamentos antirretrovirales. Es fundamental el inicio precoz de estos medicamentos ya que si se los inicia pasadas las 48 horas de vida, el beneficio terapéutico, para prevenir la infección disminuye. Es tan importante el inicio temprano de la terapia antirretroviral, que incluso se habla recientemente de una “cura funcional” del VIH al no detectar posteriormente el virus en aquellos pacientes infectados que iniciaron en forma inmediata la profilaxis para el VIH. GUÍA PRÁCTICA PARA EL MANEJO DEL NIÑO EXPUESTO PERINATALMENTE / Rodríguez J.P. y Col. 198 11.Se debe indagar sobre determinados antecedentes relacionados con el riesgo de transmisión materno-infantil (ver más adelante) ya que será de ayuda en la elección de la profilaxis neonatal. El riesgo depende fundamentalmente de la carga viral materna en el momento del parto y de que la madre haya recibido tratamiento antirretroviral durante el embarazo. 12.Existen dos escenarios prácticos para el uso de medicamentos antirretrovirales en el recién nacido como profilaxis: a.Escenario 1. En los casos en los cuales la madre recibió antirretrovirales durante el embarazo y tiene una carga viral en el tercer trimestre menor a 1.000 copias/mL; incluso llega al momento del parto con carga viral indetectable (<50 copias/mL) y el nacimiento fue operación cesárea. El tratamiento de elección es la monoterapia con Zidovudina (AZT) a una dosis de 4mg/kg/dosis cada 12 h durante 4-6 semanas. b.Escenario 2. En los casos donde la madre no hizo tratamiento durante el embarazo ni realizó profilaxis durante el trabajo de parto o si el nacimiento fue vía vaginal, se aconseja triple terapia debido a que el riesgo de transmisión del VIH al recién nacido es mayor por una carga viral materna elevada. Los medicamentos de elección son: Zidovudina (AZT), Lamivudina (3TC) y Nevirapina (NVP). Se debe administrar Zidovudina (AZT) de la misma manera que en el escenario 1 (4mg/kg/dosis cada 12 h por 4 semanas), más Lamivudina (3TC) 2mg/kg/dosis cada 12 h durante 4 semanas y Nevirapina (NVP) 2mg/kg/día cada 24 h durante 7 días, y luego a 4mg/kg/día cada 24 h del 8vo al 14to día. Es decir, se debe dar triple terapia las primeras 2 semanas y suspender Nevirapina para continuar con Zidovudina (AZT) y Lamivudina (3TC) como doble terapia la 3ra y 4ta semana de vida. En los siguientes cuadros se resume lo explicado anteriormente. (Cuadros # 1 y # 2). 13. Una vez iniciada la profilaxis, para confirmar o descartar la infección en el recién nacido se debe solicitar “carga viral*” para el VIH. La carga viral detecta el RNA del virus en la sangre del paciente; es una prueba virológica de alta sensibilidad y especificidad. La carga viral se debe Cuadro # 1. Medicamentos antirretrovirales usados en la profilaxis del recién nacido expuesto perinatalmente al VIH Escenario 1 ● Zidovudina (AZT) 4mg/kg/dosis cada 12 horas por 4-6 semanas Escenario 2 ● Zidovudina (AZT) 4mg/kg/día cada 12 horas por 4 semanas ● Lamivudina (3TC) 2mg/kg/día cada 12 horas por 4 semanas ● Nevirapina (NVP) 2mg/kg/día cada 24 horas (1ª sem), luego 4mg/kg/día cada 24 horas (2ª sem) por 2 semanas. Cuadro # 2. Presentación de los medicamentos antirretrovirales usados en la profilaxis perinatal del VIH Medicamento Presentación Zidovudina (AZT) Frasco 50mg/5ml Lamivudina (3TC) Frasco 50mg/5ml Nevirapina (NVP) Frasco 50mg/5ml GUÍA PRÁCTICA PARA EL MANEJO DEL NIÑO EXPUESTO PERINATALMENTE / Rodríguez J.P. y Col. 199 solicitar al 1er mes y al 3er mes de vida del recién nacido. Si la 1ra carga viral es positiva se debe suspender la profilaxis e iniciar tratamiento antirretroviral. Independientemente del resultado de la primera carga viral, se debe repetir la misma al 3er mes para confirmar o descartar el diagnóstico de infección por el VIH. 14.Si la primera carga viral es positiva, aparte del tratamiento antirretroviral, se debe iniciar a partir de la 6ta semana de vida, profilaxis para Pneumocystis jiroveci con Cotrimoxazol***, a una dosis de 150/750mg/m2/día cada 12 horas 3 veces por semana en días consecutivos o alternos durante el primer año de vida. 15.En las madres infectadas con el VIH como en los recién nacidos expuestos al VIH, se deben investigar otras infecciones de transmisión sexual como hepatitis B, Sífilis, etc. 16. La atención del recién nacido infectado no requiere ningún tipo de aislamiento ni cuidados especiales por el personal de salud, sólo se recomienda adherirse y cumplir las “normas universales” para la prevención y control de infecciones. 17.No se recomienda la aplicación de BCG en los niños infectados por el VIH. El cuadro # 3 hace una síntesis práctica del manejo del niño expuesto al VIH. Cuadro # 3. Resumen del manejo del niño expuesto perinatalmente al VIH Evento Nacimiento 0-6h 1 semana 2-6 semana 6 semana 2 meses 3 meses 4-12 meses 12 meses ≥18 meses Intervención Examen físico detallado Inicio de Zidovudina (AZT) 4mg/kg/dosis cada 12h por 4-6 semanas o 15mg cada 12 h (>2500g)/10mg cada 12 h (<2500g). (Escenario 1) Inicio de Zidovudina (AZT) 4mg/kg/dosis cada 12h por 4 semanas + Lamivudina (3TC) 2mg/kg/dosis cada 12h por 4 semanas + Nevirapina 2mg/kg/día cada 24 h por 7 días, luego de 4mg/kg/día cada 24 horas del 8vo a 14to día. (Escenario 2) No dar leche materna (iniciar fórmula artificial) Inhibición de lactancia en madre (medicamentos/vendaje compresivo) No aplicar Vacuna BCG Continuar AZT Control pediátrico habitual Vigilar adherencia a AZT y posibles reacciones adversas Continuar con fórmula artificial Continuar AZT Solicitar 1ª carga viral (1mes) Laboratorios: Hemograma, Pruebas de función hepática. Resultado de 1ª carga viral negativa Resultado de 1ª carga viral positiva Suspender profilaxis con antirretrovirales Iniciar tratamiento antirretroviral (triple medicación) Aplicar vacuna BCG Iniciar Trimetroprim/sulfametoxazol (cotrimoxazol 150/750mg/m2/día)*** cada 12h 3 veces por semanas en días consecutivos o alternos. Solicitar recuento de linfocitos T CD4+* No aplicar vacuna BCG Vacunación habitual Vacunación habitual ** Solicitar 2ª carga viral Solicitar 2ª carga viral NEGATIVA: Se descarta el diagnóstico. POSITIVA: Se confirma el diagnóstico de infección por el VIH en el Controles pediátricos de rutina. lactante (continuar tratamiento antirretroviral). Solicitar apoyo por Vacunación habitual según calendario (PAI) Nutrición y por Psicología. Vacunación habitual según calendario (PAI), según el grado de inmunosupresión se valorará aplicar vacunas de virus vivos atenuados (SRP-Varicela). Control pediátrico de rutina Continuar tratamiento antirretroviral (triple terapia) Continuar profilaxis con Cotrimoxazol Solicitar Primer control de carga viral* y linfocitos T CD4+* a los 6 meses de iniciado el tratamiento antirretroviral Seguimiento pediátrico y por Infectología pediátrica Control pediátrico de rutina Valorar suspensión de Cotrimoxazol según estado de inmunosupresión Controles de carga viral* y linfocitos T CD4+* cada 6 meses Seguimiento pediátrico y por Infectología pediátrica Serología (Elisa) para el VIH Ídem que anterior * El análisis de carga viral y recuento de linfocitos T CD4+ se realiza en el Instituto Nacional de Laboratorios en Salud (INLASA). ** Idealmente se debería aplicar la vacuna polio inactivada. *** Cálculo de superficie corporal (m2): SC <10Kg SC= ((peso (kg) x 4) +9)/100 GUÍA PRÁCTICA PARA EL MANEJO DEL NIÑO EXPUESTO PERINATALMENTE / Rodríguez J.P. y Col. 200 Referencias 1. Havens P, Mofenson L. Evaluation and Management of the Infant Exposed to HIV-1 in the United States. Pediatrics 2009; 123;175. 2. Noguera J, De José M. Grupo de trabajo sobre infección por VIH en el niño de la Sociedad Española de Infectología Pediátrica (SEIP). Recomendaciones de la Sociedad Española de Infectología Pediátrica para el seguimiento del niño expuesto al virus de la inmunodeficiencia humana y a fármacos antirretrovirales durante el embarazo y el periodo neonatal. An Pediatr (Barc). 2012; 76(6):360.e1-360.e9. 3. Programa Nacional ITS/VIH/SIDA. Guía de tratamiento antirretroviral en adultos. Ministerio de Salud y deportes. Documento Técnico-Normativos. La Paz, Bolivia. 2013. 4. Rodriguez-Auad JP. Evaluación y manejo de la exposición perinatal al virus de la inmunodefi- ciencia humana (VIH). Rev Soc Bol Ped 2011; 50 (3): 216 – 9. 5. Shiau S, Kuhn L. Antiretroviral treatment in HIVinfected infants and young children: novel issues raised by the Mississippi baby. Expert Rev Anti Infect Ther. 2014 Mar;12(3):307-18. 6. Terrazas N. Infección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) y síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA) en niños. En: Mazzi E, Zamora A, Salazar V, Bocangel D, Sandoval O, Aranda E, eds. Principios de Diagnostico y Tratamiento en Pediatria. 4ta ed.La Paz. Bolivia. Print.p. 345-8. 7. World Health Organization. Antiretroviral drugs for treating pregnant women and preventing HIV infection in infants: recommendations for a public health approach. 2010. Disponible en: http://whqlibdoc. who.int/publications/2010/9789241599818.eng.pdf GUÍA PRÁCTICA PARA EL MANEJO DEL NIÑO EXPUESTO PERINATALMENTE / Rodríguez J.P. y Col. 201 EDUCACION CONTINUA EN PEDIATRIA CUESTIONARIO NUMERO 49 PREGUNTAS CORRESPONDIENTES AL TEMA: GUÍA PRÁCTICA PARA EL MANEJO DEL NIÑO EXPUESTO PERINATALMENTE AL VIH 1. Las medidas de prevención materno-infantil del VIH pueden reducir la transmisión del VIH al recién nacido en menos de: a.50% b. 30% c. 1% d. 10% 2.Mencione los medicamentos antirretrovirales que deben estar disponibles en todas las salas de parto a. Zidovudina b. Lamivudina c. Nevirapina d. todas las anteriores e. a + c 3.Son recomendaciones que se deben tomar cuando se produce el nacimiento de un niño cuya madre tiene la infección por el VIH, excepto: a. Cambio de campos quirúrgicos antes de realizar la histerotomía b. Ligadura del cordón umbilical inmediata después de la extracción del recién nacido. c. Extraer al bebé posterior a la ruptura de la bolsa de las aguas d. No lesionar las barreras mucosas e. Baño escrupuloso del niño 4. Cuál es la dosis y el tiempo de administración de la Zidovudina (AZT) para la profilaxis del VIH en el recién nacido? a. 4mg/kg/día cada 24horas por 4-6 semanas b. 2mg/kg/dosis cada 12 horas por 4-6 semanas c. 4mg/kg/dosis cada 12 horas por 4-6 semanas d. 2mg/kg/día cada 24 horas por 6 semanas e. 2mg/kg/dosis cada 6 horas por 48 horas Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 202 - 3 202 Respuestas Cuestionario # 49 Respuestas: 1.c 2.d 3.d 4.c Cuestionario Nº 49 203 INDICE DE AUTORES A Aguirre C María, Luisa............................... 117 Aldaa, Ernesto............................................. 100 Aliaga Valenzuela, Eduardo.......................... 15 Alparo Herrera, Indhira............................... 165 Álvarez Endara, Julio.................................. 155 Arellano, Carmen.......................................... 43 B Couto de Oliveira, Maria Inês..................... 110 Covasa, María del Carmen.......................... 100 Cunha, Antonio J. L. A................................ 187 D De Ávila, Reynaldo....................................... 19 Díaz Rossello, José Luis............................... 28 E Ensinck, Gabriela.......................................... 31 Bakir, Julia.................................................... 35 Ballón Cossío, David.................................... 87 Ballón, David.............................................. 159 Barbosa, Arnaldo P..................................... 187 Bersatti, Carlos Omar.................................. 162 Bidone, Nancy............................................... 35 Bobadilla, María Liz..................................... 43 Boccolini, Mello......................................... 110 Bruno, Miriam............................................... 35 Burrows A, Raquel...................................... 117 Buscaglione A, Roxana............................... 117 Esandid, María Eugenia.............................. 100 C H Candia, Claudia............................................. 43 Cané, Alejandro............................................. 35 Carrillo, Mercedes............................................. Carvalhaes, Albelino S................................ 187 Cervantes, Mederos Midiala......................... 13 Céspedes Lesczinsky, Miguel..................... 162 Cho, Malhi.................................................... 67 Choque Osco, Gustavo................................ 155 Colque Mollo, Rubén...................................... 1 Condori Aguilar, Amadeo............................. 27 Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 204 - 5 F Fabiani Hurtado, Nelly......................78-87-159 Falaschi, Andrea............................................ 35 Figueredo, Sonia........................................... 43 Flores Ortega, Elizabeth................................ 15 G Gamarra, María Liz....................................... 43 Gentile, Ángela............................................. 35 Hayes Dorado, Juan Pablo.......................... 138 Heat Bilbao la Vieja, Alexandra.................... 87 Hodgson B, María Isabel............................ 117 Holguín-Hernández, Esperanza.................. 143 I Imaña Suarez, Eduardo................................. 87 K Kaune Criales, Vivian................................. 125 204 L Lazaro de Carvalho, Márcia........................ 110 León Arze, Francisco.................................... 15 López Beltrán, Claudia............................... 162 Lución, Florencia.......................................... 35 M Marín B, Verónica....................................... 117 Mariscal Quenta, Gregorio............................ 63 Mazzi Gonzáles de Prada, Eduardo........43-82-99-136-155-197 Medinaa, María Sol..................................... 100 R Riveros Moron, Astrid....................87-159-197 Rodríguez Auad, Juan Pablo..................78-138 Rodríguez O, Lorena................................... 117 Rodriguez Vargas, Alfredo............................ 63 Rodríguez, Javier.......................................... 67 Rossato, Norma Elena................................... 90 Russ, Carlota................................................. 35 Ruvinsky, Silvina.......................................... 35 S Moreno, Rina................................................ 35 Salinas F, Pamela........................................ 168 Santa Cruz, Javier......................................... 67 Saucedo Barba, Claudia................................ 15 Silleroc, Josefina......................................... 100 Silvera, Fernando.......................................... 28 Sinavszki, Marianela..................................... 28 Siqueira Boccolini, Cristiano...................... 110 Sosa, Nadia................................................... 28 O T Mejía Salas, Héctor....................................... 22 Mezzacappa, Maria Aparecida.................... 179 Mira, José Joaquín........................................ 67 Montalvo, Claudia Gorena............................ 15 Montserrat, Dolors........................................ 67 Moraes, Patricia de...................................... 110 Orozco-Díaz, José G................................... 143 Ortega María, José........................................ 43 Thellaeche Cortez, Cynthia........................... 13 Torales, Juan................................................. 43 P U Pantoja Ludueña, Manuel........... 61-82-99-155 Paris de Baezac, Ana................................... 100 Parra Nigañez, Patricia.............................63-87 Perazzini Facchini, Fernando...................... 179 Pezuttib, Ornella......................................... 100 Pizarro Q., Tito............................................ 117 Prado A, Francisco...................................... 168 Punaro, Elizabete........................................ 179 Q Quimbert Montes, Rossy......................8-82-99 INDICE DE AUTORES Urizar Parada, Valeria................................... 15 V Vázquez, Cynthia.......................................... 43 Vejarano Vásquez, Vania............................. 162 Venturaa, Silvia........................................... 100 Vianna, Martha N. S.................................... 187 Villalba, Shirley............................................ 43 Z Zamora Linares, Carlos E............................... 3 Zamora, Adalid............................................. 63 205 INDICE TEMÁTICO ● Ácido fólico Ácido fólico y la prevención de los defectos del tubo neural..............................................................136 Administración de ácido fólico y otros micronutrientes en mujeres embarazadas de Colombia........143 ● Acidosis tubular Acidosis tubular renal distal, a propósito de un caso............................................................................15 ● Apéndice vermiforme Torsión del apéndice vermiforme..........................................................................................................27 ● Asistencia ventilatoria Asistencia ventilatoria no invasiva domiciliaria en niños: impacto inicial de un programa nacional en Chile.................................................................................................................................168 ● Aspiración de meconio Síndrome de aspiración de meconio tratado con ventilación de alta frecuencia...................................19 ● Autismo Manifestaciones gastrointestinales de niños con espectro autista.......................................................165 ● Casamassina Síndrome de Casamassima..................................................................................................................162 ● Coqueluche Coqueluche en Bolivia.............................................................................................................................1 Infección por Bordetella pertusis en pediatría: una enfermedad persistente o reemergente.................78 Coqueluche en niños..............................................................................................................................22 ● Cordón umbilical Clampeo tardío de cordón umbilical: saturación de oxígeno en recién nacidos...................................28 en recién nacidos de término: ensayo clínico controlado aleatorizado...............................................100 Higiene del cordón umbilical con alcohol comparado con secado natural y baño antes de su caída, Rev Soc Bol Ped 2013; 52 (3): 206 - 8 206 ● Dolor abdominal Dolor abdominal en niños......................................................................................................................50 ● Enfermedad hemolítica Caso inusual de enfermedad hemolítica neonatal...............................................................................155 ● Enfermedad metabólica ósea del prematuro Enfermedad metabólica ósea del prematuro: informe de un caso y revisión de la literatura................82 ● Eventos adversos Elementos clave en la implantación de sistemas de notificación de eventos adversos hospitalarios en América Latina............................................................................................................67 ● Exantemas Exantemas frecuentes en pediatría......................................................................................................125 ● Ginecomastia Ginecomastia puberal..........................................................................................................................138 ● Hepatoblastoma Hepatoblastoma: causa inusual de abdomen quirúrgico agudo...........................................................159 ● Hiperbilirrubinemia Acompanhamento sistematizado da hiperbilirrubinemia em recém-nascidos com 35 a 37 semanas de idade gestacional..............................................................................................................179 ● Homenaje Homenaje al Dr. Jorge Tejerina Peñaranda..........................................................................................134 ● Influenza Influenza Estudio de las enfermedades respiratorias por virus Influenza A H1N1 (pH1N1) en niños internados durante el año de la pandemia. Experiencia de 34 centros en la Argentina.........................35 ● Lactancia materna A musicoterapia pode aumentar os índices de aleitamento materno entre mães de recém-nascidos prematuros: um ensaio clínico randomizado controlado.....................................................................187 O papel do aleitamento materno na redução das hospitalizações por pneumonia em crianças brasileiras menores de 1 ano................................................................................................................110 INDICE TEMATICO 207 ● Malformaciones congénitas Prevalencia de malformaciones congénitas asociadas en una población de niños con fisuras del labio y del paladar en Manzanillo, Cuba................................................................................3 ● Metapnemovirus Detección de Metapneumovirus Humano en niños menores de 5 años hospitalizados en Paraguay............................................................................................................................................43 ● Muerte súbita Síndrome de muerte súbita del lactante. Conocer la realidad propia....................................................90 ● Neumonía Factores de riesgo para neumonía asociada al ventilador en el hospital del niño “Dr. Ovidio Aliaga Uría.........................................................................................................................63 ● Obesidad Programa MINSAL-FONASA para Tratamiento de la Obesidad Infanto-Juvenil..............................117 ● Oftalmia neonatorum Oftalmia neonatorum por Neisseria gonorrhoeae..................................................................................99 ● Otitis ¿Es correcta la conducta expectante en la otitis media aguda...............................................................61 ● Rabdomiosarcoma Rabdomiosarcoma intracardiaco: reporte de un caso............................................................................87 ● Referencia Análisis de la referencia de pacientes a un hospital de tercer nivel pediátrico.......................................8 ● Ventriculitis Ventriculitis neonatal, a propósito de un caso.......................................................................................13 ● VIH Guía práctica para el manejo del niño expuesto perinatalmente al VIH.............................................197 INDICE TEMATICO 208 APENDICE INFORMACION * REGLAMENTO DE INGRESO DE MIEMBROS TITULARES A LA SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA A.1 * INSTRUCTIVO PARA LA PUBLICACION DE ARTICULOS EN LA REVISTA DE LA SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA A.2 * INSTRUCCIONES A LOS AUTORES PARA LA ELABORACION DE RESUMENES ESTRUCTURADOS DE ARTICULOS ORIGINALES SOBRE INVESTIGACION MEDICA A.6 * CARTA PARA SOLICITUD DE PUBLICACION A.7 * REGLAMENTO DE RELATOS Y CORRELATOS A.8 * REGLAMENTO PARA LA PRESENTACION DE RESUMENES Y TRABAJOS LIBRES A.9 * DIRECCIONES DE LAS SOCIEDADES DE PEDIATRIA A.10 APENDICE 209 SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA REGLAMENTO DE INGRESO DE MIEMBROS TITULARES A LA SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA De acuerdo a lo establecido en los Estatutos y Reglamentos de la Sociedad Boliviana de Pediatría aprobados en el XV Congreso Nacional, realizado en la ciudad de Sucre en septiembre de 1991, para optar la condición de miembro titular se requiere. a) Presentar certificado de Especialista en Pediatría. b) Presentar un trabajo de ingreso relacionado con la especialidad, realizado en el país, calificado como válido de acuerdo a las condiciones reglamentadas por cada Sociedad Departamental y que se basará en las posibilidades de investigación del medio. Dicho trabajo deberá ser aceptado por el Comité Científico de la Directiva Nacional o la Departamental respectiva y aprobado por la Asamblea, ante la que será presentado para su discusión en un plazo no mayor de un año desde la fecha de su postulación. c) Acreditar un mínimo de asistencia del 50% en las actividades ordinarias de la Sociedad en calidad de adherente y cubrir la cuota de ingreso asignada por la Sociedad Departamental respectiva. d) El diploma que lo acredita como miembro titular, será entregado en la sesión ordinaria, donde presente el trabajo de ingreso respectivo. 210 A1 Instructivo para la publicación de artículos en la Revista de la Sociedad Boliviana de Pediatría 1.- Los trabajos considerados para su publicación deberán ser entregados en la secretaría de la Sociedad Boliviana de Pediatría o enviados al Director - Editor de la Revista, casilla de correo 1027, La Paz - Bolivia. Una vez recibidos, los artículos serán propiedad de la revista de la Sociedad Boliviana de Pediatría, por lo tanto es obligación de los autores conservar una copia completa del trabajo, incluyendo los cuadros y figuras ya que la revista no devolverá el material enviado. 2.- Todos los artículos enviados deberán ser originales e inéditos, no se aceptarán trabajos presentados o enviados a otras revistas científicas. Los trabajos serán sometidos a un proceso de arbitraje, donde se los evaluará desde el punto de vista metodológico. Las opiniones vertidas en los artículos, serán de absoluta responsabilidad de los autores y no expresarán la opinión de la Sociedad Boliviana de Pediatría. 3.- Los manuscritos enviados deberán ser acompañados de una carta de solicitud de publicación (pagina A7 de la revista), donde se indicará la siguiente información: a)Si hubo una publicación anterior o envío por duplicado del trabajo o cualquier parte de él a otras revistas o medios de divulgación. b)Se declara que el trabajo no ha sido sometido, antes o simultáneamente, a consideración de otras publicaciones. c) Si es el caso, se declara sobre las relaciones financieras o de otro orden que pudiesen causar conflictos de intereses. d)Se declara que el manuscrito ha sido leído y aprobado por todos los autores. e)Todos los autores deberán firmar la carta de solicitud. f) Se indica la dirección, teléfono, Fax, correo electrónico del autor principal para permitir una comunicación posterior. g)Si es el caso, se acompañará de los permisos necesarios para reproducción de material publicado previamente o empleo de ilustraciones sobre personas susceptibles de ser identificadas. 4.- El orden de publicación de los trabajos queda a criterio de la Revista de la Sociedad Boliviana de Pediatría y nos reservamos el derecho de su aceptación, así como de sugerir cambios, efectuar reducciones, modificaciones del texto o del material gráfico. 5.- Los trabajos enviados deberán ajustarse a las siguientes normas generales: a)El trabajo deberá ser escrito en computadora con procesador de palabras Word para Windows de Microsoft, letra “Times New Roman” tamaño 12, en hojas tamaño carta y dejando un margen de 2.5 cm. en todos los bordes. La extensión del texto no debe sobrepasar 10 páginas para los artículos originales, 5 en los casos clínicos, 3 en las cartas al editor y comunicaciones breves, excepto los artículos de actualización o de revisión que pueden llegar a 15 páginas de texto. Debe enviarse el trabajo original impreso en hoja tamaño carta, así como también los cuadros y figuras, si corresponden. Junto con ello, se debe enviar el trabajo en disquete 3.5” o disco compacto con una etiqueta auto adhesiva que indique el nombre del autor y título del manuscrito; todo ello tiene la finalidad de facilitar las correcciones y la diagramación en la imprenta. b)Los trabajos tienen características que permiten dividirlos en secciones tituladas según el tipo de manuscrito: -Artículo original: introducción, material y métodos, resultados y discusión. -Casos clínicos: introducción, caso clínico y discusión -Imágenes pediátricas inusuales: caso clínico y discusión. -El formato de otros tipos de artículos de gran interés para los lectores, como revisiones de temas, actualización, editoriales, comentarios, cartas al editor, informes técnicos, etc., puede ser diferente según la naturaleza de su contenido y será aprobado por el Comité Editorial de la revista de común acuerdo con el autor. 6.- Los trabajos deberán contar con los siguientes apartados: PAGINA INICIAL: a) Título El título del trabajo debe ser conciso pero informativo sobre el contenido central de la publicación y de ser posible, se debe realizar su traducción en inglés. b) Autores Debe indicarse la lista de autores según el orden que figurarán en la publicación. Los autores deben ser identificados con su nombre de pila, apellidos paterno y materno seguidos por un asterisco en la parte superior, con el que se señala en el pie de página el grado académico, cargo que ocupa y lugar de trabajo. Los autores que no tengan el titulo de médico cirujano se los debe señalar como interno o alumno de la carrera de medicina o indicar si corresponden a otras áreas de la salud. Por otro lado, se debe indicar el nombre y dirección del autor responsable de toda correspondencia relacionada con el trabajo y resaltar las fuentes de apoyo económico si existen. En la nómina de autores solo deben figurar las personas que hubiesen participado de manera suficiente en el trabajo y por lo tanto serán públicamente responsables de su contenido. 211 A2 SEGUNDA PAGINA c) Resumen y palabras clave Se debe contar con un resumen en español e inglés, de no más de 250 palabras, que describa los propósitos del estudio o investigación, material y método básico empleados, resultados principales y conclusiones más importantes (no emplee abreviaturas no estandarizadas y no use expresiones vagas). El resumen debe ser estructurado de acuerdo a las secciones que componen un artículo original, como se describe en la pagina A6 de la revista. en ambos. No repita datos en el texto, que el lector pueda conocer al analizar un cuadro o figura, excepto aquellos resultados más relevantes del trabajo, deben ser siempre descritos en el texto. No incluya en los resultados comentarios de los mismos, ya que esto corresponde a la sección de discusión. El relato a desarrollar en esta sección es solamente de tipo descriptivo. - Cuadros TEXTO: Presente cada cuadro en hoja aparte, mecanografiado en doble espacio. Numere los cuadros en orden consecutivo según el orden de aparición en el texto, seguido de un título breve en cada cuadro. Sobre cada columna coloque un encabezado corto o abreviado. Separe con líneas horizontales solamente los encabezados de las columnas y los títulos generales; en cambio, las columnas de datos deben separarse por espacios y no por líneas. Cuando se requieran notas aclaratorias o indicar el significado de las abreviaciones usadas, agréguelas al pie del cuadro y no en el cuerpo del mismo. Cite cada cuadro en orden consecutivo en el texto del trabajo. a) Introducción - Figuras Resuma la racionalidad del estudio y exprese en forma clara el propósito del artículo. Cuando sea pertinente en el estudio, explique la hipótesis cuya validez pretenda analizar, pero sin incluir datos o conclusiones del trabajo que se está presentando. No revise extensamente el tema y cite solamente las referencias bibliográficas que sean necesarias. Denomine figuras a cualquier tipo de ilustración que no corresponda a un cuadro, como ser gráficos, radiografías, electrocardiogramas, ecografías, etc. Las figuras pueden ser realizadas en una computadora y presentadas en un tamaño de 10 por 15 cm en formato electrónico como archivos JPG con una resolución de igual o mayor a 300 pixeles. El diseño debe ser simple y su sola observación debe permitir su comprensión, las figuras complejas no pueden interpretarse salvo lectura en el texto, por lo tanto deben evitarse. En el caso de que una figura sea realizada por un dibujante profesional, no envíe el original, remita 2 fotografías en blanco y negro, tamaño de 10 por 15 cm. Las letras, números y símbolos deben verse claros y nítidos en toda la superficie de la fotografía y tener un tamaño suficiente como para seguir siendo legibles cuando la figura se reduzca de tamaño en la publicación. Los títulos y leyendas no deben aparecer en la fotografía sino en una hoja aparte, para ser compuestos por la imprenta. En el respaldo de cada fotografía debe anotarse en una etiqueta pegada, el número de la figura, el nombre del autor principal y una flecha indicando su orientación espacial. Envíe las figuras protegidas en un sobre grueso de tamaño apropiado. Cite cada figura en el texto con un orden consecutivo según corresponda. Si una figura es reproducción de material ya publicado, indique su fuente de origen y obtenga permiso escrito del autor o editor para reproducirla en su trabajo. El resumen de los casos clínicos deberá indicar de manera sintetizada la introducción, el caso clínico y además, una colusión del trabajo. A continuación de cada resumen en español e inglés, se escriben las palabras clave del estudio, las que no deben exceder mas de cinco palabras y con su respectiva traducción en inglés, bajo el título de “key words”. b) Material y Métodos Describa claramente la selección de sujetos en observación. Identifique los métodos, instrumentos o aparatos y los procedimientos empleados, con la precisión necesaria para permitir a otros observadores que reproduzcan sus resultados. Si se trata de métodos establecidos y de uso frecuente, incluso métodos estadísticos, limítese a nombrarlos y cite las referencias respectivas. Si los métodos ya han sido publicados pero no son bien conocidos, proporcione las referencias y agregue una breve descripción. Cuando los métodos son nuevos se aplicaron modificaciones a métodos establecidos, descríbalos con precisión, justifique su empleo y enuncie sus limitaciones. Si se efectuaron experimentos en seres humanos, estos deberán contar con una autorización por un comité de ética de la institución donde se efectuó el estudio. Identifique todos los fármacos y compuestos químicos empleados con su nombre genérico, dosis y vías de administración. En caso de ser necesario identificar a los pacientes hágalo mediante números correlativos y no utilice sus iniciales ni los números de historias clínicas. Indique el número de sujetos, de observaciones, el o los métodos estadísticos empleados y el nivel de significación estadística establecido previamente para juzgar los resultados. c) Resultados Presente sus resultados con una secuencia lógica según el desarrollo del texto, cuadros y figuras. Los datos se pueden mostrar en cuadros o figuras, pero no simultáneamente d) Discusión Se trata de realizar una discusión de los resultados obtenidos en el trabajo y no de una revisión del tema. Discuta y destaque únicamente los aspectos nuevos e importantes que aporta su trabajo y las conclusiones de los datos que ya fueron presentados en la sección de resultados, ni incluya comentarios de datos que figuren en los mismos. Compare sus hallazgos con otras observaciones relevantes identificándolos mediante las citas bibliográficas respectivas. Relacione sus conclusiones con los propósitos del estudio que destacó en la introducción; evite proponer conclusiones que no están sólidamente respaldadas por sus hallazgos, así como apoyarse en otros trabajos que aún no están terminados. 212 A3 e) Referencias Las referencias bibliográficas deben ser numeradas consecutivamente por orden de aparición en el texto, incluyendo las que se mencionan en los cuadros y figuras. Límite las referencias a no más de 30. Es importante la revisión e inclusión de referencias nacionales sobre el tema que es presentado. Identifique las referencias en el texto mediante números arábigos, colocados como superíndice al final de la frase o párrafo en que se las alude. Los nombres de las revistas deben abreviarse según el estilo usado en el Index Médicus. Los resúmenes de presentaciones a congresos pueden ser citados como referencias únicamente cuando están publicados en revistas de circulación común. Los autores serán responsables de la exactitud de sus referencias, cite solo la bibliografía a la que ha accedido, no es ético citar referencias que aparecen en otros trabajos, no incluya como referencias “observaciones no publicadas” ni “comunicaciones personales”. Puede incluir entre referencias a trabajos que están oficialmente aceptados por una revista y en trámite de publicación; en este caso indique la referencia completa, agregando a continuación el nombre abreviado de la revista, entre paréntesis la expresión “en prensa”. Los trabajos que han sido enviados a publicación pero todavía no han sido oficialmente aceptados, no deben colocarse entre las referencias, sino que pueden ser citados en el texto, entre paréntesis, como “observaciones no publicadas”. Ejemplos: Artículo de revista: Apellido e iniciales del nombre, si son varios autores se los separa con una coma. Mencione todos los autores cuando sean seis o menos; si son siete o más mencione seis y agregue: “y col”, escriba el título completo del artículo, en su idioma original. Luego, el nombre de la revista en que apareció abreviado de acuerdo a la nomenclatura internacional (Index Medicus), año de publicación, volumen de la revista, página inicial y final del artículo. - Arteaga BR, Arteaga MR. Fascitis necrosante. Rev Soc Bol Ped 2003; 42:102-15. - Lang ME, Vaudry W, Robinson JL. Bliss D, Healey P, Waldhausen J, et al. Case report and literature review of late onset group B streptococcal disease manifesting as necrotizing fasciitis in preterm infant: is this a new syndrome? Clin Infect Dis 2003; 37:132-5. Artículo de revista con soporte electrónico: Autor/es de artículo. Título del artículo. Título abreviado de la publicación /publicación periódica en línea/ Año de la publicación /Fecha de consulta/; volumen (número): paginación o número de pantallas/. Disponible en: http:// www.... ... ... - Pérez C, Solís G, Martínez D, De la Iglesia P, Viejo de la Guerra G, Martinez M. Factores predictivos de enfermedad neumocócica invasora: estudio de casos y controles. An Esp Pediatr /publicación periódica en línea/ 2002 /Fecha de consulta 2003 abr 10/; 57(4): 7 pantallas. Disponible en: http://www.doyma.es Capítulo de libro: Autor/es del capítulo. Título del capítulo. En: Autor/es del libro. Editores. Título del libro. Edición (solo se cita a partir de la 2da, Ciudad de publicación, editorial, año de publicación y páginas que abarca el capítulo. - Mazzi E. Malformaciones frecuentes del tubo neural. En: Aranda E, Tamayo L, Sandoval O, Mazzi E, Bartos A, Peñaranda RM, Quiroga C, eds. Texto de la cátedra de Pediatría. 3a. ed. La Paz: Elite impresiones; 2003. p.370-2. - Brun J, Coritza E, Mazzi E. Malformaciones frecuentes del tubo neural. En: Mazzi E, Sandóval O, eds. Perinatología. 2da. ed. La Paz: Elite impresiones; 2002.p.643-52. Capítulo de un libro con soporte electrónico: Autor/es del capítulo. Título del capítulo. En: Autor/es del libro. Título del libro /monografía en línea/ Año de publicación /fecha de consulta/; número de pantallas. Disponible en: URL: http - Philips SL. Hypertension. En: Criley J, Crilet D. The physiological origin of the health /monografía en línea/ 1995 /fecha de consulta 2003 abr 10/ ; 3 pantallas. Disponible en: http://www.......... Libro: Autores. Título del libro. Edición (solo se cita a partir de la 2da. edición). Ciudad de publicación: Editorial; año - Mazzi E, Sandóval O, eds. Perinatología. 2da. ed. La Paz: Elite impresiones; 2002. Artículo de periódico: - Aranda E. Leucemia. El Diario 1997, 21 de julio. Sección A: 3 (col 2). Organización como autor: - Sociedad Boliviana de Pediatría. AIEPI. Rev Soc Bol Ped 2000;41:26-31. Artículo sin autor: Anónimo - Meningitis en La Paz [editorial]. S Afr Med J 1996; 45:789. Revista con suplemento en un volumen - Mazzi E, Pantoja M. Enterocolitis necrosante en el recién nacido a término. Rev Soc Bol Ped 1999; 32: supl 1:12-4. 213 A4 Artículo en prensa: 3. Actualización - Perez J, Alfaro N. Defectos del cierre del tubo neural: prevalencia y búsqueda de asociación con algunos factores de riesgo durante el primer trimestre del embarazo. Bol Med Hosp Infant Mex. En prensa 2004. Referencia de editorial: - Pantoja M. Suplemento de pediatría del Cono Sur [Editorial]. Rev Soc Bol Ped 1997; 36: 92. Referencia de carta al editor: - Mendoza A. Drogas y adolescencia. [Carta]. Rev Soc Bol Ped 2001;42:190. f) Agradecimientos Exprese su reconocimiento solo a personas e instituciones que hicieron contribuciones sustantivas al trabajo. Los autores son responsables por la mención de personas o instituciones a quienes los lectores podrían asignar responsabilidad o apoyo de los resultados del trabajo y sus conclusiones. Las contribuciones serán clasificadas de la siguiente forma: 1. Trabajo original Trabajo en el que se trata de encontrar una respuesta a una o varias interrogantes planteadas sobre una determinada patología. El esquema que deberá seguir es el siguiente: introducción, material y métodos, resultados y discusión. 2. Casos clínicos Descripción de uno o más casos clínicos que supongan una contribución importante al conocimiento de la enfermedad y una revisión del tema en cuestión. Cuenta con las siguientes secciones: introducción, caso clínico y discusión. Revisión de capítulos de interés especial, realizadas por profesionales expertos reconocidos en el tema o invitados por el comité editorial. 4. Imágenes pediátricas inusuales Presentación de uno o más casos clínicos, en forma resumida, que sea de presentación inusual e interesante y que se acompañe de material grafico ilustrativo sobre el caso. El formato a seguir es el siguiente: caso clínico y discusión. 4. Comunicaciones breves Todo trabajo que signifique un aporte original, con carácter preliminar o definitivo, que no sobrepase en extensión 4 hojas tamaño carta, incluyendo tablas y referencias. 6. Cartas al Editor Comentario o discusión de temas que se estime de interés general relacionados con la pediatría o de trabajos publicados en la revista. BIBLIOGRAFIA RECOMENDADA 1.- Comité internacional de directores de revistas médicas. Requisitos uniformes para los manuscritos enviados a revistas biomédicas. Rev Soc Bol Ped 1998;37:74-82. 2.- Velásquez – Jones ed. Redacción del escrito médico. 4ta. ed. México: Ediciones médicas del Hospital Infantil de México Federico Gómez; 1999. 3.- Mitru N, Aranda E, eds. ABC de la redacción y publicación médico científica. La Paz: Fondo Editorial del Instituto de Gastroenterología Boliviano – Japonés; 2001. Dr. Manuel Pantoja Ludueña Director - Editor Revista Sociedad Boliviana de Pediatría Hospital del Niño Dr. Ovidio Aliaga Uría Calle Mayor Zubieta # 100 La Paz - Bolivia Tel. (591-2) 2240081 - Cel. 72003200 email: [email protected] 214 A5 Instrucciones para la elaboración de resúmenes estructurados de artículos originales sobre investigación médica Un resumen estructurado no debe exceder las 250 palabras; esta norma fue tomada considerando la extensión máxima permitida por la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, para el registro en el MEDLINE. Debe evitarse el uso innecesario de verbos, presentar resultados secundarios y evitar hacer inferencias con resultados destacables. Los resúmenes, escritos en un máximo de 250 palabras, deben tener los siguientes encabezamientos: Título y autores, objetivo, contexto o lugar, pacientes o participantes, intervenciones (en el caso de ensayos clínicos), mediciones del desenlace principal, resultados principales y conclusiones. El título debe contener la menor cantidad posible de palabras, ser atractivo e informativo para el lector y en lo posible, clasificar el estudio. Es importante evitar el uso de palabras, tales como: “Estudio sobre...” ó “Investigación de...” lo mismo con abreviaciones o jerga indefinida que hace incomprensible al título. De preferencia escribirlo en una linea continua (puede ser diferenciado en negrilla y mayúsculas), luego el nombre del autor o autores (puede resaltarse al autor principal subrayando su nombre). Finalmente el nombre de la institución donde pertenece el autor o autores. Es necesario ser preciso en presentar el objetivo principal o la pregunta de investigación. En el caso de demostrarse una hipótesis a priori, ésta debe mencionarse. Si la extensión del resumen lo permite, puede incluirse la importancia del problema estudiado. Describir brevemente el diseño metodológico empleado en la investigación y el tiempo de seguimiento (en el caso que lo hubiere). Los principales diseños son los siguientes: • Ensayo clínico o diseño experimental, cuando implique una intervención del investigador. Pueden ser controlados, aleatorizados, a doble ciego, con placebo, cruzado, antes y después. • Estudios de pruebas diagnósticas, comparan pruebas buscando principalmente sensibilidad y especificidad, valores predictivos y likehood ratios. • Estudios de cohorte, implican el seguimiento a grupos de pacientes, generalmente expuestos y no expuestos a uno o varios factores, para posteriormente verificar un resultado o respuesta. Pueden ser prospectivos o retrospectivos. Son usados en estudios de pronóstico, causalidad y tratamiento. • Estudios de casos y controles, comparan un grupo de pacientes con un padecimiento o un resultado (casos) con otro grupo sin el padecimiento o resultado (controles). • Estudios transversales, tambien llamados de prevalencia; implican la medición de variables predictoras y resultados en un mismo tiempo. Generalmente son realizados empleando encuestas. • Estudios descriptivos, son muy frecuentes en la literatura médica y se refieren como “serie de casos” o “a propósito de un caso”. Describen varias características de un grupo de pacientes (edad, sexo, procedencia, grados de la enfermedad, época del año, etc.) con un mismo diagnóstico. Son mal utilizados para proponer causalidad. • Estudios de evaluación económica, actualmente muy en boga, pueden ser: análisis de costo-minimización, costo beneficio, costo-utilidad, costo-eficacia. En este acápite, mencionar el lugar donde fue realizado, en el caso de estudios hospitalarios o centros de salud, es importante explicar si fueron centros de primer, segundo o tercer nivel, privados o estatales. De esta forma se provee a los lectores la posibilidad de aplicar los resultados en sus contextos. Debe mencionarse el número de sujetos que participaron en el estudio (incluso los seleccionados y que luego rechazaron la participación), las pérdidas durante el seguimiento, en el caso de estudios de cohorte (ingresaron al estudio y por algún motivo lo abandonaron). También debe informarse las características del trastorno estudiado, criterios de inclusión y exclusión empleados. El tipo de muestreo utilizado debe ser informado, para dar una idea de la validez a los revisores y lectores. En el caso de ensayos clínicos debe describirse exactamente la maniobra de intervención. En el caso de medicamentos usar sus nombres genéricos. Debe describirse cómo se midió el o los resultados principales y los instrumentos o escalas de medición empleados. Deben describirse los resultados principales del estudio, incluyendo valores para hallazgos positivos y pruebas estadísticas para hallazgos negativos. Deben ser presentados en valores absolutos y relativos. Siempre que sea posible se deben incluir los intervalos de confianza del 95% y el nivel exacto de significación estadística. Describir, de manera breve, las conclusiones que estén apoyadas por los resultados presentados, mencionando la aplicabilidad clínica (evitando la “teorización”), limitaciones y extrapolaciones del trabajo. Referencia: Mejía H. Cómo escribir resúmenes para congreso o revistas médicas. Rev Soc Bol Ped 1999; 38:25-7 215 A6 CARTA PARA SOLICITUD DE PUBLICACION Srs. COMITE EDITORIAL DE LA REVISTA DE LA SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA Cumpliendo con los requisitos exigidos para la publicación, envío a Uds. el artículo titulado: .......................... ............................................................................................................................................................................... .............................................................................................................................................................................. para que se considere su publicación, señalando lo siguiente: 1. Es un artículo original, con temas de investigación clínica o experimental, salud pública, medicina social o bioética; revisión de temas; actualizaciones o casos clínicos, que cumple con las normas para la publicación de artículos que se detallan en cada número de la Revista de la Sociedad Boliviana de Pediatría 2. Es un artículo inédito, que no ha sido enviado a revisión y no se encuentra publicado, parcial ni totalmente, en ninguna otra revista científica, nacional o extranjera 3. No existen compromisos ni obligaciones financieras con organismos estatales ni privados que puedan afectar el contenido, resultados o conclusiones de la presente publicación. Si la publicación ha sido financiada, los términos de dicho financiamiento son detallados en carta adjunta. A continuación presento los nombres y firmas de los autores, que certifican la aprobación y conformidad con el artículo enviado. .............................................................................................................................................................................. .............................................................................................................................................................................. .............................................................................................................................................................................. .............................................................................................................................................................................. .............................................................................................................................................................................. El nombre del autor principal es: .............................................................................................................................................................................. El teléfono del autor principal es:......................................................................................................................... FAX:................................................................... Correo electrónico:...........................................@.................................................... Inclusión de mi correo electrónico en la publicación: SI ( ) NO ( ) 216 A7 SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA REGLAMENTO DE RELATOS Y CORRELATOS El Relato y los Correlatos son asignados en sesión administrativa del Congreso Nacional de Pediatría, para los dos siguientes eventos nacionales (Jornada y Congreso) con carácter específico. RELATO.- Es el desarrollo de una investigación en equipo, asignada a una Sociedad Departamental debiendo involucrar en la misma, a todos los socios departamentales, bajo la conducción de una Comisión de Relatos nominada por la Sociedad Departamental respectiva. Una vez hecha la asignación del tema y naturaleza de la investigación, la Sociedad Departamental responsable deberá: a) Elaborar un protocolo de investigación en un plazo no mayor a cuatro meses, someterlo a consideración del Comité Científico Nacional y difundirlo para su aplicación por lo menos seis meses antes de la fecha señalada para su presentación. b) Cada Comisión de Relato estará integrada por un mínimo de 3 y un máximo de 10 miembros, siendo todos ellos acreedores a la certificación respectiva. (siempre y cuando estén inscritos en el evento), pero sólo uno designado para hacer la presentación programada en Jornada o Congreso Nacional, en calidad de Relator Oficial. c) Cada relato deberá ser presentado al Comité Organizador por escrito, en no más de 10 carillas y por lo menos 30 días antes de su presentación oficial. El Comité organizador de la Jornada o Congreso tomará nota del nombre del Relator a tiempo de recibir la versión escrita del trabajo, para fines de programación y certificación. La forma de presentación debe ceñirse a las normas señaladas para la “Redacción de Artículo Médico” establecidas por el Comité Editorial de la Revista de la Sociedad Boliviana de Pediatría. d) Los relatos deberán ser necesariamente inéditos y su presentación se hará en 20 minutos. El material auxiliar -preferentemente diapositivas- debe ilustrarse con fotografías clínicas además de cuadros y figuras. CORRELATOS A. El protocolo de investigación será considerado a nivel del Comité Científico Departamental y la investigación puede tener carácter nacional o local. B. De preferencia, el trabajo debe ser en equipo pero no está excluido el desarrollo de un correlato a cargo de un solo profesional, si cuenta con la anuencia de la Sociedad Departamental respectiva. C. Cada correlato deberá ser presentado por escrito al Comité organizador en no más de 10 carillas y por lo menos 30 días antes de su presentación oficial. El Comité organizador de la Jornada o Congreso tomará nota del nombre del expositor -relator a tiempo de recibir la versión escrita del trabajo, para fines de programación y certificación. La forma de presentación debe ceñirse a las normas señaladas para la “Redacción de Artículo Médico” establecidas por el Comité Editorial de la Revista de la Sociedad Boliviana de Pediatría. D. Los correlatos deben ser inéditos y su presentación se hará en 15 minutos, con material audiovisual similar al requerido para los relatos. Nota: El presente reglamento ha sido elaborado por encargo de la Sesión Administrativa de la Sociedad Boliviana de Pediatría, realizada el 19 de septiembre de 1992 en Montero. La Directiva Nacional 217 A8 REGLAMENTO PARA LA PRESENTACIÓN DE TRABAJOS LIBRES EN POSTERS 1. Los resúmenes de los trabajos libres que se reciban en la Secretaría del Congreso o Jornada, serán evaluados por el Comité Científico y serán aceptados aquellos que se ajusten plenamente al reglamento de publicaciones. Contenido del resumen: a) Título: en mayúsculas. Debe ser conciso y de acuerdo al contenido del resumen. b) Autor (es). 2. La fecha límite para la presentación de los resúmenes será 2 meses antes del comienzo del evento. c) Institución: lugar donde se realizó el trabajo, dirección, localidad, código postal, teléfono y fax. 3. Los trabajos deben ser inéditos. No deben estar publicados ni haber sido presentados en otros eventos, del país ni del extranjero. d) Títulos profesionales. e) Dirección y teléfono. f) Resumen: incluirá: introducción, objetivos, material y métodos, resultados y conclusiones; Dejando un renglón luego del encabezamiento, se transcribirá el resumen que deberá estar escrito en el recuadro adjunto. 4. El autor o autores de cada trabajo deberán estar inscritos en el Congreso, para su certificación de presentación de trabajos libres. 5. Cada poster debe medir no más de 150 cm. de alto por 80 a 90 cm. de ancho. Las letras del título deben medir entre 2 a 2.5 cm. y las del texto de 1 a 1.5 cm. 6. Cada poster debe contener: Título del trabajo, seguido de nombre de los autores, lugar de realización, material, método, resultados y conclusiones. 7. La ubicación y el tiempo de permanencia de los posters será determinado por el Comité Organizador, en función de la cantidad de trabajos inscritos y los ambientes disponibles en la sede del evento y comunicado con anticipación al autor principal. 8. El primer autor y/o los colaboradores deben estar presentes a fin de responder a las preguntas de los asistentes y del jurado calificador a ser nombrado por el Comité Organizador. 9. Después del tiempo asignado, los posters deben ser retirados, para la presentación de otros trabajos. 10. Para que los trabajos libres sean aceptados se debe enviar un resumen dos meses antes del evento. Introducción: aporta los elementos que fundamentan la realización del trabajo. Objetivos: claramente explicitados. Material y Métodos: contiene la información necesaria para la realización y reproducibilidad del trabajo de acuerdo a los objetivos propuestos. Resultados: expone los datos más representativos en forma breve y clara. Se podrán incluir cuadros y gráficas simples, pero no ilustraciones ni referencias. Conclusiones: deben responder a los objetivos y resultados. 12. El Directorio Nacional de la Sociedad Boliviana de Pediatría premiará a los 3 mejores trabajos según informe del jurado calificador, mismos que serán entregados en la sesión de clausura de la jornada. 13. Cualquier punto que no se haya estipulado en este reglamento será resuelto por el Comité Organizador. Directorio Nacional SBP 11. El resumen debe ser escrito en máquina eléctrica o procesador de texto. No debe tener errores o enmiendas pues se publicará exactamente como se envíe. 218 A9 DIRECCIONES DE LAS SOCIEDADES DEPARTAMENTALES DE PEDIATRIA Dra. Lilian Acuña SOCIEDAD PACEÑA DE PEDIATRÍA Av. Brasil esq. Cuba No. 1399 Edificio La Habana. Of. 8 – Miraflores Teléfono: 2240081 Celular: 72533521 E-mail: [email protected] Dr. Ramiro Fabiani Soliz SOCIEDAD COCHABAMBINA DE PEDIATRÍA Av. América (este) esq. Quijarro No. 1747 Edificio Altamira Oficina D. 4297787 - 4458575 Celular: 71725548 – E-mail: [email protected] – E-mail: [email protected] Dr. Ivan Peñaranda Perez SOCIEDAD CHUQUISAQUEÑA DE PEDIATRÍA Colegio Médico Departamental Calle Pastor Sainz s/n. Teléfono: 6421884 - 6461230 Celular: 72879123 E-mail: [email protected] Dra. Magaly Frías SOCIEDAD TARIJEÑA DE PEDIATRÍA Caja CORDES. Calle Juna Misael Saracho s/n Celular: 70213048 E-mail: [email protected] – E-mail: sociedadtarijeñ[email protected] Dr. Omar Huarin Canaviri SOCIEDAD ORUREÑA DE PEDIATRÍA Colegio Médico de Oruro Calle Belzu Esq. Vasquez No. 610 Celular: 71850824 [email protected] Dra. Marlene Crespo SOCIEDAD BENIANA DE PEDIATRÍA Calle Cañaveral No. 98. Zona El Carmen Celular: 72842260 E-mail: [email protected] Dr. Walter MonteroJustiniano SOCIEDAD CRUCEÑA DE PEDIATRÍA Colegio Médico Santa Cruz Celular: 77642912 E-mail: [email protected] Dr. Gerardo Aramayo SOCIEDAD PANDINA DE PEDIATRÍA Hospital Roberto Galindo Celular: 76001163 Dr. Jaime Rada Cuentas SOCIEDAD ALTEÑA DE PEDIATRÍA Hospital Municipal Boliviano Ingles. Ciudad El Alto Celular: 77290360 Teléfono: 23677113 E-mail: [email protected] Dr. Omar E. Vargas Antezana SOCIEDAD DE QUILLACOLLENA DE PEDIATRÍA Colegio Médico de Quillacollo. Plaza Bolivar No. 11 Teléfono: 4365611 Celular: 70715110 E-mail: [email protected] Dr. Ricardo Zabala SOCIEDAD MONTEREÑA DE PEDIATRÍA Calle Ballivian esq. Cañoto No. 178 Celular: 77357912 E-mail: [email protected] Dr. Luis F. Zabaleta Loayza PAST PRESIDENTE INMEDIATO Colegio Médico Oruro Calle Belzuesq Vasquez No 610 Celular: 71842308 Teléfono: 5230128 E-mail: [email protected] Dr. Rolando Gonzales Zeballlos COORDINADOR y DELEGADO OFICIAL DE LA S.B.P Edificio Fernando V. Departamento 1101 Celular: 71522907 Teléfono: 2443509 219 A10 FUNDADORES DE LA SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA Dr. Cecilio Abela Deheza Dr. Carlos Ferrufino Burgoa Dra. María Josefa Saavedra Dr. Juan Antonio Osorio Dr. Roberto Pacheco Iturralde Dr. Nestor Salinas Aramayo Dr. Ernesto Trigo Pizarro Dr. Julio Pereira Dr. Enrique Hertzog Garaizábal Dr. Francisco Torres Bracamonte PRESIDENTES DE LA SOCIEDAD BOLIVIANA DE PEDIATRIA Dr. Carlos Ferrufino Burgoa Dr. Cecilio Abela Deheza Dr. Carlos Daza Meruvia Dr. Antonio Pizarro Dr. Luis V. Sotelo Dr. Cecilio Abela Deheza Dr. Luis Hurtado Gómez Dr. Carlos Daza Meruvia Dr. Humberto Zelada Vargas Dr. Jorge Dorado de la Parra Dr. Gonzalo Silva Sanjinez Dr. Jorge Tejerina Peñaranda Dr. Eduardo Aranda Torrelio Dr. Andrés Bartos Miklos Dr. Jorge Tejerina Peñaranda Dr. Eduardo Mazzi Gonzáles de Prada Dr. Oscar Sandóval Morón Dr. Javier Torres-Goitia Caballero Dr. Jaime Tellería Guzmán Dra. Ruth Guillén de Maldonado Dr. Ricardo Arteaga Bonilla Dr. Adalid Zamora Gutiérrez Dr. Orlando Jordán Jiménez Dr. Ramiro Fabiani Dr. Iván Peñaranda Pérez Dr. Darwin Martínez M. Gestión 1943 - 1948 Gestión 1949 - 1950 Gestión 1951 - 1953 Gestión 1953 - 1955 Gestión 1955 - 1957 Gestión 1957 - 1959 Gestión 1959 - 1967 Gestión 1967 - 1969 Gestión 1969 - 1972 Gestión 1973 - 1975 Gestión 1975 - 1977 Gestión 1977 - 1979 Gestión 1979 - 1983 Gestión 1983 - 1987 Gestión 1987 - 1989 Gestión 1989 - 1991 Gestión 1991 - 1993 Gestión 1993 - 1995 Gestión 1995 - 1997 Gestión 1997 - 1999 Gestión 1999 - 2001 Gestión 2001 - 2003 Gestión 2003 - 2005 Gestión 2005 - 2007 Gestión 2007 - 2009 Gestión 2009 - 2011 220 10 pasos para una Lactancia Exitosa DECLARACION CONJUNTA OMS/UNICEF (1989) 1. Tener una política de Lactancia Materna escrita que sea periódicamente comunicada al personal. 2. Entrenar a todo el personal para implementar esta política. 3. Informar a toda mujer embarazada sobre los beneficios y manejo de la lactancia materna. 4. Ayudar a las madres a iniciar la lactancia durante la primera media hora después del parto. 5. Enseñar a las madres cómo amamantar y cómo mantener la lactancia aún si se separan de sus bebés. 6. No dar a los recién nacidos ningún alimento ni bebida que no sea leche materna. Hacerlo sólo por indicación médica. 7. Practicar el alojamiento conjunto, dejar que los bebés y sus madres estén juntos las 24 horas del día. 8. Fomentar la lactancia materna a libre demanda. 9. No dar tetinas, chupetes u otros objetos artificiales para succión a los bebés que están siendo amamantados. 10. Promover la creación de grupos de apoyo a la lactancia materna y referir a las madres a éstos. 221